Tragedia de fin de año: querido futbolista amateur falleció de un infarto fulminante
La repentina muerte de Williams Rojas (43) estremeció a cientos de personas que compartieron con él en el club Norteamérica de Placilla y en Sitrans, donde trabajaba. Todos lloran amargamente su partida.
Incredulidad. Esa era la expresión que todos tenían ayer en el velorio de Williams Rojas Muñoz (43). Nadie daba crédito a que el querido jugador de fútbol amateur había fallecido.
La sorpresa que sentían frente a esta tragedia de fin de año es porque el "Willy", como le decían de cariño, se encontraba bien de salud hasta la tarde del miércoles pasado.
"Tenía dolor de espalda. Concurrimos a la urgencia (de una clínica ubicada cerca del hospital Claudio Vicuña), pero no estaban ateniendo, por eso fuimos a buscar una silla de ruedas al hospital para llevarlo. Mi papá trató de caminar, pero no podía y se desvaneció. Le dio un infarto", explicó Alexis Rojas (19), el hijo mayor de Williams.
Cuando Rojas Muñoz ingresó al Servicio de Urgencia no pudieron salvarle la vida. Había fallecido de un infarto fulminante.
La misma noche del miércoles comenzó a divulgarse la noticia. Muchos pensaron que se trataba de una mala broma.
Alexis, junto a su hermana, de 6 años, y su madre, María Isabel Valeria, estaban ayer recibiendo un sinnúmero de pésames y palabras de cariño.
"A mi papá lo querían todos, nos han brindado mucho apoyo, nos han acompañado mucho", dijo Alexis, quien, al igual que su padre, es futbolista y juega en la Selección Chilena de talla baja.
Pesar
Quienes sintieron profundamente el deceso del "Willy" fueron, además de su familia, sus compañeros del club Norteamérica, donde jugó por una década. También lo sufren sus excompañeros de colegio del Instituto del Puerto y sus colegas de Sitrans, donde laboró por 26 años.
"Lo conozco de segundo básico, para mí esto es tan fuerte como si hubiese muerto un hermano. Con él teníamos códigos de amigos de toda una vida. Nos juntábamos todas las semanas, pasábamos unidos, todavía no dimensiono que no está", expresó Francisco Valenzuela, quien fue compañero del Willy en la generación del 94 del Instituto del Puerto.
Ayer el cuerpo fue trasladado hasta la sede del club que tanto amó, el Norteamérica de Placilla.
"Willy ayudó a formar un nuevo ciclo de los seniors del Norteamérica, como también el cuerpo técnico. Siempre fue un hincha del club y dejaba todo en la cancha. Esta pérdida nos deja muy mal, sobre todo a sus compañeros de equipo en los seniors. En todos estos 100 años de historia del club es una de las pérdidas más dolorosas", dijo Diego Silva, jugador de los seniors del "Norte".
Y las palabras de desconsuelo abundaban. Óscar Araya, quien trabajó 24 años junto a Rojas en Sitrans, estaba absolutamente consternado por la repentina partida de su amigo. "Esto es cómo perder a un hermano. Nos daba alegría a todos, era el que echaba la talla, que nos hacía enojar solo para hacerse el chistoso. Si te dabas vuelta, te pegaba un agarrón, así era. Siempre estaba con la sonrisa en la cara y cuando lo necesitabas siempre estaba contigo. Es un vacío enorme el que nos deja".
Funeral
Desde la tarde de ayer el cuerpo de Williams Rojas está siendo velado en la sede del club Norteamérica, en calle Miraflores 340, cerro Placilla.
En ese lugar se efectuará hoy un responso, a las 13.50 horas, para luego salir en una caravana que se dirigirá hasta la empresa Sitrans, donde le rendirán un homenaje.
Finalmente, el funeral del trabajador se llevará a cabo en el cementerio Parque del Sendero, a las 16 horas de hoy.