José Salgado Núñez

Han pasado más de cuatro años desde su misteriosa desaparición y la familia del maestro carnicero Mario Alonso Quiñones Salas sigue manteniendo firme la ilusión de poder algún día hallarlo sano y salvo. Y es que la angustia de no tener hasta el día de hoy ni una sola pista sobre su paradero, es algo que repercute con mucho dolor y tristeza en su círculo familiar.

El enigma ni siquiera ha podido ser resuelto por la justicia, a tal grado de que el caso fue declarado finalmente cerrado. Una situación que, sin lugar a dudas, deja demasiadas preguntas y muchas dudas.

Todo comenzó en enero del año 2016. El hombre fue visto por última vez en el sector de El Litre de la comuna algarrobina. Fue en ese lugar donde finalmente no se supo más sobre su destino.

"Ese día recuerdo que él estaba muy mal anímicamente. Me acuerdo que se despidió de mí y luego salió de la casa. Pero ese día pensé que iba a volver, porque siempre me decía que iba a salir y después regresaba en la tarde o en la noche, pero esa vez no retornó. De ahí no supimos nada más", relató con pena Lilian Quiñones, hermana de Mario.

Búsqueda

La familiar cercana del desaparecido contó a Diario El Líder que desde ese momento, una intensa búsqueda se inició con el fin de poder saber algo de su paradero, sin embargo, a pesar de todos los esfuerzos que se realizaron los resultados finalmente no fueron positivos.

"La verdad es que no hay nada de momento. El último día que fui a la Fiscalía, me comunicaron que el caso estaba cerrado y que si yo me enteraba de algo, debía solicitar que lo reabrieran. Pero más allá de eso, no hemos sabido nada", detalló sobre el nulo avance del caso.

Según Lilian Quiñones "Carabineros nos llama frecuentemente para consultarnos si hemos sabido algo, pero más allá de eso no tenemos nada concreto. En un principio nos dieron datos de que estaba en alguna parte de Valparaíso, en Chañaral o en Concón, pero al final no lo encontramos en esos lugares".

En 2020 la búsqueda se truncó por la pandemia y las restricciones de movilidad. "Ahora con esta pandemia la búsqueda ha sido mucho más complicada, pero Dios quiera que podamos tener aunque sea una pista, aunque también sé que en estos tiempos es muy complejo", expresó.

Esperanza

Lilian recordó que antes de la desaparición, su hermano fue operado por un problema de salud grave que tenía en su cabeza y que después de esa intervención comenzó a tener dificultades para acordarse de las cosas.

"Él era una persona muy limpia, si bien sufría depresión, mi hermano estaba saliendo adelante. El no saber nada de él aún nos genera dolor, sobre todo ahora que han pasado más de cuatro años", relató sobre el estado anímico que enfrenta esta familia de Algarrobo por la desaparición de su ser querido.

La hermana del carnicero se desahoga y expresó los sentimientos que la embargan. "No sé si está vivo, pero quiero creer en mi corazón que lo está. Han sido muchos años ya y puede que esto sea imposible, sin embargo, quiero mantener aún esa fe intacta. En la familia estamos también con esa esperanza, por eso es que seguimos con la búsqueda, a pesar de todas las vicisitudes que hemos tenido".

Ese anhelo de dar con algún indicio del Alonso Quiñones, lleva a Lilian a proferir un desgarrador llamado. "Sé que quizás sea muy tarde, pero si hay alguna persona que tenga algún dato concreto que nos permita hallarlo o al menos saber que le pasó, se los agradecería de todo corazón. Ha transcurrido mucho el tiempo, pero todavía queremos apelar a la conciencia y a la buena voluntad de las personas", pidió.

Las personas que tengan algún dato o información de Mario Alonso Quiñones Salas, se pueden comunicar a los teléfonos 982607823 y 965732515.

Lilian Quiñones

"No sé si está vivo, pero quiero creer en mi corazón que lo está. Han sido muchos años ya y puede que esto sea imposible, sin embargo, quiero mantener aún esa fe intacta",

51 años tenía Mario Alonso Quiñones Salas cuando desapareció en Algarrobo.