"Este año me dediqué a escapar de la cárcel que puede ser el humor"
El comediante cuenta sobre sus nuevos proyectos: un largometraje, la escritura de microrrelatos y un show de tangos.
Ignacio Silva
Puede que para el público el pasado reciente de Jorge Alís esté vinculado a su segundo paso exitoso por el Festival de Viña o a sus virales humorísticos sobre la contingencia. Pero para él, es otro el hecho que ha definido sus últimos meses.
"Hace ya un tiempo que estoy estudiando escritura y me tiene muy feliz porque es un trabajo muy solitario", cuenta el comediante. "Siempre hice un trabajo muy de la necesidad del espectador, pero escribir no necesita eso. Entonces desde ese lugar está buenísimo"
Si bien en su cuenta de Instagram (@jorgealis), el argentino-chileno ha compartido un par de microrrelatos de autores locales, Alís mantenía casi en secreto una afición por la escritura que le ha significado una válvula de escape.
"Yo estuve todo el año estudiando escritura, cómo escribir cuentos, y me volqué mucho a eso, escribí mucho por suerte. Y una de las cosas que me llamó la atención era poder hacer algo que no tenga que ver solamente con el humor. Por eso empecé en esa búsqueda", explica.
Luego profundiza: "Los microrrelatos que hicimos no tienen humor, tenemos cosas grabadas que no tienen humor, pero tienen una reflexión, tienen una cosa interesante y está bueno librarse de ese peso del humor como si fuera la única salida a tocar un tema".
Pese a su inquietud por la escritura, el comediante no se ha desligado por completo de su trabajo principal. De hecho, ha estado presentando "Quedo atento a tus comentarios", un show cargado de actualidad que el domingo 20 de diciembre volverá a mostrar por streaming (entradas en Daleticket.cl).
"Lo de 'Quedo atento a tus comentarios' viene de algo que hice en Viña, que tenía que ver con el peso laboral que tenía en ese momento. Me mandaban mails a cualquier hora y tenía que responder en buena onda", recuerda Alís. "Pero tiene mucho que ver con lo que hemos vivido ahora también, en el espectáculo están todas esas vivencias".
-¿Vivencias como cuáles?
-Como las limitaciones que hay que ponerle a los hijos con el internet. También esto de que muchas veces salía del baño, me paseaba en bolas y mi mujer estaba haciendo teletrabajo. Y terminás en una rabia, yo decía "puta madre, no puedo estar tranquilo en mi casa". Y otras cosas como que recibís trabajo a cada rato, y no podés decir que no ahora, te da miedo que te echen. Entonces esa ambigüedad de tener rabia y no poder decir nada porque está todo muy sensible, claramente hay que canalizarla. En el fondo, este ha sido un año tremendo entre estallido, quilombo, pandemia. Entonces de alguna manera, aparentemente la tarea como actor o como comediante tiene que ser la de la denuncia, pero una denuncia no muy agresiva, ojalá sin putear, pero que sea profunda.
-¿Qué otros proyectos fuera del humor has pensado?
-Desde ese lugar estoy haciendo un show de tango también, online, los miércoles. Lo hago gratis y me encanta, porque no tengo que decir un chiste, no tengo que terminar la historia, la gente no está esperando un remate. Entonces aparecen chistes, obvio, aparecen cosas que tienen que ver con la emoción, pero no está en la línea de la obligación. Hice un movimiento, se generó una cosa recíproca y ya estoy de alguna manera preso. Este año me dediqué a escapar de esa cárcel que puede llegar a ser el humor, pero sin salirme por completo de la cárcel. Estoy escribiendo ahora para hacer un largometraje también.
-¿Y este largometraje tiene relación con la otra película, "Argentino QL"?
-No, por el momento no es una saga ni una continuación. Estamos en esta búsqueda de generar relatos de lo que estamos viviendo, hay momentos muy duros, entonces hay relatos que movilizan al ser humano. Está bueno. Ojalá salga el próximo año.
-Teniendo todo esto en cuenta, ¿no te dan ganas de dejar de lado el humor?
-Ah, no, ni en pedo. No, porque tiene que ver con que yo soy así, soy así todos los días, veo la vida de esa manera. Y cuando escribo hay una búsqueda de humor, desde diferentes formas. Lo que pasa es que me gusta esta idea de no quedarse pegado, porque a veces uno se queda pegado pensando que a la gente le gusta eso, pero uno no puede hacer algo porque a la gente le gustó. Te tenés que preguntar qué te gusta a vos.
-¿Qué significa Viña del Mar para ti? ¿Y qué piensas de que no se haga el festival en 2021?
-Como escenario es algo impresionante. Divino todo. Me nombraste eso y me emociona. El Festival de Viña es algo a lo que me gustaría ir siempre, ojalá pueda ir muchísimas veces. Tiene que ver con la salud, con que pueda producir cosas y con que pasen los años y pueda mi imaginación provocar algo que sea digno de presentar ahí. Es claramente un escenario que no existe en otro lado; Argentina no tiene un escenario de esa naturaleza, tiene escenarios muy específicos con el rock, pero un escenario como Viña del Mar no existe, menos con ese peso que tiene fuera de Chile. Pero me parece bien que no se haga, no estamos para hacer festivales, claramente. Hay muchísimas otras necesidades que ver.
"Me nombraste El Festival de Viña y me emociona. Es algo a lo que me gustaría ir siempre, ojalá pueda ir muchísimas veces".