Eduardo Díaz: las experiencias del fútbol al servicio de los más chicos
Hace dos años que está a cargo de la Escuela de Fútbol de Huracán que se desarrolla los sábado. Tras un paso por las divisiones inferiores de tres equipos, este profesor de Educación Física quiere dejar su huella en el fútbol formativo.
Los sábado por la mañana la cancha de pasto natural de club Huracán se llena de niñas y niños que comienzan a dar sus primeros pasos en el fútbol. La escuela de los rojos es una de las más tradicionales dentro del fútbol amateur sanantonino con más de una década de funcionamiento. De ahí el prestigio obtenido durante esta trayectoria en la que han pasado cientos de jugadores que hoy se desempeñan tanto en los equipos de Huracán como en otras instituciones a las que han emigrado.
Un semillero que en la actualidad tiene a más de 120 integrantes entre los 5 y 13 años de edad, destacándose además la presencia de 12 chicas que desean hacerse un espacio dentro del fútbol femenino.
Con esta realidad futbolera se encontró hace dos años Eduardo Díaz. A los 24 años, titulado de la carrera de Educación Física en la Universidad de Las Américas en Viña del Mar, tomó contacto con los directivos de Huracán con la intención de darle un nuevo giro a la mencionada Escuela de Fútbol.
"Llegué a jugar como arquero al club Huracán y conversamos con los dirigentes para darle una vuelta al tema de la escuela. La idea era que el club pudiera crecer en cuanto al tema formativo, entonces armamos un proyecto para traer profesores y armar un buen grupo de trabajo", afirma Díaz, quien actualmente lleva dos años al frente de la escuela y suma el mismo tiempo siendo titular de la serie de Honor de Huracán.
Bajo los tres palos
Eduardo Díaz Carreño previo a estudiar Educación Física en la Ciudad Jardín intentó llegar al fútbol profesional en el puesto de arquero.
"Pero en un momento ya tuve que elegir y preferí el estudio. Es que también veía a algunos compañeros que intentaban con el fútbol y después se les pasaba el tiempo. Entonces opté por estudiar Educación Física, porque siempre me ha gustado el deporte", reconoce el joven sanantonino que actualmente tiene 26 años (nació el 13 de abril de 1990).
Fue justamente en la Escuela de Fútbol de Huracán donde Eduardo comenzó a tomarle el gusto al puesto de arquero. A los 7 años se inscribió para comenzar los primeros pasos con la número 1 en la espalda en la cancha de avenida México.
El recientemente fallecido "Petita" Elio Menares (su deceso fue el pasado 10 de junio) fue su primer entrenador. "Al 'Peta' lo tuve apenas llegué al club, por lo que le tenía un cariño enorme. Yo jugaba de arquero desde chico, pero no tenía muchos referentes del fútbol profesional", recuerda.
Cuando tenía 12 años, Colo Colo realizó una prueba de jugadores en la cancha de Huracán. Eduardo se probó como arquero y su actuación fue tan convincente que resultó seleccionado para ser parte de los entrenamientos de la sub 12 de los albos.
Viajaba desde el Litoral Central hacia el estadio Monumental todos los días. Los pasajes se los pagaba la escuadra popular. "Pude entrenar dos años en los cadetes de Colo Colo, lo que es una gran experiencia. Uno de los entrenadores de arqueros en las inferiores era Marcelo "Rambo" Ramírez, por lo que el nivel de exigencia era bastante alto", afirma.
Paso por el sau
Tras aquellos dos años en Colo Colo, y con la intención de seguir proyectándose en el fútbol y poder llegar a ser jugador profesional, en el 2004 Eduardo se unió a las filas de San Antonio Unido. El entrenador era Georgelino Osorio.
"Estuve dos años en el SAU y tuve la oportunidad de estar con compañeros con los que formamos un buen grupo", asevera el también guardameta del club El Convento de Santo Domingo.
Sus buenas actuaciones en el pórtico lila llamaron la atención del entrenador placillano Emiliano Astorga, quien lo contactó para llevárselo a Deportes Melipilla.
"Estuve entre el 2007 y el 2010, y los últimos dos años tuve la posibilidad de entrenar en el primer equipo y jugar algunos amistosos. También viajaba todos los días ya que tenía la intención de llegar a ser jugador profesional. Los entrenamientos eran fuertes, con cargas pesadas, porque en Primera el estado físico es importante. Estuve con entrenadores como Ronald Fuentes y el argentino Ricardo Dabrowski, y como preparador de arqueros con Jorge Martínez. Pude aprender mucho de aquellos años en Deportes Melipilla", reconoce el sanantonino.
Del arco a las clases
Y pese a que tenía una opción para jugar a préstamo por San Antonio Unido, el 2010 Eduardo Díaz decidió terminar con el sueño de debutar en Primera División. Comenzó a estudiar en Viña del Mar la carrera de Educación Física en Las Américas. En la universidad jugó como titular durante varios campeonatos universitarios.
"Creo que me faltó perseverancia para haber logrado llegar a ser jugador profesional. Pero las experiencias que pude vivir ahora las traspaso a los chicos de la Escuela de Fútbol de Huracán", señala Eduardo Díaz, quien volvió en el 2015 a vivir a Santo Domingo a la casa de sus padres.
Justamente en la escuela huracanina, el arquero sanantonino está entregando sus conceptos e ideas aprendidos a lo largo de su camino por las divisiones inferiores del fútbol chileno.
Junto a un staff técnico que componen Humberto Castro, Fabián Arce, Cristián Crisóstomo, Diego Montecino, Patricio Montecino e Ingrid Montencino, el profesor de educación física Eduardo Díaz está realizando un trabajo que agradecen tantos los pequeños como los apoderados. "La idea es que acá se fomente lo recreativo y no lo competitivo, así que esa es nuestra idea principal", afirma el número 1.