Mónica Jorquera Escobar
La mañana de ayer afuera del Tribunal de Garantía hubo desórdenes que terminaron incluso con un llamado a Carabineros. Se vieron involucrados en una acalorada discusión familiares de un hombre imputado por violación y los seres queridos del menor que habría sido víctima de tal ilícito.
Incluso el implicado acusó que al ingresar al juzgado intentaron atropellarlo.
Con ese marco de violencia se inició ayer la audiencia de formalización de cargos en contra de un joven de 29 años al que acusan de haber violado y abusado sexualmente de un niño desde que tenía 6 años, en 2012, hasta que cumplió los 12.
El abogado querellante en la causa, Héctor González, explicó que "el victimario era una persona de confianza de la familia, que trabajaba con el padre del menor. Laboraba en la administración de un hotel, donde permanecía en el lugar como ayudante (...) y en las ocasiones en que quedaba solo con el menor habría procedido a actos de abuso y de violación".
El mismo niño le reveló a su padre lo que le había ocurrido desde que era pequeño. Esta develación sucedió, explicó el abogado, cuando se fue a vivir con su padre, quien obtuvo la tuición del niño en 2017.
"Un hermano le exhibe una foto del victimario al niño afectado y éste lo reconoce y cuenta a su padre que esa persona lo violaba. Dice el niño que nunca denunció porque lo amenazó de muerte", detalló González.
Defensa
Por su parte, la defensa del imputado, cuyo nombre se mantendrá bajo reserva para proteger a la víctima, argumentó que no existió dicha violación y expuso que la denuncia habría ocurrido luego de que el supuesto abusador comenzara una relación amorosa con la madre del menor.
"Hoy el imputado mantiene una relación con la madre, lo cual complica todo. El magistrado (Juan Pablo Flores) consideró que una supuesta infidelidad (de la madre de la víctima hacia el padre) hacía una sombra en la credibilidad del hecho", analizó Héctor González.
Agregó que "pese a ello, la investigación llevada adelante por la fiscalía, por el fiscal especializado en estos casos (Álvaro Mansilla), cuenta con los suficientes antecedentes con los cuales se pudo formalizar hoy (ayer)".
Atendiendo a que el acusado no tiene antecedentes penales, a que se presentó voluntariamente para ser formalizado y a que el menor de edad se cambió de ciudad, el juez Juan Pablo Flores decretó que el imputado se mantenga con arresto domiciliario, arraigo nacional y prohibición de acercarse al niño.