Una visita repentina del diputado Andrés Celis al Centro de Cumplimiento Penitenciario de San Antonio dejó en evidencia la deplorable realidad en la que trabajan los gendarmes.

Tras ver la presencia de hongos en las habitaciones, el hacinamiento, los graves deterioros en los servicios higiénicos y en el almacenamiento de alimentos en congeladores oxidados, el diputado decidió enviar un oficio a la Seremi de Salud para que fiscalizara la cárcel local.

El parlamentario dijo que "no hay ventilación adecuada y como las piezas no reciben sol, se mantienen todo el tiempo con olor a humedad y proliferan los hongos. La situación es tan repulsiva que afecta el estado anímico de los gendarmes. Por eso es indispensable que la Dirección Nacional de Gendarmería tome las medidas necesarias para que sus funcionarios no tengan que continuar viviendo en estas condiciones".

Luego de estas gestiones, la Seremi de Salud respaldó la denuncia de Celis mediante un informe que detallaba una larga lista de infracciones sanitarias que se detectaron en el recinto penal sanantonino.

"Las vulneraciones a los derechos fundamentales de los trabajadores son graves, por lo que correspondería que se pronuncie el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) para evitar que los funcionarios sigan en estas terribles condiciones", insistió el parlamentario.

Por su parte, Francisco Uribe, presidente de la Asociación Nacional de Funcionarios Penitenciarios (Anfup), señaló que "la Seremi sacó dos informes de lo que vieron en la unidad y el director regional de Gendarmería emitió una providencia donde ordena subsanar todas esas deficiencias. Sin embargo yo no sé cómo piensan hacer todo esto, si ni siquiera han invertido un peso o han dispuesto de recursos para poder solucionar estas situaciones".

De acuerdo al relato de Uribe, el problema se reduce netamente a un asunto económico, ya que la jefatura directa de San Antonio "ha hecho lo posible con los escasos recursos que tiene. Pero no hay dinero. Lo único que se ha podido hacer es limpiar con cloro las murallas, pero así no se van a ir los hongos. Si no inyectan recursos seriamente, no vamos a tener cambios, porque en dos meses más va a estar lleno de hongos nuevamente".

El dirigente gremial postula que la solución pasa por construir una ampliación en el segundo piso del recinto. "Aquí hay espacio para ampliar, y tener más cuadras para el personal, pero no inyectan recursos".

-De todas estas observaciones que se hicieron, ¿cuál cree que es la más grave?

-Todas. Porque el hacinamiento que hay en la cuadra del personal es evidente. No hay ni 20 centímetros entre cama y cama.

Gendarmería

Consultados por Diario El Líder, desde Gendarmería indicaron que "como institución estamos preocupados de las condiciones laborales y de bienestar de nuestro personal".

Mediante un comunicado oficial aseguraron que hay proyectos para mejorar las condiciones en las que trabajan los funcionarios.

"En esa línea, independiente de las medidas habituales y permanentes, como sanitización de espacios y mantenciones, hay proyectos de mayor envergadura destinados a mejorar las dependencias destinadas al personal uniformado del CCP de San Antonio. Entre estas es posible mencionar proyectos para la reubicación de la central de alimentación de la población penal y la central de acopio de desechos orgánicos", detallaron.

Además manifestaron que a estas medidas se agrega la revisión del sistema eléctrico y una serie de reparaciones de infraestructura y artefactos cuyos trabajos ya están calendarizados para su ejecución.