Alejandro González Avilés
Un preocupante aumento en los niveles de obesidad entre los niños y niñas del sistema público de educación de la región de Valparaíso reveló el Mapa Nutricional que realizó la Junaeb durante el primer año de la pandemia. El estudio indica que más de la mitad de los estudiantes evaluados presentan sobrepeso u obesidad. Y dentro de ese grupo, la obesidad severa representa un 7,6 por ciento.
La situación nutricional de los escolares, especialmente de los tres primeros niveles de la educación inicial y básica, se ha visto deteriorada, con un incremento importante de la obesidad total. En prekínder, la obesidad total alcanza un 28,6%, en kínder, un 29,4%, y en primero básico, un 28,4%.
En un año afectado por la pandemia, también se detectó un impacto en la desnutrición de algunos alumnos, principalmente en los de prekínder.
El mejor resultado lo tuvieron los 1° medio, que disminuyeron la obesidad, lo que puede tener relación con que tengan mayor autonomía en cuanto a sus hábitos alimentarios y de actividad física.
Medidas
La seremi de Educación, Patricia Colarte, señaló que "este aumento da pie para que se continúen tomando medidas para disminuir la obesidad de los estudiantes, como por ejemplo, el fortalecimiento del Programa de Alimentación Escolar de Junaeb y su programa Contrapeso, que buscan impactar positivamente en la nutrición de los escolares, más las estrategias y acciones del Programa Elige Vivir Sano. Junto con estas medidas es fundamental el apoyo familiar para lograr cuidar la alimentación y estimular la actividad física, que son claves para un desarrollo integral de los alumnos".
La directora regional de Junaeb Valparaíso, María Loreto Sotomayor, comentó que "vemos una relación muy directa entre vulnerabilidad y obesidad, lo que significa un complejo círculo vicioso pues puede generar consecuencias a la salud, educación, autoestima e ingresos de esas familias en el mediano y largo plazo. Esto refuerza aún más la necesidad de que en tiempos de crisis, como Estado debemos estar más presente que nunca".
Consejos
La nutricionista sanantonina Jessica Quiroz Ríos explicó que uno de los primeros factores en este aumento es que "los niños pasaron de ir diariamente al colegio a estar en la casa. Muchos caminaban para llegar a clases, jugaban en el colegio o compartían colaciones saludables, y además tenían educación física. Nada de eso lo pueden hacer ahora".
La especialista aseguró que la pandemia ha tenido efectos en los escolares, como estrés, emocionalidad negativa y trastornos del sueño, que muchas veces generan mayor apetito, un desorden alimenticio y menos ganar de moverse.
-¿Cómo se comienza a trabajar para controlar el peso?
-Lo primero es asumir como adulto que se está cometiendo un error en los hábitos alimentarios en los niños más pequeños del hogar. Es importante acudir a un especialista para obtener una guía correcta en cuanto a las comidas y frecuencia alimentaria de ese hogar. Una planificación organizada de las comidas semanales hará una gran diferencia.
La nutricionista sostuvo que "con esta planificación yo organizo mis tiempos, los permisos colectivos y voy al supermercado y feria y compro solo lo que necesito y no compro de más. Es importante que los niños coman una fruta a media tarde y tengan una alimentación saludable, considerando que están en un periodo de desarrollo tanto físico como emocional. El fin de semana de debe realizar alguna actividad física o que cooperen en las tareas del hogar".
Jessica Quiroz recalcó la relevancia de "volver a encantarnos con un vaso de agua para la sed, porque la bebida no debiese ser parte de la rutina. El abuso de la mantequilla, el queso y el jamón también son perjudiciales. Es mejor disfrutar un pan con tomate, cebollín, queso fresco; o tomate, lechuga, palta; atún o jurel con cebolla, o de huevo con tomate".
"Una planificación organizada de las comidas semanales hará una gran diferencia",
Jessica Quiroz