Cuatro años, ocho meses y seis días han pasado desde que el choque entre un bus de la empresa Tur-Bus y un camión dejó 20 muertos y 19 heridos en la Autopista del Sol. Desde entonces los familiares de las víctimas han esperado con ansias justicia y verdad.

Ayer sería una jornada decisiva en torno a sus anhelos, pero un tecnicismo legal impidió la realización de la audiencia de salida alternativa en el Sexto Juzgado de Garantía de Santiago.

El tribunal estimó que por la falta de notificación a cinco de las víctimas no podría discutirse el acuerdo al que la Fiscalía de Talagante y la empresa habían llegado previamente (ver recuadro), arreglo al que la Agrupación de Víctimas Tur-Bus San Antonio y los abogados querellantes se oponen tenazmente.

"Una vez más hemos quedado decepcionados del Ministerio Público. Siempre nos han pasado cosas en el camino que nos van dejando de lado. Nuevamente sentimos que es una injusticia más para las víctimas del Tur-Bus y con las familias", señaló Claudia Marchant, coordinadora de la agrupación, quien llegó acompañada de casi un centenar de sanantoninos al Centro de Justicia, en Santiago.

Ni justicia ni verdad

Para la agrupación, la verdad es clara. De acuerdo a los peritajes de la Universidad Federico Santa María, el fatal accidente se produjo por una falla mecánica ocasionada por la falta de mantención en la máquina.

El estudio de dicha universidad, más una serie de testimonios confirmarían el mal estado del bus. Sin embargo, los familiares dicen que a pesar de la evidencia, el Ministerio Público optó por evitar un juicio.

"La Fiscalía ha estimado que la solución más idónea para este caso no es llevarla a un juicio oral sino que a una suspensión condicional, que entre otras cosas contempla indemnización, y otros tipos de condiciones para los imputados (…) A la Fiscalía, de acuerdo a los antecedentes que tiene en carpeta, le parece que da satisfacción a la mayor cantidad de las víctimas", explicó el fiscal a cargo de la causa, Heriberto Reyes.

A pesar de que el persecutor es enfático en que la salida alternativa es del agrado del "porcentaje más importante" de los afectados, la agrupación encabezada por María Cristina Jara, que reúne a 16 familias de las víctimas, llegó ayer a la capital con la intención de rechazar la medida e insistir por la celebración de un juicio.

Alfredo Morgado, abogado querellante, explicó que sólo en el caso de que el tribunal acepte una suspensión condicional, buscarán la forma de incluir más condiciones a las que Tur-Bus y el Ministerio Público llegaron.

"Este tema debería verse en un juicio oral, público y controvertido, con todas las pruebas, con todas las pericias y los diversos testimonios. Sí había testimonios que tiempo antes del día de la colisión este bus presentaba una serie de falencias, que este bus vibraba y tenía un olor tremendamente fuerte a quemado", indicó.

"Nosotros hemos trabajado intensamente en conjunto con las víctimas en impulsar que se sepa realmente la verdad. Cuando nos señalan que esos hechos (el accidente) no sería más que producto de la impericia (del chofer), como nos dice el fiscal, creemos que el chofer tenía la pericia suficiente (…) y que otros actores deberían hacer incidido", agregó Morgado.

"Nosotros requerimos que se investigara y desde esa perspectiva es que se pidió un informe de alto estándar, que es precisamente de la Universidad Federico Santa María, el cual arrojó una conclusión precisa y certera en torno a que por la falta de mantenimiento se producen una fatiga de material y el accidente", finalizó el abogado.

Fiscalía no quiere juicio

Consultado por la negativa de la Fiscalía de llevar a Tur-Bus a un juicio, el fiscal Heriberto Reyes expresó que "por qué tendríamos que llevar todas las causas a un juicio, si usted me lo plantea en esos términos, yo le podría decir que para la Fiscalía, dado el escenario actual (…) sería un discurso muy popular y muy facilista".

"Acá hay muchas víctimas que murieron dramáticamente, otras que quedaron gravemente lesionadas, cuestión que no nos resulta indiferente, nadie resulta indiferente frente a eso y ante ese escenario es un discurso muy facilista. Vamos a buscar al culpable, vamos a llevar a Tur-Bus a juicio", reiteró Reyes, quien ha sido duramente cuestionado por la desaparición de evidencia y la falta de pericias en el proceso.

Nueva audiencia

El Sexto Juzgado de Garantía fechó para el próximo 2 de septiembre una nueva audiencia y amplió para ese día el periodo de investigación.

María Cristina Jara, presidenta de la Agrupación de Víctimas Tur-Bus, sostuvo que aprovecharán ese tiempo extra para dialogar con la Fiscalía y que cambien de parecer.

"Para mí, realmente, que se haya fijado otra fecha, en lo personal creo que no es malo, para que podamos seguir conversando con el Ministerio Público y que tomen conciencia sobre a lo que quieren dirigirnos. Nosotros desde el principio, desde que se formó esta agrupación, hemos dicho que el objetivo es verdad y justicia", señaló.

"Queremos una justicia no sólo para nuestro caso, queremos justicia para nuestro país y evitar accidentes como este y marcar un precedente. Vamos a luchar para que condenen, no necesariamente a los ocho procesados, sino que para que la empresa quede al descubierto, de que no hace las mantenciones y para que las empresas de transportes de pasajeros entiendan que llevan personas no material de construcción en su buses", finalizó Jara. J

Las medidas del acuerdo entre el Ministerio Público y la Empresa Tur-Bus serían el pago de una indemnización a los familiares de las víctimas, que los ocho imputados fijen domicilio, es decir, que el tribunal conozca por un plazo de entre uno o tres años el lugar de su residencia; y que la empresa financie un congreso sobre seguridad en transporte de pasajeros. El acuerdo necesita la aprobación del tribunal, sin embargo, ayer la audiencia no pudo llevarse a cabo. Los familiares de las víctimas no están satisfechos con la solución de la Fiscalía.

"Nuevamente

sentimos que es

una injusticia

más para las

víctimas del Tur-

Bus y con las

familias".

"Un informe de

alto estándar (...)

arrojó una

conclusión

precisa y certera

en torno a que

producto de la

falta de

mantenimiento

se produce una

fatiga de

material y el

accidente".