Jesús Farías Silva

La Fundación Tunquén Sustentable, junto a un grupo de vecinos de Algarrobo, denunció que el proceso de ampliación del Santuario de la Naturaleza, que el Gobierno Regional pidió formalmente en mayo del año pasado, dejó fuera un valioso terreno para el ecosistema y la biodiversidad de la zona. Allí se pretende desarrollar un conjunto habitacional de 198 viviendas.

El rechazo de la fundación, que ya había manifestado su preocupación previamente, surge luego de que el Consejo de Monumentos Nacionales (CMN) determinara a través de un informe que el sector sur de las dunas de Tunquén no presenta características para ser protegido legalmente bajo la declaración de santuario.

El documento se opone a la idea que tenía la misma institución en 2014, y propone un polígono alternativo para la expansión del área protegida, que pasaría a incluir la ladera norte, el campo de dunas, la laguna seca y la costa marina.

Corresponde a un trazado distinto a lo pretendido por la Fundación Tunquén Sustentable y la Fundación Kennedy para la Conservación de Humedales, que también ha intervenido en la polémica.

El sábado pasado la senadora Isabel Allende, y los diputados Marcelo Díaz, Camila Rojas y Jorge Brito, más autoridades de la Municipalidad de Algarrobo, visitaron el lugar.

Más casas

"Ese polígono que ellos dejan fuera es de suma importancia por toda su riqueza. No se puede cortar el área donde las aves migratorias anidan. El CMN esgrime que el lugar está muy intervenido por el hombre y que existen pozos areneros en el sector sur, lo que es un error, porque los pozos areneros se encuentran en el sector norte", aseguró José Fliman, presidente de la Fundación Tunquén Sustentable.

De acuerdo a los antecedentes presentados por las organizaciones medioambientales, el sector excluido sirve como barrera natural de contención en caso de tsunamis e inundaciones, lugar donde se pretenden instalar las viviendas.

"Se trata de una zona riesgosa para la habitación y para los usuarios de la playa, porque se encuentra amenazada ante eventos de tsunamis y marejadas", denunció el representante de la agrupación dedicada a la preservación del lugar.

Además, el terreno cuenta con importantes hallazgos arqueológicos provenientes de asentamientos de la Polinesia y la presencia de especies de vegetación endémicas que son fundamentales para el desarrollo del ecosistema del santuario.

Fliman aseveró que el "mordisco inmobiliario" son terrenos que se encuentran actualmente en venta para viviendas turísticas, "sin que se hayan promovido medidas que aseguren la protección de los valores naturales".

Lo que viene

La decisión final se encuentra ahora en manos del Consejo de Ministros por la Sustentabilidad (presidido por el ministro del Medio Ambiente e integrado por los ministros de Agricultura, Hacienda, de Salud, Economía, Fomento y Reconstrucción, Energía, Obras Públicas, Vivienda y Urbanismo, Transportes y Telecomunicaciones, Minería y Desarrollo Social), organismo que revisará los antecedentes entregados por las agrupaciones y el informe elaborado por el CNM.

El departamento de Medio Ambiente de la Municipalidad de Algarrobo informó, a través de Facebook, que "estuvimos recorriendo el Santuario de la Naturaleza Humedal de Tunquén invitados por la Fundación Tunquén Sustentable".

"Al recorrido asistieron parlamentarios, miembros de ONGs ambientales de la provincia de San Antonio, el concejal Marco González y vecinos de Tunquén con los que pudimos apreciar en terreno los innumerables atributos naturales y culturales de este lugar patrimonial", agregaron.

"Hoy se está solicitando al Ministerio del Medio Ambiente, la protección total de esta área a través de la ampliación del Santuario de la Naturaleza actual", complementaron.

Además "pudimos registrar la acción de las marejadas sobre la playa y campo dunar", expusieron.

"Se trata de una zona riesgosa para la habitación y para los usuarios de la playa, porque se encuentra amenazada ante eventos de tsunamis y marejadas",

José Fliman,, presidente de la Fundación Tunquén Sustentable.