Escuela de Lenguaje Aliwen promueve el uso de la tecnología y la prevención para un seguro retorno a clases presenciales en 2021
Las salas son climatizadas, tienen computador conectado a un sistema audiovisual, mesas con separación transparente para evitar contagios, generadores de ozono y un túnel sanitizante en la entrada.
La Escuela de Lenguaje Aliwen atiende a niños y niñas con trastornos del lenguaje de entre 3 y 5 años y 11 meses cumplidos a marzo sin excepción a la regla. Cuenta con tres niveles: medio mayor, prekínder y kínder.
Las matrículas para el año académico 2021 están abiertas y al ser un establecimiento subvencionado por el Estado, es totalmente gratuito.
Este colegio cuenta con excelencia académica, profesoras de educación diferencial especialistas en trastornos de lenguaje y fonoaudióloga.
La sostenedora de la escuela ubicada en Rafael de la Presa 711, en Llolleo, Sandra Muñoz, explica que para la seguridad de la comunidad educativa y por un retorno a clases presenciales con todas las medidas sanitarias para evitar contagios de coronavirus, en el establecimiento se instaló un túnel sanitizante en la entrada con ácido hipocloroso; también un moderno sistema de climatización con iones de plata incorporados que ayudan a limpiar el ambiente purificando el aire de cada una de las salas de clases para asegurar un retorno seguro.
Otro de los sistemas de sanitización instalados en la Escuela son dos generadores de ozono que disminuyen las partículas de oxígeno eliminando virus, gérmenes y bacterias, manteniendo sanitizado el aire. Está conectado todo el día, programado para que funcione durante 20 minutos cada una hora y en la noche, tres horas ininterrumpidas, como lo aconseja el fabricante.
Se restauraron mesas, se puso separador en cada una y se compró mobiliario.
"Era un sueño tener un sistema audiovisual bueno y con ahorros propios, ahora logramos tener uno de última tecnología donde está conectado el computador con el sistema visual y de audio para que los niños puedan trabajar espaciados. El fin pedagógico es poder usar las tecnologías para la educación", declaró la sostenedora, agregando que el que usaban anteriormente era un computador reacondicionado entregado por el Ministerio de Educación con un procesador muy lento.
"Hicimos un gran esfuerzo personal para instalar alta tecnología y seguridad para los alumnos, docentes y apoderados. Es algo que no todos los colegios pueden hacer y el Ministerio está exigiendo", manifestó la sostenedora.
Añadió que "los colegios se vieron muy afectados con la pandemia. Existe una merma respecto de las matrículas, además de la baja de subvención, por lo que casi ninguno puede hacer una inversión. Nosotros, en forma particular, pusimos seguridad y tecnología para comenzar el próximo año en forma presencial".
Sandra Muñoz agradeció el apoyo que siempre han recibido del departamento provincial de educación y señaló que "a nivel local, tenemos la colaboración y asesoría necesaria, pero a nivel país siento que no está".
Matriculas
La Escuela de Lenguaje Aliwen se caracteriza por tener un modelo de educación donde trabajan potenciando las habilidades de cada niño o niña, y desde ahí, solucionar la dificultad que tenga. Todo con un fin educativo.
La directora Daniela Oliva explica que el máximo permitido es de 15 alumnos por sala, además de la educadora diferencial y una asistente.
"Los objetivos son específicos para cada niño y se plantean al comienzo de año y se va trabajando semestralmente para ir superando la dificultad. Además de la clase con la profesora, se realizan terapias fonoaudiológicas una vez por semana", explica Daniela Oliva.
El proceso de matrícula contempla una evaluación con la fonoaudióloga Consuelo Oyaneder para detectar el déficit de lenguaje del alumno.
Pandemia
Durante el presente año académico, la escuela trabajó en forma online de acuerdo con el plan curricular del Ministerio de Educación.
"Nos adecuamos como equipo, se aportaron ideas y funcionamos muy bien. Las terapias se realizaron online y en la página de Facebook de la escuela subimos un sinfín de actividades, la idea era mantenernos en contacto con los apoderados y los niños", explica la directora.
En un comienzo fueron las videollamadas, luego a través de plataformas online donde aumentó la participación de los alumnos al reencontrase virtualmente con sus compañeros. "Siempre tratamos de hacerlos sentir como en la escuela, aunque las clases eran más cortas porque al ser niños pequeños, es difícil mantenerlos concentrados frente al computador", explica Daniela Oliva.
Agrega que "la Escuela se caracteriza por la activa participación de la comunidad donde los apoderados son partícipes de nuestro trabajo, nos ayudan a seguir avanzando, entusiasmando e incentivando la participación de sus hijos".
La Escuela de Lenguaje Aliwen comenzó sus funciones en 2008 y como sostenedora y profesora, el objetivo de Sandra Muñoz ha sido elevar los estándares, siempre en función de mejorar la educación.
Para más información puede contactar a través del teléfono 352284912.