Raúl Villatoro, el "Tío Rulo", camina por todos los rincones del nuevo autódromo que se inauguró la tarde de ayer en el sector de Quillaycillo, y la mayoría de los asistentes lo saludan estrechándole la mano y con efusivos abrazos, haciéndole sentir sus agradecimientos por las gestiones que realizó para volver a tener competencias tuercas de calidad en Cartagena.

Fue en julio del 2014 cuando la nueva Agrupación de Pilotos del Club Automovilístico Deportivo Cartagena se reunió con un gran sueño: volver a instaurar las carreras para los fanáticos tuercas. En esa primera reunión fue designado presidente don Raúl Villatoro, verdadera leyenda viviente del automovilismo en Cartagena.

en "citrolas"

Su padre, del mismo nombre, comenzó en la década de los 80 con los primeros eventos tuercas, y junto a otros próceres como Ramón Ros Marchessi, alías "Don Calafate", o Iván Devebec, el querido "Catota", improvisaron una pista de tierra en el sector de New Life, se subieron a unas "citrolas" potenciadas y empezaron a dar vueltas en el circuito sin tener idea que estaban dándole el punto de partida a la gran tradición tuerca de la comuna balneario.

Los pilotos cartageninos fueron multiplicándose, y el Club Automovilístico Deportivo Cartagena se acostumbró a recibir socios todos los años. Tras las carreras en el sector de New Life de finales de los ochenta y principios de los noventa, los autos y pilotos se trasladaron hacia el autódromo Altos de Cartagena, ubicándose al lado de los terrenos del colegio Lions' School.

Hasta que en diciembre del 2010 se disputó la última jornada tuerca en el circuito cartagenino y una gran cantidad de fanáticos de la velocidad quedaron sin uno de sus eventos preferidos.

pista con cuotas

Pero aquella reunión en julio del 2014 fue clave para el resurgimiento de la actividad. La primera misión que tuvieron los integrantes de la nueva Agrupación de Pilotos del Club Automovilístico Deportivo Cartagena fue fijar una cuota de cinco mil pesos con la que se reunieron fondos para lograr lo imposible: tener un nuevo circuito con pista de tierra.

Tras varios meses de trabajo, el sueño se hizo realidad y hace 20 días quedó listo el nuevo circuito cartagenino que se ubica exactamente en el sector de Quillaycillo, a 13 kilómetros del cruce a Cartagena. El trazado de la pista es de 830 metros de largo, 20 metros de ancho y una recta principal 350 metros para acelerar a fondo.

un lleno total

Ya con todo los sistemas de seguridad aprobados, ayer se dio por inaugurado el nuevo circuito con la realización de la primera fecha del torneo "Ruge Cartagena", que entregará a los mejores pilotos de la temporada el trofeo Osvaldo Santibáñez, que lleva este nombre en homenaje a uno de lo más queridos socios de la agrupación, fallecido hace dos años.

Y parece que en verdad los tuercas estaban sedientos de velocidad, porque el circuito se llenó desde temprano con muchos autos particulares quedando incluso fuera de la zona de estacionamientos y las graderías con un lleno total. Incluso los más entusiasta se subieron a los techos de sus camionetas para tener mejor panorámica. La adrenalina y el rugido de los motores volvió para quedarse un buen tiempo en Cartagena. J