Raúl Abarca Pailamilla
Si fuese los fines de semana, a lo mejor, los vecinos del sector de la Piedra del Jote, en Tejas Verdes, lo entenderían. Pero esta historia se repite casi todos los días, como relatan varias afectadas, las que no quisieron revelar sus nombres por temor a represalias.
A metros del memorial que recuerda a las víctimas del terremoto de 2010, un grupo de a lo menos seis personas llega habitualmente a ingerir alcohol y cigarrillos cuenta una afectada.
"Casi todos los días llega un grupo de jóvenes a tomar y a fumar. Meten ruido toda la noche con la música, los gritos y sus autos enchulados", detalla una vecina, visiblemente molesta.
Como cuenta esta misma mujer, estos jóvenes arriban a eso de las 20 horas a esta zona residencial con sus autos adaptados. El sonido de sus bramadores alerta a las familias que una nueva noche de carrete comienza en Tejas Verdes.
"Una vez toda esta cuadra estaba llena de autos", apunta otra residente a una calle de 100 metros aproximadamente, donde se estacionan los vehículos.
Otra pobladora no quiso quedar afuera de esta denuncia y comentó que "a nosotros igual nos da un poco de miedo esta situación, por lo menos a mí. Me siento insegura porque uno no sabe lo que puede provocar el alcohol y las drogas en estos jóvenes".
La primera mujer que reveló el caso explicó a Diario El Líder que ha realizado las denuncias correspondientes en Carabineros, sin embargo, no han sido suficientes para acabar con estas fiestas en la vía pública.
"Aparte que no podemos dormir porque están hasta muy tarde, al otro día somos nosotros los que tenemos que limpiar el lugar que queda lleno de botellas, cigarros y basura", culminó la mujer.
20:00 A esa hora llegan habitualmente los jóvenes al sector de la Piedra del Jote, en Tejas Verdes.
