A tres meses de que se registrara el aluvión que afectó a varias localidades del norte del país y que dejó miles de damnificados, los efectos de esta catástrofe aún siguen latentes y mantienen a muchas personas viviendo en condiciones de emergencia.

Conscientes de esta situación, las empresas San Antonio Terminal Internacional (STI) y Muellaje del Maipo y sus trabajadores se unieron en la campaña solidaria 1+1, que permitirá llevar ayuda a las familias que todavía sufren las consecuencias del desastre.

Para conocer en terreno las necesidades de los vecinos más afectados en la localidad de Los Loros, en la comuna de Tierra Amarilla, hasta ese lugar fueron enviadas la encargada de Asuntos Comunitarios de STI, Loreto Flores, y la asistente social de la empresa, Mónica Castro. Ambas visitaron a quienes podrían ser los beneficiarios de los aportes que harán en conjunto los portuarios y STI.

En su encuentro con las representantes de STI, Damaris Díaz, una joven de 23 años que trabaja en una escuela municipal de Los Loros, contó que "con mi familia quedamos en condiciones desastrosas porque el aluvión se llevó nuestra casa". Ella, su hija y su madre comparten una pieza que un buen vecino les prestó a la espera de que les entreguen una vivienda de emergencia.

agradecida

Lorena Carmona, madre de Damaris Díaz, agradeció la preocupación de los trabajadores portuarios y ejecutivos de STI por colaborar para que ella y su familia se puedan reponer de esta verdadera tragedia. "Agradecería mucho lo que nos entreguen, porque lo que sea de ayuda para mis hijos es algo que se agradece con cariño. Estamos muy contentas de sentir que hay gente que nos quiere ayudar y esto nos hace pensar que no estamos tan solos", afirmó esta vecina de Los Loros.

El trabajador agrícola David Ramos, casado y padre de dos niñas, recordó con dolor la noche que el lodo arrasó con su casa en una toma ubicada en la parte alta de Los Loros. "No nos pasó nada, pero sicológicamente quedamos mal porque lo perdimos todo", sostuvo. Él y su esposa fueron encuestados por las representantes de STI en un encuentro desarrollado a pocos metros de donde quedaron los escombros de su destruido hogar.

sin nada

María Rivera y su hija Carla Bugueño relataron que el aluvión las dejó sin nada y que por lo mismo lo que más necesitan es materiales para levantar las piezas que permitan a los nueve integrantes de la familia vivir dignamente. "Teníamos agua por todos lados, era como un metro y medio de barro el que había adentro de la casa. Recuerdo que el refrigerador fue arrastrado por el aluvión y perdimos todo, las siete camas que teníamos y las cómodas con la ropa", rememoró.

Elisa Díaz, gerenta de Recursos Humanos, dijo que "nuestra gente, nuestros portuarios son muy solidarios en nuestra empresa y siempre quieren ayudar a quien lo necesite. Nosotros nos sumamos con la misma fuerza. La idea de ir era conocer cómo la gente está viviendo en Los Loros, sobre todo porque cuando pasa la catástrofe, el país se olvida de lo que pasó. Hicimos un catastro y esperamos en las próximas semanas llevar parte del espíritu solidario de San Antonio para la gente de Los Loros en Tierra Amarilla".

conmovida

Al término de la visita al norte, la encargada de Asuntos Comunitarios de STI, Loreto Flores, admitió que se sintió conmovida al entrevistar a las personas afectadas por el aluvión. "Me conmovió visitar a las familias y ver su emoción por sentir que hay gente totalmente externa que los quiere ayudar. Me gustó ver sus ganas de salir adelante, sobre todo a las mujeres, es algo que es importante valorar".

Mónica Castro, asistente social de STI, destacó que "siempre que hemos necesitado a los trabajadores, ellos han estado presentes en todas las campañas que hemos emprendido. Espero poder traspasarles a ellos lo que hemos vivido acá porque en la televisión se ve de una manera y era necesario, tal como lo dijeron ellos, venir a conocer en terreno la realidad de la gente del norte".

Para coordinar el recorrido por la localidad de Los Loros, las representantes de STI contaron con el apoyo del joven de Tierra Amarilla Samuel Valdés, y de la sanantonina Paola Fredes, quienes las llevaron a recorrer los lugares en que la tragedia aún se siente en el ambiente.

Julio Castillo, dirigente de los trabajadores de Muellaje del Maipo, afirmó que "estamos siempre disponibles para las cruzadas solidarias, nos parece muy bueno que la empresa haya hecho el mismo aporte que hicimos los trabajadores y esperamos que la ayuda llegue a quienes más lo necesitan".

solidaridad

Jorge Retamales, presidente del Sindicato Sicosem, expresó que "hoy día estamos con los compañeros del norte y nos sentimos contentos de ayudar de esta forma a la gente que lo necesita en el norte, siempre vamos a estar dispuestos a colaborar".

Se espera que la ayuda se transforme en la entrega de diez mediaguas equipadas, las que serán levantadas apenas se definan a las familias beneficiarias.

"En terreno podemos ver que aún queda mucho por hacer. Esta ayuda, que refleja el esfuerzo de los trabajadores por aportar y que fue apoyada por la empresa, es un grano de arena para que estas diez familias puedan contar con condiciones mínimas y un techo para empezar de nuevo. Esperamos poder seguir trabajando en conjunto, como lo hicimos en este caso, porque la solidaridad es un valor de los portuarios", concluyó Elisa Díaz. J