Copa de chocolate se transforma en el postre del verano en Cartagena
Esta preparación es original de Colombia, desde donde proviene la mayoría de los trabajadores que elaboran estos productos en la playa Grande del balneario. "A la gente le llama la atención tanto chocolate", dice el administrador.
Es el producto más requerido por los miles de turistas que llegan diariamente a las playas de Cartagena.
"Nosotros vinimos porque nos pasó el dato un amigo que vendían este postre y nos dijo que era muy bueno", cuenta Jocelyn Retamales (27), quien ayer llegó en familia a probar esta sabrosa copa de chocolate.
Carlos Astudillo es el administrador de la pastelería Napoleón, que está ubicada en avenida Los Suspiros, en plena Playa Grande. Desde este lugar son cientos los turistas que diariamente endulzan la vida con este postre, que ojo, como recalca este trabajador, no está relleno con helado.
"El recipiente es de puro chocolate comestible. Contiene con bizcocho, remojado en yogurth y leche condensada. Además contiene manjar, crema chantilly y frambuesa, y arriba lleva frutilla y durazno", describe.
Astudillo afirma que desde que abrieron este recinto en septiembre de 2016, este ha sido el producto estrella, sobre todo, en esta época estival. "A la gente le llama la atención tanto chocolate".
Tras probar por primera vez esta copa de chocolate, Jocelyn comenta que "está súper rica, totalmente recomendable. Aparte que se nota que es fresquito. Nosotros somos de acá y como no conocíamos esta pastelería vinimos a probar qué tal era y nos gustó esta copa".
Sabor colombiano
Carlos Astudillo afirma que diariamente vende mil unidades de este producto que es un postre típico de Colombia, desde donde proviene la mayoría de los trabajadores de esta pastelería.
"Este negocio pertenece a un muchacho colombiano. Como no ubicaba mucho este lugar y cómo funcionaba este rubro, yo lo estoy ayudando porque antes me dedicaba a esto de la pastelería. A la vez que le arriendo el recinto, también ayudo en la administración", menciona.
Y agrega: "Acá todo el personal es colombiano. Los pasteleros y la misma gente que atiende. La idea del local ese esa, tener la buena onda de la gente colombiana y también los sabores que ellos traen desde allá porque son muy buenos".
-¿Por qué cree usted que ha gustado la repostería de Colombia?
-En este rubro para que a uno le vaya bien lo principal es que los pasteles sean frescos, del día; si no es así, la gente se da cuenta y se va. Nosotros acá todos los días elaboramos pasteles, pan, tortas, copas de chocolate. Si nos quedamos con pasteles, -que siempre quedan, pero muy pocos- se los regalamos a la gente que está viviendo en la calle. Lo segundo es que los colombianos son especialistas en hacer copas, tortas, que tienen mucha más elaboración, quizás, que las nuestras, porque ellos son muy detallistas.
Luzmaría Peña (52) llegó apenas hace 4 días a Chile y su última parada fue la comuna de Cartagena, donde se encuentra su esposo trabajando en este local.
Peña confiesa que en su natal Colombia "nos dedicamos mucho a la pastelería, somos bien detallistas y esta copa de chocolate es de allá. Se consume mucho, porque es muy rica".
"Pese a que llevo pocos días en Chile todo ha andado de maravilla, la gente es muy respetuosa y además muy gentil", describe.
María del Mar (19), proveniente de la ciudad de Pereira, lleva un año en la provincia de San Antonio. Se vino junto a su pololo buscando un mejor futuro.
"Estoy contenta trabajando acá, junto al mar, como mi apellido", dice entre risas esta trabajadora y enfatiza que "la gente ha recibido de buena manera los productos que acá se hacen. Diariamente viene mucha gente a buscar esta copa de chocolate. Yo creo que les gusta por todo el chocolate que lleva, que llama mucho la atención y porque además es muy grande".
El valor de esta copa es de 2 mil pesos y la pueden comprar desde las 9 de la mañana hasta las 1 de la madrugada en este local cartagenino.
2 mil pesos cuesta esta copa de chocolate que está rellena con bizcocho, remojado en yogurth y leche condensada. Además, contiene manjar, crema chantilly y frambuesa, y arriba lleva frutilla y durazno.

