El recuento lila El año 2015 del SAU: de la ilusión a la expectación
Ningún hincha de San Antonio Unido olvidará el 2015. El sueño de subir a la Primera B estuvo a 90 minutos de ser realidad. En Puerto Montt el 5 de mayo se diluyó y terminó en pesadilla, con la goleada que le propinó el local al equipo que dirigía Luis Musrri.
Fueron 12 meses marcados por la ilusión en el primer semestre, y ahora, en este nuevo torneo, con Jorge García en el banco, la expectación inunda a los fanáticos de la escuadra del puerto.
No se partió bien este campeonato 2015-2016, con derrota en casa, en el inexpugnable Olegario Henríquez. La irregularidad marcó el semestre y provocó la salida de Jorge Miranda Kirk del mando técnico. Llegó el "Chicho" quien junto a sus dirigidos se comió una humillante goleada en Los Andes. Ese 4-1 que le propinó Trasandino el 5 de diciembre marcó un antes y un después. El SAU consiguió dos triunfos consecutivos. Se quedó con el "Clásico del Maipo" con un 2-1 sobre Melipilla en el municipal y luego fue a Angol para derrotar a Malleco por 1 a 0. Así terminó el 2015 el SAU, en una expectante posición, con síntomas de mejoría en su juego y con la esperanza de vuelta en su hinchada.
San Antonio se identificó con su equipo. El estadio registró una asistencia récord de 2 mil 200 personas en el partido de la penúltima fecha ante Deportes Maipo Quilicura. En la previa, en una mañana se fueron todas las entradas. La efervescencia se notaba en cada rincón de la ciudad y la provincia. Todos hablaban del SAU. Hoy a pesar de la irregular campaña, la relación entre el hincha y el equipo sigue.
Los protagonistas de este año recuerdan esos episodios que quedaron grabados a fuego en la memoria del hincha.
Johanns Dulcien fue uno de los artífices de la campaña lila en el primer semestre. El goleador histórico de la Segunda hizo un tremendo aporte para instalar al SAU en el duelo final de la fecha 32 con opciones de subir y sus recuerdos de la campaña están intactos. "El partido con La Pintana allá lo recuerdo, el otro con Valdivia acá, antes de Melipilla, donde nos expulsaron a 4. Lo perdíamos y lo dimos vuelta, fue un golpe anímico importante. El partido con La Pintana lo recuerdo, porque perdíamos hasta el minuto 80 y se nos iban las ilusiones. Ganamos (con dos tantos de su autoría en los minutos 81 y 84), los hinchas lloraban. Justo Puerto Montt perdió y quedamos dos puntos arriba. Lo recuerdo con mucho cariño", rememoró el "Fantasista".
Para el tocopillano lo trascendental del torneo 2014-2015 fue que "el equipo pasado, los dirigentes y cuerpo técnico le dieron un antes y después a San Antonio Unido. La gente se ilusionó mucho y ahora sigue pendiente de lo que pasa con el SAU. El principio de año fue muy bueno, porque logramos generar una ilusión y que la gente estuviera con el equipo".
Todo de nuevo
Tras la derrota en Puerto Montt, el SAU inició un nuevo proceso. Se fueron casi todos los jugadores (siguen Jaime Lobos, Lucas Triviño y Johanns Dulcien). Luis Musrri partió a La Serena y en la dirigencia lila se encontró en Jorge Miranda Kirk al reemplazante.
El paso del estratego estuvo marcador por la irregularidad, las polémicas y las peleas a través de los medios con el vicepresidente Andrés Isaza.
Partió mal, con una derrota en casa el 22 de agosto. Colchagua ganó en los descuentos 2-1 y fracturó la relación del DT con parte de la hinchada, que nunca lo quiso y pedía a gritos y con carteles su salida.
Lo mejor de su paso fueron los triunfos sobre Trasandino (4-1) en el Municipal y la victoria como visita en La Pintana. Sin embargo, otra derrota en casa, esta vez ante Valdivia por 3-1, el 31 de octubre gatilló su salida.
Para el portero Rodrigo Paillaqueo el paso de Miranda Kirk se marcó por los altos y bajos en el juego. "Fuimos irregulares. En algunos momentos tuvimos la oportunidad de pegar un combo y no lo hicimos. Después nos costó reaccionar; recibimos un golpe duro, que fue la salida de un técnico por cosas externas al plantel. Eso nos golpeó fuerte. Fue una noticia que nos llegó de golpe. Al grupo le costó asimilarlo", reconoció el capitán.
Tras la goleada sufrida en Los Andes, el "Pailla" fue uno de los más críticos, asumió el liderazgo del grupo y remeció la interna del plantel.
Luego de los dos triunfos seguidos, el meta, sus compañeros y la hinchada están expectantes. El SAU terminó el año cuarto en la tabla, a siete puntos del líder, Naval, y evidenciando mejorías en su juego. Hoy el ascenso no se ve tan lejano. J
El 8 de noviembre la dirigencia lila confirmó el arribo de Jorge García a la banca del SAU. Para el "Chicho" el inicio no fue fácil. "Al comienzo costó un poco, pero ya nos adaptamos, tengo conocimiento total de lo que es la institución, los jugadores y la ciudad. Creo que es positiva la evaluación y vemos el futuro, con mucho ánimo, fe y esperanza", analizó.
El DT ve mejorías y eso lo llena de optimismo. "Con Melipilla, se hizo no un gran partido, pero se mejoró notablemente. Y esto se ratificó con Malleco, donde se jugó de muy buena manera", explicó.
El SAU llegó a la última fecha del torneo 2014-2015 como el líder, con dos unidades más que Puerto Montt, pero perdió en el sur.
Hoy el equipo lila está en la cuarta posición del campeonato de la Segunda División, a 7 cuerpos del puntero, Naval (37).
El 16 de enero el SAU recibirá a Linares en el estadio Municipal por la fecha 20 del campeonato.