En "Terminator: destino oculto" el futuro es femenino y latino
La secuela del clásico de acción y ciencia ficción, cuyo estreno está programado para este jueves tras varios retrasos, aborda la política migratoria de EE.UU.
"Terminator: destino oculto", la secuela del clásico de acción y ciencia ficción que se sitúa temporalmente 27 años después de "T2: El juicio final", está dominado por personajes femeninos muy fuertes y marcado por la diversidad racial, al tiempo que se adentra en temas candentes como la política migratoria de Estados Unidos. En la nueva entrega, dirigida por Tim Miller, Terminator y Sarah Connor, encarnados por Arnold Schwarzenegger y Linda Hamilton, vuelven a reunirse, aunque esta vez deberán encarar un reto juntos y cambiar el destino para salvar al mundo.
"No sé si estábamos buscando lanzar un mensaje político, pero sí es un aliciente muy bonito que se ve en esta película", dijo Hamilton al ser consultada en la avant premiere en Londres sobre el "guiño" que la nueva entrega de la saga ofrece, convirtiendo a Dani, una mexicana que debe cruzar la frontera de forma ilegal, interpretada por la actriz colombiana Natalia Reyes, en la salvadora de la humanidad.
El paso de la frontera y las escenas que tienen lugar en el interior de un centro de detención de inmigrantes fueron difíciles para el equipo de la película, que asegura haber sido en todo momento consciente de que se trata de "una problemática muy actual" que debe abordarse con gran sensibilidad.
"Cuando rodamos estas secuencias, Tim Miller dio un gran discurso en el que dijo que es lamentable que tengamos que representar la verdad de la inmigración en Estados Unidos tal y cómo es. Y lloró porque es consciente de lo real de la situación", recalcó Linda Hamilton, afirmando que "todo lo que esta película y cada uno de nosotros podamos aportar para reflexionar sobre este tema es otro punto a favor".
En su misión para salvar a Dani y al futuro de la humanidad, los protagonistas de la película cuentan con la ayuda del envejecido T-800 de Schwarzenegger, quien interpretó a la tenaz máquina por primera vez en "Terminator" (1984). Sin embargo, la carga de la película se la lleva el tridente femenino formado por Linda Hamilton, Mackenzie Davis y Natalia Reyes, y aunque "El juicio final" ya hacía lo posible para mostrar personajes femeninos fuertes, en "Terminator: destino oculto" ellas son las protagonistas.
Sin embargo, en una entrevista para el diario "Clarín" Linda Hamilton advirtió que no se trata de una versión feminista de "Terminator": "Tratamos de alejarnos de esa proyección. Creo que se trata de una película con actores de ambos géneros haciendo lo suyo con mucha convicción. No lo veo como un filme donde la onda sea mostrar cómo las mujeres toman el mundo, si no más de: haz bien tu trabajo, que el mundo se va a solucionar, o derrumbar, solo".
En la película destaca también un fuerte contingente de actores latinos e hispanos, en el que destaca la presencia del mexicano Diego Boneta, quien alcanzara la fama por su rol protagónico en la serie de Netflix "Luis Miguel".
Un nuevo comienzo
El filme descarta las historias que se cuentan en "Terminator 3: La rebelión de las máquinas" (2003), "Terminator: Salvation" (2009) y "Terminator: Génesis" (2015), que rompían con la premisa de las dos originales. Esto se debe a que James Cameron, guionista y director de las dos primeras películas, no estuvo involucrado en las entregas subsiguientes, pero aquí oficia de productor.
El creador de la franquicia vino un poco a poner orden entre tanto salto temporal, y fue el encargado de convencer a Linda Hamilton, que de hecho es su exesposa, para revivir al fundamental personaje de Sarah Connor, esa suerte de Virgen María de armas tomar que, junto a su hijo John, supo salvar al mundo del mal augurado apocalipsis del 29 de agosto de 1997. Se afirma que ésta sería la última entrega de la saga que, justamente, popularizó la frase el "I'll be back" (Volveré).
En 1984, el realizador de "Titanic" no imaginaba el impacto que causaría "Terminator" una película original de ciencia ficción y acción, de presupuesto modesto, acerca de un ciborg de un futuro apocalíptico que viajaba al presente para asegurar la exterminación de la raza humana.
Cameron describe "Terminator: destino oculto" como una secuela directa de "Terminator 2", una que recaptura el tono fascinante de la Terminator original y su secuela: "Tiene la misma intensidad, la misma sensación de no andarse con rodeos y de un terror abyecto. Supuestamente, la primera película tenía que espantarte hasta la médula ante la posibilidad de un futuro sombrío, pero también ver la supervivencia de una chica por la que terminamos por preocupamos. Esta película, al igual que las otras, lidia con la amenaza de una colisión humana contra una súper inteligencia artificial, que hoy es mucho menos ciencia ficción de lo que era en 1984 ó 1991".