Juan Gilberto Hernández O
A fines de septiembre la comunidad del Techo Fraterno Guanelliano de Llolleo Alto dio a conocer la difícil situación económica a la llegaron en medio de la pandemia y la tristeza que les provocó tener que suspender las ayudas solidarias que entregan hace años a los más necesitados.
La imposibilidad de reunirse en medio de la emergencia sanitaria y los distanciamientos obligados hicieron que se suspendieran todas las reuniones en las que habitualmente los participantes de la labor comunitaria del Techo Fraterno organizaban la recolección de fondos para ayudar a los más necesitados a través de una despensa que servía tanto para repartir mercadería como para los almuerzos solidarios.
En ese duro contexto, las hermanas del Techo Fraterno Guanelliano, con el apoyo de vecinas y vecinos comprometidos con la labor social, organizaron una rifa virtual que tuvo un éxito rotundo, ya que superó todas las expectativas y permitió reunir los fondos que se necesitaban para mantener la importante labor social que esta comunidad religiosa realiza en beneficio de los más desposeídos de la comunidad.
Agradecimiento
Sobre la exitosa rifa y los aportes recibidos, a nombre de la comunidad del Techo Fraterno, Alejandra Jara dijo a Diario El Líder que "agradecemos públicamente las colaboraciones y las ayudas que nos hizo la gente porque quedamos muy contentos en nuestra comunidad. Ahora vamos a tener nuevamente el comedor solidario para las personas que lo necesiten y además vamos a comenzar a hacer pan los días viernes para venderlo a bajo costo aquí mismo en población"
Según el relato de esta vecina colaboradora, actualmente "en la lista hay alrededor de 26 personas que vienen a buscar los alimentos que les entregamos una vez a la semana, pero eso es relativo porque a veces también hay personas en situación de calle que también llegan a pedir ayuda y nosotros no se la podemos negar".
Pandemia
Alejandra Jara reconoció que el 2020 "ha sido un año muy difícil porque no nos hemos podido juntar para hacer nuestras actividades para reunir fondos, y con los pocos recursos que tenemos igual hemos visitado a nuestros adultos mayores y les hemos llevado pañales. Ha sido duro y por eso nos pusimos de acuerdo con las monjitas para hacer esta rifa virtual".
26 familias de la comuna reciben semanalmente alimentos de parte de Techo Fraterno.