David Muñoz Castillo
Un millar de personas, entre funcionarios y trabajadores de empresas externas, hace meses lucha contra el covid-19 en el hospital de San Antonio. Más allá de la labor que cumpla cada una, todos forman parte de la "primera línea" que lidia contra la enfermedad.
Héroes anónimos, que ponen en riesgo sus propias vidas para salvar a los sanantoninos contagiados con el letal virus.
Carol Farías Jeria (36) integra este grupo que día a día le da la pelea a este enemigo implacable. La enfermera, sin importar el riesgo que corría, postuló al cargo de supervisora de aislamiento del servicio de Medicina Covid del recinto asistencial local.
Desde octubre ocupa este cargo donde no solo debe combatir la enfermedad, sino que además el agotamiento de sus compañeros.
Por eso destaca el desempeño de los equipos multidisciplinarios integrados por auxiliares, tens, enfermeros, kinesiólogos, asistentes sociales y médicos; con el aporte de la Iaas (infecciones asociadas a la atención en salud) a cargo de la enfermera Elsa Flores. Todos son un respaldo en la tarea.
Cuando las cifras de la enfermedad suben en el país y la provincia, la enfermera afirma que la única forma de parar los contagios "es con la conciencia de cada uno. La decisión de cuidarse es personal", recomienda.
Sobre su trabajo, contó que "quise postular a este cargo a pesar de todos los riesgos", aseguró.
Antes de llegar a la sección de aislamiento estaba a cargo del seguimiento de los casos de covid entre los funcionarios. "Cuando se presentó la posibilidad de postular a Medicina al área covid, no lo dudé. Es peligroso, pero es muy satisfactorio", aseveró la profesional, quien hace seis años trabaja en el Claudio Vicuña.
A la labor habitual que desarrolla, esta enfermera y sus colegas efectúan un rol social con los pacientes "porque somos las únicas personas que ven, ya que están aislados. Una palabra de aliento o tranquilidad es importante. Tratamos de hacer videollamadas con sus familias, conversar con ellos, para que estén calmados", relató sobre este aspecto fundamental en la recuperación de los internados por coronavirus.
"Están más susceptibles si entran en una depresión, porque bajan las defensas y la recuperación es lenta, por eso nos enfocamos en levantarles el ánimo", explicó.
No solo los pacientes flaquean durante la pandemia. Los trabajadores también se ven afectados por el cansancio y los golpes anímicos que sufren día a día en esta lucha. "El hospital se preocupó de destinar un sicólogo, porque para nosotros no es fácil estar en esto. Desalienta ver que la gente no se cuida, mientras trabajamos tanto, en turnos de 24 horas", lamentó.
Cansados y asustados
Carol Farías contó que los trabajadores están "ultra cansados y asustados, porque saben que se viene lo mismo que vivieron hace unos meses. Se están preparando para dar la pelea nuevamente", aseguró.
Mientras se preparan sicológicamente para la "segunda ola", la enfermera se aboca a la tarea de evitar que sus compañeros del hospital se contagien. "Tenemos que estar pendientes que no falte nada, que usen los elementos de protección. Los colegas están muy comprometidos, porque si nos contagiamos disminuirá el personal para cuidar a los pacientes", proyectó la enfermera sobre el desafío que se viene para los trabajadores.
Carol Farías admite que a veces el ánimo decae, pero el trabajo con sicólogos ha permitido seguir adelante. "Fue como una catarsis, nos sirvió mucho a todos", reconoció.
La enfermera de esta forma continúa con su trabajo en el hospital, un recinto que ha estado presente durante toda su vida, ya que su madre, María Angélica Jeria, trabajó durante 42 años como laboratorista clínica. "Desde chica he estado en el hospital, le tengo un cariño especial", contó Carol Farías, ratificando el compromiso y vocación que despliega en su trabajo, una labor que durante este pandémico 2020 recibió la gratitud y los aplausos de los chilenos, porque sin duda los trabajadores de la salud fueron los personajes destacados en un año complicado para todos.
Valoración y falencias
Para los trabajadores de la salud "este año fue bastante ingrato, de mucho trabajo, pero también de valoración de la comunidad hacia la labor que hacemos. Además se mostraron las grandes falencias que tenemos en cuanto a recursos , capacitación y equipamiento. No debemos olvidar que tenemos 209 funcionarios y unos 100 trabajadores externos contagiados", aseveró el secretario de la Multigremial del hospital, Juan Recabarren.