Terapeuta abandonó una vida plagada de excesos y ahora ayuda a superar las adicciones
Wildo Silva entrega nuevas herramientas a los pacientes de los distintos centros en los que trabaja.
Asumir el problema y querer buscar ayuda es el primer paso para superar la adicción a las drogas, según explica Wildo Silva Cáceres (42).
Hace algunos años, consiguió su propia sanación, luego de asumir que estaba acabando con su vida al estar inmerso en un mundo de excesos.
"Sin darme cuenta, porque uno no lo asume, estuve gran parte de mi juventud sumergido en las adicciones. Las juntas no siempre ayudan y uno tampoco quiere ayudarse, hasta que, en varias ocasiones, llega algo que nos hace click y nos damos cuenta del error", cuenta Wildo.
-¿Adicciones de qué tipo llegó a tener?
-Por decirlo de alguna forma, todo. Consumí marihuana, pasta base, cocaína, drogas que son más conocidas, pero también tenía adicción al alcohol, que está catalogada también como una droga, con esas cuatro cosas estaba acabando poco a poco con mi vida.
Tocar fondo
Fue a los 16 años cuando Wildo comenzó a consumir distintas sustancias y solo a los 32 años decidió ingresar a rehabilitación, con el apoyo de su familia, que por años lo había tratado de convencer de dar este paso.
El sanantonino de cerro Placilla asegura que aunque la gente no lo sepa, siempre hay una razón que gatilla en que la gente comience a consumir drogas.
"Siempre hay una pena, una rabia y la gente se escuda, por así decirlo en drogas o cosas que no son buenas. Mi hermano mayor es adicto, lo es todavía y esa pena de que nadie conseguía ayudarlo, me arrastró a mí a hacer lo mismo que él", sostiene Wildo Silva.
-¿Su familia intentó ayudarlos?
-De todos modos, la familia siempre trata de velar porque uno salga adelante y el tema de las adicciones no fue la excepción. Yo creo que mis papás estuvieron cerca de 10 años tratando de convencerme de que me tenía que rehabilitar.
-¿Cree que las amistades son un factor para caer en las adicciones?
-Siempre lo son, yo tenía muy buenas amistades, aún las tengo, gente que se esfuerza, consigue metas en su vida, pero también estaban esas amistades que después uno se da cuenta que no aportan, que eran al final las que te llevaban a escapar de los problemas.
"Cuando se consumen drogas uno cree que lo pasa bien, que puede solucionar sus problemas con ese olvido momentáneo, pero no nos damos cuenta del daño que nos hacemos. Al final no se soluciona un problema, sino que se evade y se agrava finalmente", analizó el placillano.
Lo que hizo que Wildo se diera cuenta de su problema fue su hijo y percatarse de que la vida que le podía entregar no era la adecuada.
"Ya era papá cuando me interné y fue por eso mismo que me di cuenta que no era un buen ejemplo en lo absoluto, para nada. Él era chico, pero igual se daba cuenta de las cosas y me empecé a dar cuenta del sufrimiento que le estaba provocando. Quise cambiar por él, por mí y por mi familia", aseguró.
Estudios
El 20 de noviembre de 2011, Silva comenzó su proceso de rehabilitación en un centro fuera de la provincia de San Antonio.
El marzo de 2013 recibió el alta y con una nueva perspectiva para el futuro, sintió que quería hacer algo más con su vida.
"Estaba limpio, sanado y con ganas de reencontrarme con el yo de antes, el que era estudioso, que le gustaba el deporte y que era capaz de todo. Entonces dije que iba a estudiar algo que me permitiera ayudar al resto, como me ayudaron a mí y fue el mismo centro el que me mostró esta posibilidad", acota.
En el 2013, comenzó a estudiar técnico en Prevención y Rehabilitación de personas con problemas de alcohol y drogas, que como él mismo lo define es terapeuta en adicciones.
-¿Por qué escogió esta carrera?
-Como mencionaba antes, siempre fui bien estudioso y lo que pasó fue que en el centro nos dejaban guiar las terapias y ayudar, como ser el oído de otro compañero. Esto tiene que ver harto con la sicología y en una oportunidad nos entregaron información, me puse a buscar y la misma semana que salí de ahí, entré a estudiar.
La idea de Wildo Silva siempre fue la misma: poder ayudar a otros que se encontraban en la misma situación por la que él atravesó y así entregarles herramientas para enfrentar el futuro y reincorporarse a la sociedad.
Además, al poder escuchar las historias de sus compañeros, se dio cuenta que tenía las aptitudes necesarias para ayudar a otros y a través de las mismas terapias que recibía comenzó a indagar la carrera que hoy ejerce en distintos centros de rehabilitación.
"La personalidad que uno tiene se destruye con las adicciones y yo afortunadamente pude encontrar el camino, pero quería que otros también lo encontraran. No paré de estudiar y así también obtuve mi diplomado de hipnosis para ayudar a la gente", comenta.
Hipnosis
La hipnosis es una técnica natural con la que se puede acceder al subconsciente y con la cual, el terapeuta en adicciones, busca sanar a otros.
"Algo que nunca pensé que me ocurriría con esto, es el tema de la regresión a otras vidas, la mente me puede llevar allí. Esto quiere decir que cuando yo trabajo con algún paciente y ellos en otra vida fueron otra persona les envía mensajes para poder sanar situaciones por las que atraviesas en el presente", explica sobre el método que utiliza.
-¿Cómo funciona la hipnosis?
-Muy bien, es sorprendente ver como algunos en las sesiones terminan llorando, porque les estoy entregando un mensaje acerca de cosas que nadie sabe que están pasando y lo más curioso, por decirlo de alguna forma, es que con un muchacho del centro de Talagante, donde también trabajo, nos ha entregado mensajes que nunca pensé alcanzar.
-¿A qué se refiere?
-A través de poemas nos entrega un mensaje sobre temáticas particulares que estamos tratando.
Una de las preguntas que le ha hecho Wildo a este paciente es sobre el amor.
"Esto fue lo que él nos respondió en dicha oportunidad 'puesto que el amor es completamente libre, si piensan en el amor a un hijo piensan que es su hijo, si piensan en el amor a un hermano de carne o alma piensan que es su hermano, si piensan en el amor a una pareja piensan que es su pareja, cuando el amor no tiene posesión alguna, es libre, significa amar más allá de la conveniencia propia", relató el terapeuta sobre su experiencia laboral.
"Sin darme cuenta, porque uno no lo asume, estuve gran parte de mi juventud sumergido en las adicciones. Las juntas no siempre ayudan y uno tampoco quiere ayudarse",
Wildo Silva
"Ya era papá cuando me interné y fue por eso mismo que me di cuenta que no era un buen ejemplo en lo absoluto",
Wildo Silva