Conozca el violento origen de los payasos asesinos
La moda de asustar a las personas con un disfraz de payaso tiene un macabro origen real: un perturbado sicópata que fue ejecutado en 1994, tras una serie de crímenes.
Agencia.
Si bien es cierto que la palabra "payaso" ha ido tradicionalmente ligada a la diversión, los buenos momentos y las risas, un halo de terror parece haber cubierto este término multicolor. Hace varias semanas apareció una moda en Estados Unidos y Canadá consistente en vestirse con ropa de bufón -peluca fosforito y nariz roja incluidas- para amedrentar y asustar a cualquiera que tuviera la mala suerte de cruzarse con estos desagradables bromistas.
La extraña idea nace por el personaje de la serie "American Horror Story: Freak Show", donde aparece el escalofriante payaso "Twisty", un sicópata asesino que se disfraza de payaso para asesinar.
La inspiración de "Twisty" es nada menos que John Wayne Gacy, o "Pogo, el payaso asesino".
Casado, con dos hijos y homosexual reprimido, a los 26 años intentó abusar de un jovencito al que maniató.
Todavía inexperto en eso de los asesinatos, su víctima escapó, lo denunció a la policía y el bueno de Wayne fue a parar a la cárcel. Lo condenaron a diez años de prisión, pero al igual que en su vida pública, Gacy fue en recluso modelo y consiguió que, a los 18 meses de estar en prisión, lo dejaran en libertad. Salió el 18 de junio de 1970.
Tras ser liberado volvió a sus quehaceres. Se reintegró y levantó un negocio próspero que daba trabajo, cómo no, a los lolos del barrio.
Además daba fiestas en su jardín a las que acudían las almas más piadosas de los alrededores, gente de las asociaciones en las que Gacy trabajaba, como la Defensa Civil de Chicago o los Jaycees, una especie de cámara de comercio para la juventud. Como si todo esto fuera poco, se enfundaba su disfraz de "Pogo", un payaso más terrorífico que divertido, y acudía en sus ratos libres a entretener a los niños de los hospitales y orfanatos cercanos. Un buen disfraz sin duda: ¿Quién iba a pensar que tras aquel payaso se escondía un violador, asesino y maníaco en potencia?
Gordo, bajo y afable
John Wayne Gacy no era ningún portento de la belleza: era un tipo más bien gordo y bajo, afable y, eso sí, con pinta de una muy buena persona.
Cuando no se hallaba ocupado en abusar y en hacer desaparecer a alguno de sus trabajadores, salía de caza. Acudía a lugares de encuentros homosexuales, donde seleccionaba a sus víctimas. Los llevaba a su casa para maniatarlos, torturarlos, sodomizarlos y, al final, estrangularlos.
El sótano de Gacy ya estaba repleto de cadáveres. El buscar un hueco libre para enterrarlos llegó a convertirse en todo un problema, de modo que comenzó a arrojar cadáveres al cercano río Des Plaines.
Ciertamente, a Gacy tampoco parecía preocuparle demasiado la discreción en aquellos tiempos y nunca fue un lince ocultando sus atrocidades. Los rumores y los dedos acusadores no tardaron en señalarlo cuando comenzó a llevar a casa a sus víctimas a plena luz del día y más cuando un buen número de sus empleados había desaparecido sin dejar rastro alguno.
La desaparición de Robert Piest, su última víctima, puso a la policía sobre su pista. La madre de Piest lo estuvo esperando el 11 de diciembre de 1978, el día de su cumpleaños, pero Gacy se anticipó y realizó su macabra celebración.
La madre, cuando denunció su desaparición, dijo que el chico había ido a un aparcamiento a verse con un contratista para un empleo de verano. Piest trabajaba en una farmacia y allí informaron a la policía de que Gacy había estado en la tienda realizando un presupuesto. Tirando del hilo poco a poco, todo condujo a Gacy.
En su casa encontraron 33 cuerpos y todo un catálogo de efectos personales para identificarlos.
El payaso asesino había conservado trofeos de casi todas sus víctimas, aunque ni siquiera recordaba el nombre de la mayoría. En su desfachatez, incluso llegó a vender el coche de uno de sus asesinados a un empleado.
Nunca se ha sabido a ciencia cierta a cuantas personas mató Wayne Gacy.
26 años tenía el payaso asesino cuando intentó abusar sexualmente de un jovencito que lo denunció a la policía.