José Salgado Núñez

Para varios vecinos de la calle Crescente Errázuriz era habitual ver a David del Carmen Valdés Soto (94) atender junto a su esposa la amasandería "Pablito", un negocio familiar que funciona en Cartagena desde 1994.

Sus panes artesanales y sopaipillas eran conocidos por los paladares de los vecinos de la comuna. Y como decía el propio David Valdés se hacían "con cariño y amor".

Ayer el concurrido local estaba cerrado y con globos de color negro colgados en el frontis, como señal de dolor y luto.

Tres de los integrantes de la familia fallecieron tras una intensa lucha contra el covid-19. David, quien fue hospitalizado el domingo pasado, fue el primero en partir pocos minutos después de las 17.00 horas del sábado.

Luego su hija Violeta (52), quien llegó al hospital el viernes y un día después, a 20.38 horas su cuerpo no resistió.

Ayer aproximadamente a las 5 de la madrugada dejó de existir Pablo (31) en el Hospital Naval de Viña del Mar por las secuelas del maldito virus.

A través de la página de Facebook "Amasandería Pablito" se dio a conocer la terrible noticia del deceso del comerciante y sus hijos.

A través de esas mismas redes la comunidad cartagenina expresó su pesar por la trágica partida.

"Gran pérdida, mis sentidas condolencias a la familia", "una noticia muy triste que golpea el corazón" y "que Dios llene de paz sus corazones y dé consuelo en este momento tan duro", fueron algunos de los mensajes.

Dolor

Alicia Valdés, hija de David y hermana de Violeta y Pablo, comentó con mucho dolor a Diario El Líder que "parece una pesadilla esto. Un golpe muy duro para nuestra familia. Siento que nos han quitado una parte importante de nuestra vida".

La cartagenina relató que "mi papá era un hombre rústico, pero cariñoso a su manera. Él era de El Turco y se dedicaba a cuidar una colonia de veraneo. Fue ahí que conoció a mi mamá, puesto que ella se dedicaba a elaborar panes artesanales en un horno de barro. De ahí nació la idea de crear esta amasandería".

Alicia manifestó además que "decidieron llamarla amasandería Pablito en honor a nuestro hermanito con Síndrome de Down. Él (Pablo) era un verdadero angelito. Siempre estaba alegre y era muy tierno con todos. Mucha gente lo quería. Mi hermana Violeta también era caritativa. Pensando siempre en todos. Por eso nos duele tanto que esta tragedia nos haya pasado".

-¿Cuándo le diagnosticaron covid-19 a su padre y hermanos?

-Fue durante el mes de abril que nos dieron la noticia. Ellos estaban aislados cuando presentaron complicaciones en su salud, siendo trasladados primero al consultorio y después al hospital.

Alicia Valdés agradeció los mensajes de cariño "por parte de varios vecinos y gran parte de la comunidad. Más que nada, haría un llamado a la gente a que no se descuide. Esta pandemia es real y no me gustaría que alguien sufriera lo mismo que ahora estamos padeciendo nosotros.

Alicia expresó que "siento que estamos viviendo una película de terror, pero somos muy creyentes en Dios, y pienso que quizás esto es fue algo que tenía que suceder".

La cartagenina hizo una advertencia. "Muchas personas piensan que con la vacuna ya están salvados, pero no es así la verdad. Si queremos superar esta pandemia, debemos aportar todos con nuestro granito de arena. Creo que eso hubieran dicho mi padre y mis hermanos", recalcó.

Legado

Marlene, hija de Violeta Valdés, confesó que "nunca pensé que esto nos iba a ocurrir de una manera tan fuerte. Obviamente siempre tuvimos los resguardos necesarios, pero al final la voluntad de Dios dijo otra cosa".

La nieta de David Valdés recordó a su madre como "una persona muy solidaria que compartía su alegría con todos. Siempre se encargaba de enseñarnos esos valores. Si bien ella trabajaba como sicopedagoga en un colegio, nunca dejó de compartir activamente con la familia. Creo que es legado que nos dejó y el cual nunca vamos a olvidar".

Marlene dijo que "el mensaje que le compartiría a las personas es que amen a sus seres queridos y compartan con ellos. No tomen a la chacota este virus".

Conciencia

Rodrigo Valdés recordó a su padre y hermanos y aseveró que "como familia, estamos súper devastados con esta tragedia".

Comentó que " fui testigo de cómo los funcionarios de la salud se preocuparon mucho por cuidar a mi padre y mis hermanos cuando fueron diagnosticados con esta enfermedad".

Rodrigo definió a su padre como "una persona recta que lo daba todo por su familia. Mis hermanos también entregaban lo mejor".

Despedida

Cerca de las 16.00 horas de ayer domingo los féretros con los restos de David del Carmen Valdés Soto y Violeta Valdés Astorga salieron del hospital Claudio Vicuña de San Antonio en dirección a la comuna balneario, donde familiares, amigos y pobladores les brindaron un último adiós.

La primera parada fue en la amasandería "Pablito" donde los asistentes los homenajearon con aplausos. Sus restos fueron llevados al cementerio Parques de Chile, lugar en el que finalmente se les ofreció la despedida final. Pablo Valdés Astorga será trasladados desde el hospital Naval de Viña del Mar a Cartagena.