"Plácido Domingo es un depredador que ha hecho esto repetidamente"
Patricia Wulf es la primera de 27 mujeres que denunció al cantante por hostigamiento y acoso.
La mezzosoprano Patricia Wulf, la primera mujer que denunció públicamente el acoso sexual que sufrió hace tres décadas por Plácido Domingo, dio una entrevista a Efe, en la que asegura que el acusado "fue agresivo" con ella y con otras mujeres.
Ella es una de las 27 mujeres que, según el sindicato de artistas de Estados Unidos, sufrió el acoso del artista, quien la semana pasada aceptó "toda la responsabilidad" de sus acciones; pero luego rectificó y aseguró que "nunca" ha sido agresivo con nadie.
Wulf recordó el momento en que lo conoció. "Fue como conocer a una persona que tiene un halo a su alrededor. ¿Sabes? En ese tiempo, puede que suene tonto, pero era casi como conocer a Dios".
En la entrevista relató que la segunda vez que se vieron, él tuvo mayor contacto físico con ella, la saludó y besó cerca de los labios. Las siguientes veces aumentaba la cercanía de sus cuerpos y la incomodidad.
A pesar de que la artista no se sentía a gusto con la situación, lo dejó pasar, pues él era director artístico en la ópera de la "Flauta Mágica", en la cual ambos trabajaban.
Acoso
Wulf relató uno de los episodios que vivió tras bambalinas. "Cuando salía del escenario, yo me iba a la izquierda para marcharme. Siempre que él estaba en la ópera se colocaba en uno de los extremos del escenario. Me esperaba y venía hacía mí colocándose así de cerca y me preguntaba: "¿Patricia, tienes que irte a casa esta noche?" (Wulf usa su mano para situarla delante de su rostro e ilustrar lo cerca que supuestamente se colocaba Domingo)".
Esa fue la primera vez que Patricia quedó desconcertada y conmocionada por las actitudes de él.
Al respecto, señaló que, "me di cuenta de lo que estaba pasando. Le dije: sí, me tengo que ir (a casa). Me fui rodeándolo y me metí en mi camerino. Recuerdo sus continuos golpes en la puerta del camerino: "Patricia, ¿Puedo entrar? ¿Puedo entrar?". Lo hacía cuando el encargado de vestuario estaba en la habitación vistiéndome. Era perturbador".
Protección
Para evitar este tipo de situaciones, la artista debió optar por crear una estrategia que la defendiera. "A menudo yo entraba en el camerino y cerraba la puerta. (Las cantantes) Laura Knoop y Julia Anne Wolf solían estar también en el vestidor y sabían lo que estaba pasando. Él llamaba a la puerta: ¿Puedo entrar? ¿Puedo entrar?. No, no, me estoy vistiendo. ¿Puedo entrar? Finalmente cuando estaba vestida, él entraba y hablaba mirándome al pecho".
Este tipo de actos violentos sucedieron más de diez veces. Por otra parte, en relación al poder que Domingo tiene en la industria, señaló que "es extremadamente importante que lo expulsen del sindicato. Este es un depredador que ha hecho esto repetidamente. Es un hábito".