Rodrigo Ogalde

Hace una semana todo San Antonio estaba impactado con la noticia del accidente de una máquina de la empresa Pullman Bus Lago Peñuelas, que volcó en la avenida Santos Ossa, en el acceso a Valparaíso.

A siete días de ocurrida aquella tragedia, la vida para algunos de los pasajeros del bus se llenó de momentos difíciles.

Jorge Rosende (54), el vecino de Bellavista que sufrió la amputación de su mano izquierda, hasta ayer seguía internado en la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital Carlos van Buren.

Elizabeth (29), su hija, confirmó que su estado es de riesgo vital, pero que todos sus seres queridos miran con esperanza lo que pueda pasar en los próximos días.

"El lunes empezó a abrir los ojitos, está sedado y sigue en la UCI en riesgo vital, él siente mucho dolor de todo. Le preguntamos algo y mueve la cabeza en señal de que nos entiende. Eso representa una gran esperanza para nosotros, hay que mirar para adelante. El doctor explica que él sigue complicado por su fractura (de pelvis)", afirmó la única hija de Rosende.

Los familiares de este sanantonino han resistido con oraciones y el apoyo de muchos vecinos y amigos del ex portuario.

La joven insistió en que hasta ahora lo que menos ha hecho ella es preocuparse de la situación judicial del chofer que guiaba la máquina siniestrada aquel jueves 1 de marzo.

Así también, Elizabeth dijo que aún se reciben donantes de sangre para su padre en los hospitales Carlos van Buren y Claudio Vicuña.

Universitario

La mañana del jueves 1 de marzo, el joven cartagenino José Egusquiza (18) viajaba en el bus Lago Peñuelas para asistir a las primeras clases de la carrera de Ingeniería en Transportes que este año él comenzaría a estudiar en la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso.

"Era primer día de clases en la universidad", contó al recordar que alcanzó a oír al auxiliar del bus que avisó que iban a chocar.

"Con mi mano izquierda me cubrí, pero como el bus se volcó, me arrastró toda la cara y la mano izquierda sobre la tierra. Quedé atrapado y tenía una pierna atascada. Yo gritaba y veía a la gente herida que estaba en el suelo. Un caballero trató de ayudarme a estar tranquilo porque mi rostro estaba lleno de sangre", relató.

Además, José sufrió un corte profundo en su rodilla izquierda. Pese a sus lesiones, ese día llamó por teléfono a su madre para informarle lo que había ocurrido. La mujer se desarmó en llanto.

Tras ser internado en el hospital Carlos van Buren, solo ayer José regresó a su casa en Cartagena. Ahí lo esperaban sus seres queridos. Y aunque salvó con vida, en su cara están las marcas de los 40 puntos con que le suturaron las heridas, al igual que en su mano y su rodilla izquierdas. Su vuelta al hogar se concretó sobre una silla de ruedas.

"No podré entrar a las clases, mi familia decidió que congele por este año para que pueda estar en rehabilitación con el traumatólogo y sicólogo. Estoy en mi casa mucho mejor, pero tengo que estar en rehabilitación de 6 a 8 meses. Aunque puedo caminar, tengo que movilizarme en silla de ruedas para que cicatrice bien la rodilla izquierda que tengo lesionada", detalló.

Para este joven estudiante, que ve truncado su sueño de ir a la universidad, los gastos en que su familia ha tenido que incurrir después del accidente, deberían ser pagados por la empresa del bus Lago Peñuelas. "Ellos deben responder por lo que ocurrió ese día", dijo al confesar que tiene mucha rabia por verse afectado de esta manera con una situación que él no provocó.

"Estoy triste porque yo no viajé a mi primer día de clases con la mano y la cara cortadas", se lamentó José Egusquiza, quien señaló que su padre tuvo que comprar la silla de ruedas.

Carlos Duarte, representante de Pullman Lago Peñuelas, escuetamente, aseveró que el seguro del bus siniestrado ha cubierto todos los gastos en salud de los lesionados y recordó que en 40 años de historia este es el primer accidente que tiene una máquina de la empresa y resaltó que este se debió a "una negligencia" del conductor.

2 de marzo ocurrió el accidente de bus Lago Peñuelas al ingreso a Valparaíso.