Ingredientes

(Para cuatro personas)

-4 zapallos italianos

-1 cebolla

-2 dientes de ajo

-1 tomate

-4 huevos

-queso parmesano

-sal, pimienta, nuez moscada y aceite de oliva

Pelar la cebolla, cortarla en cuadros pequeños y sofreírla con aceite de oliva y una pizca de sal en un sartén bien grande. Mientras tanto pelar los ajos, cortarlos lo más fino posible y agregarlos al sartén una vez que la cebolla haya comenzado a transparentarse. Inmediatamente pelar el tomate, picarlo en cubos chicos y agregarlo a la sartén (jugos y semillas incluidos). Condimentar con sal, pimienta y nuez moscada y cocinar un rato para que el tomate de deshaga un poco.

Mientras, lavar los zapallos, secarlos, rallarlos por la cara más gruesa del rallador y finalmente agregarlos a la sartén. Revolver bien y cocinar a fuego medio hasta que los zapallos italianos estén tiernos y un poquito dorados. Finalmente, sacar del fuego y dejar enfriar un poco a temperatura ambiente. Después, corregir de sal y pimienta si fuese necesario y agregar los huevos bien batidos. Revolver muy bien todo para que quede una mezcla homogénea y verterlo en una budinera. Ponerle queso parmesano rallado encima (u otro similar) y un poco de aceite de oliva.

Llevar al horno bien caliente por unos 20 minutos para que el queso gratine y el interior del budín se compacte. Sacar del horno, porcionar y servir. Se acompaña bien con arroz blanco o una ensalada de tomates.

El multimillonario japonés Yusaku Maezawa compró el derecho a ser el primer turista lunar de SpaceX en una misión programada para 2023, pero no irá solo. Maezawa compró todos los asientos del vuelo y anunció planes para elegir a ocho personas para que hagan el viaje de una semana para orbitar la Luna con él. Los interesados tienen hasta el 14 de marzo para completar la preinscripción en el sitio Dear Moon (dearmoon.earth) antes de pasar por la "evaluación inicial", programada para el 21 de este mes.

Inicialmente, el magnate ligado al mundo de la moda buscó atraer a artistas, pero ahora para su selección estará considerando a personas que puedan ayudar a la sociedad tras hacer este viaje.

Súper marzo

Hasta que llegó el mes más esperado del año. Como siempre, se habló de un súper lunes. Sin embargo, sería más honesto hablar de un súper mes, porque en marzo nos cae todo encima: la vuelta a clases y el trabajo -ahora con una mezcla de lo presencial y lo en línea-, más las cosas típicas de este mes como son volver a los tacos en las calles, volver a comprar uniformes y útiles, pagar colegiaturas y de paso empezar a pensar en que hay que pagar el permiso de circulación del auto de aquí a un par de semanas más.

Una locura que nos toca cada año y que no por eso se nos hace más suave. En otras circunstancias más normales por estos días también había que comenzar a preocuparse por las colaciones de los niños, pero como ahora los comedores de los colegios estarán cerrados hasta nuevo aviso, hay que asegurarse de tenerles comida en casa cuando vuelvan. Porque ojo, van a volver hambrientos y arrasarán con todo si no hay algo preparado. ¿La solución? Tener comida cocinada, por ejemplo el domingo, para así luego solo calentar raciones durante la semana. "Batch Cooking" le dicen a esto ahora algunos iluminados.

La verdad, sólo se trata de ser organizados y prácticos a la hora de cocinar. Pienso en guisos de legumbres, carnes estofadas, tortillas o un simple budín de zapallitos italianos como el que presentamos hoy. Fácil de preparar y que queda incluso mejor si se come al día siguiente. ¿Algo más? Sí, que tiene pocos y baratos ingredientes, lo que no es menor en un mes como marzo. Un súper mes, un súper marzo.

por Álvaro Peralta / @dontinto

N.E.

Pasar varias horas al día frente a la pantalla del celular es algo común actualmente, sobre todo entre los jóvenes. Sin embargo, un reciente estudio del King's College de Londres arrojó que la situación es bastante seria, puesto que un 39% de los 1.043 consultados -de entre 18 y 30 años- resultaron ser adictos a sus dispositivos móviles.

Entre los síntomas de esta adicción, que si bien aún no se ha reconocido como diagnóstico clínico pues se encuentra en investigación, figura una pérdida del control sobre cuánto tiempo se pasa usando el smartphone, además de angustia cuando no se puede acceder al mismo y descuido en otras actividades o aspectos de la vida.

Para el desarrollo de la investigación publicada en la revista Frontiers in Psychiatry, el equipo a cargo desarrolló una "escala de adicción a los smartphones", a la que sometió a toda la muestra. Así, además de revelarse que cuatro de cada 10 participantes tenía un nivel de adicción al teléfono, salió a la luz que dos tercios (69%) de los "adictos" tenía problemas para dormir.

El trabajo documentó también el tiempo diario que los participantes pasaban con sus celulares. Alrededor de un cuarto de los encuestados (24,7%) resultó usar el teléfono móvil durante más de tres horas al día. En tanto, quedó al descubierto que un 18,5% hacía lo propio durante más de cinco horas diarias.

La sicóloga Samantha Sohn, autora principal del estudio, dijo que "los teléfonos inteligentes se están convirtiendo cada vez más en partes indispensables de nuestra vida cotidiana" y añadió que "este estudio es un paso importante para analizar su impacto en términos de uso disfuncional y en el sueño".

"El trabajo también muestra el impacto sobre la calidad del sueño. Esto podría ayudar a los médicos a tratar a niños y adultos con dificultades para dormir y hacer evaluaciones sobre cómo identifican el uso problemático", aseguró también el equipo de autores en el estudio.