Rodrigo Ogalde
Un dictamen de la Tercera Sala de la Corte de Apelaciones de Valparaíso revocó ayer la medida cautelar de arresto domiciliario nocturno, del Tribunal de Garantía de San Antonio, y ordenó la prisión preventiva para los dos cabos de Carabineros que el lunes fueron formalizados por un delito de robo con violencia que afectó a un hombre en Llolleo.
Los imputados, que fueron dados de baja por la institución policial, corresponden a los ex funcionarios de iniciales M.A.G.B. y R.E.M.S., quienes eran de dotación de la Subcomisaría de Carabineros de Llolleo.
En la audiencia efectuada el pasado lunes en el Tribunal de Garantía de San Antonio, la Fiscalía argumentó que los dos ex carabinero, en medio de un control de identidad, se apropiaron de 8.000 pesos y un teléfono celular de la víctima antes de subirla al calabozo del vehículo policial y luego golpearla y abandonarla en el sector de La Frontera, en Llolleo. Sin embargo, la defensa cuestionó esa tesis y descartó la participación de los imputados en el caso.
Y aunque el fiscal Oyarzún había solicitado la medida cautelar de prisión preventiva, el juez Gonzalo Celedón accedió al arresto domiciliario nocturno, determinación a la que apeló ayer el Ministerio Público mediante el recurso alegado por la abogada Sandra Obando.
Tras esto, la Corte de Apelaciones revocó lo dictaminado por el juez Celedón en primera instancia y ordenó que los dos ex policías fueron enviados a la cárcel mientras dure la investigación de la causa.
Desde la Quinta Zona de Carabineros declinaron referirse a este tema, pues el comandante Pablo Silva, de la Prefectura de San Antonio, había aclarado, en Diario El Líder, la postura de la institución respecto a que se siga el curso judicial de este caso y que los involucrados fueron dados de baja.