Rodrigo Ogalde Cofré

Apenas había pasado un par de horas de la conmemoración del Día del Trabajador Portuario, que cada 22 de septiembre recuerda a los cuatro dirigentes portuarios asesinados en 1973 por la dictadura, cuando en San Antonio ocurrió un incidente en que hoy incluso ha intercedido el Instituto Nacional de Derechos Humanos.

Los hechos son los siguientes: pasadas las dos de la madrugada del miércoles 23 de septiembre el dirigente de la Agrupación de Remolcadores y Lanchas de Prácticos (Relasan), José Manuel Ibarra Ibarra (49), fue detenido por una patrulla de Carabineros después que, minutos antes, saliera desde su casa en el cerro Alegre rumbo al puerto a cumplir su tarea en la lancha Dawson, que cerca de las tres de la mañana debía desatracar un buque en Puerto Panul.

Sin embargo, en dicho trayecto ocurrió un incidente que hoy tiene enfrentados a los portuarios y Carabineros, pues dos policías, tras concurrir a la calle Arturo Prat por una denuncia de intento de robo al restaurante Secret Garden, descendieron de la patrulla e iniciaron un procedimiento que terminó con Ibarra golpeado, detenido y formalizado por el delito de robo frustrado.

El hombre, que aseguró que iba vestido con su chaqueta de color naranja y reflectante, contó a Diario El Líder su versión de este suceso.

"Siempre bajo (al puerto) caminando porque me queda cerca y el lugar donde yo vivo es seguro. El buque se adelantó y el capitán de la lancha me llamó a las 01.45 horas para que fuera a trabajar. Iba bajando por la calle Arturo Prat y cuando llegué a un paradero de colectivos me encontré con el cuartel móvil de Carabineros; ellos pararon el vehículo policial y un carabinero abrió la puerta y me preguntó para dónde iba: le dije que iba al puerto a trabajar y quise seguir caminando y el carabinero me dijo 'párate'. Tomé mi celular para mostrarles el salvoconducto, y los carabineros pensaron que yo los iba a grabar o no sé qué cosa, entonces me dijeron que me iban a llevar detenido por sospecha", relató Ibarra.

Agregó que cuando él intentaba demostrarle a uno de los carabineros que efectivamente se dirigía a su trabajo, el otro policía bajó de la patrulla y de un golpe le botó su teléfono celular. "Eso no me pareció para nada, entonces le amagué con un forcejeo y ahí ellos se fueron totalmente encima de mí y me golpearon de una forma totalmente desproporcionada. Me golpearon mucho, quedé súper mal, boté mucha sangre porque me rompieron las cejas".

El tripulante narró que "me tomaron muy fuerte del cuello. Yo les decía que soy trabajador portuario y que por favor pararan porque soy padre de familia y tengo tres hijos. Finalmente, me entregué porque ya no podía respirar; así que cuando llegó la patrulla tuve un alivio porque ellos pararon", añadió.

En breves instantes, los policías llevaron a Ibarra hasta las afueras del restaurante "Secret Garden" donde habían denunciado un robo frustrado. Y pese a que él negó estar implicado en el hecho, fue detenido por su presunta participación en ese delito.

La misma mañana del miércoles, José Ibarra, quien presenta lesiones en distintas partes de su cuerpo, fue formalizado por el delito de robo frustrado y quedó en libertad mientras avanza la investigación. En su defensa, él señaló que conoce al dueño del restaurante Secret Garden, Héctor Zeballos, quien lo llamó para decirle que lamentaba mucho que lo hayan asociado con aquel ilícito que afectó al recinto comercial.

"Esto fue un abuso de parte de Carabineros", afirmó el afectado.

Versión policial

El miércoles por la noche, la Prefectura de Carabineros emitió un comunicado donde informó que "el trabajador de remolcadores José Manuel Ibarra Ibarra habría sido detenido hoy (el miércoles) a las 2.30 horas aproximadamente en calle Arturo Prat debido a un llamado al nivel 133 que alertaba de un robo a un local comercial de nombre Secret Garden. A la llegada del personal policial, el sujeto es sorprendido saltando hacia la calle desde el interior del recinto. Por lo anterior, se le fiscaliza, opone tenaz resistencia y se genera un forcejeo que termina con el detenido lesionado".

La versión policial agrega que "mientras se procedía a su control, sale la víctima junto a su pareja, quienes sindican inmediatamente al sujeto como el autor del intento de robo, además de reconocer sus vestimentas, por lo que se procede finalmente a su detención por robo frustrado, infracción al toque de queda y artículo 318, pasando a control de detención, previa constatación de sus lesiones en el hospital local e informar al fiscal del Ministerio Público".

La institución recalcó que "sin perjuicio de lo descrito, Carabineros iniciará una investigación para aclarar los hechos, y sus resultados se comunicarán oportunamente".

Portuarios

El caso de José Ibarra ha generado el apoyo de la diputada Camila Rojas y de los dirigentes de la Unión Portuaria Centro (UPC).

Los voceros locales de la Unión Portuaria de Chile (Upch) exigieron una reunión con la gobernadora provincial de San Antonio, Gabriela Alcalde, y los jefes de Carabineros en la zona. La cita se concretó durante la mañana y en ella se llegó al acuerdo de que los dos carabineros que participaron en la detención del tripulante serán apartados de las tareas de patrullaje en las calles y solo cumplirán labores administrativas mientras avanza la investigación interna.

Jorge Salazar, representante de la Upch y dirigente sindical en DP World San Antonio, explicó que en el cónclave con la gobernadora se le exigió sanciones para los policías involucrados.

"Pedimos la suspensión de los funcionarios que están involucrados con la golpiza a nuestro compañero; ahí tuvimos un entredicho con el teniente coronel de Carabineros porque para él eso significaba desvincularlos. Lo que logramos finalmente es sacarlos de las calles y cumplirán labores administrativas mientras dure la investigación, no pueden desvincularlos de inmediato. Nos garantizaron el debido proceso y le pedimos a la gobernadora la mayor celeridad para la investigación y lograr que esto tenga justicia para José y todos los trabajadores portuarios, porque en el escenario que vivimos el miércoles no están dadas las condiciones como para que los trabajadores sigan efectuando la labor en la noche en toque de queda", afirmó Salazar.

"Me tomaron muy fuerte del cuello. Yo les decía que soy trabajador portuario y que por favor pararan porque soy padre de familia y tengo tres hijos",

José Ibarra.

Nos garantizaron el debido proceso y le pedimos a la gobernadora la mayor celeridad para la investigación y lograr que esto tenga justicia para José y todos los portuarios",, Jorge Salazar

"Mientras se procedía a su control, sale la víctima junto a su pareja, quienes sindican inmediatamente al sujeto como el autor del intento de robo",

Carabineros de San Antonio.