Así han aumentado los casos de covid-19 en San Antonio
Sobre la base de los informes epidemiológicos del Ministerio de Salud, que incluyen el detalle de los contagios de las comunas de todo el país, se hizo un recorrido de cómo la pandemia ha afectado a la provincia, a poco más de tres meses de la aparición del primer caso en Chile.
El pasado 3 de junio se cumplieron tres meses desde que se confirmó el primer caso de coronavirus en Chile. Se trató de un hombre de 33 años con antecedentes de haber viajado a Singapur, donde ya se registraba un brote del nuevo virus. Fue atendido en el hospital de Talca y luego derivado a su casa, según se informó en esta oportunidad.
El primer caso en San Antonio se reportó recién el viernes 20 de marzo. Correspondió a una mujer de 31 años con domicilio en Santo Domingo, quien fue diagnosticada en Santiago.
Dos días antes, el 18 de marzo, el presidente Sebastián Piñera había decretado estado de excepción constitucional para combatir la pandemia, que fue declarada oficialmente como tal el 11 de marzo por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Se consideró que por haber llegado a los cinco continentes y por tener un alto índice de transmisión era un peligro para la salud humana.
Una vez que comenzaron a hacerse más frecuentes los casos en Chile, el Ministerio de Salud de empezó a emitir informes epidemiológicos con el detalle comuna por comuna de cuántos casos hay todo el territorio nacional. El 30 de marzo fue el primero.
Recogía un caso de la comuna de Algarrobo y otros siete de San Antonio. El primer caso de Santo Domingo no fue reportado, sin embargo, eran solo ocho contagiados.
En menos de dos meses la situación cambió dramáticamente. El último reporte, difundido la noche del sábado muestra más de 700 casos.
El segundo de ellos, del 2 de abril, ya hablaba de 11 casos, siete de ellos en algarrobo y 4 en San Antonio.
El tercero confirmó 17 casos entre las comunas de Algarrobo y San Antonio. Recién en el quinto informe, del 8 de abril, se sumó la comuna de Santo Domingo con sus cinco primeros casos. Para entonces había 22 contagios confirmados en la provincia de San Antonio.
Dos días después, el sexto informe detalló 28 casos y en el séptimo se revelaron contagios en todas las comunas de la provincia de San Antonio. Había ocho en algarrobo, dos en Cartagena, tres en El Quisco, dos en El Tabo, 17 en San Antonio y cinco en Santo Domingo. En total eran 37. De ahí en adelante la curva solo siguió en aumento.
En el último informe del 28 de abril se superaban los 100 casos. Con 10 en Algarrobo, seis en Cartagena, 11 en El Quisco, nueve en El Tabo, 53 en San Antonio y 17 en Santo Domingo.
Mayo fue peor. Para el día 8 los casos sobrepasaban los 200. San Antonio sumaba 125, Santo Domingo 21, Cartagena 14, El Tabo 14, El Quisco 16 y Algarrobo 12.
A mediados de mayo el informe del día 15 mostró otro aumento sustancial, superando los 300 infectados. Solo una semana, el 22, la cifra se disparó a 437 en la provincia. La comuna de San Antonio llegaba a los 280 casos.
El mes terminó mal. El último informe del 29 de mayo mostró 556 casos totales en la provincia de San Antonio. Solo en la comuna puerto eran 359. El mayor aumento se produjo también en El Quisco, donde acumulaban 44, siendo la segunda comuna con más contagios. Se mantuvo así en el primer informe de junio cuando los casos superaron los 600.
Y en el último informe epidemiológico el salto fue mayor: 751 confirmados, según el documento emitido la noche del sábado.
Rodrigo Vergara, infectólogo de la Universidad de Valparaíso, indicó que de forma paralela a la cuarentena "deberían implementarse, en lugares que deben seguir funcionando, como la venta de alimentos y otros donde acude gente, dispensadores de agua para lavarse las manos, porque el alcohol gel te sirve cuatro, cinco veces, después no te sirve".
"Hay que ir generando un control en ferias o supermercados de manera de no aglomerar. Todas esas medidas hay que intensificarlas", expuso.
"Pero hacer una cuarentena para que la gente se aglomere comprando cosas sin control, no sirve de nada", resaltó.
Complementó que "es una alternativa válida, pero tiene que ser con las medidas complementarias de controles específicos, aislamiento y lavado de manos".
"Independiente de la cuarentena o no para San Antonio, Valparaíso y otros lugares, el comportamiento individual es lo más importante", aseguró Vergara.
Y el experto volvió al ejemplo de las ferias. "No pueden funcionar de forma normal, se les deben dar las herramientas para que la gente pueda lavarse las manos".
"Hacer una cuarentena para que la gente se aglomere comprando cosas sin control, no sirve de nada",
Rodrigo Vergara,, infectólogo.