José Salgado Núñez

La pandemia del coronavirus y la cuarentena que rige el fin de semana no fueron impedimento para que muchos sanantoninos pudieran regalonear a sus madres en su día. Algunas recibieron desayuno a la cama, otras regalos o simplemente el amor y la alegría de sus hijos.

Claudia Abarca (44), vecina de Alto Mirador, fue una de las mamitas que festejó con el cariño de su esposo Eduardo y de sus dos pequeñas hijas, Amelia y Carmen. "Estuve bien regaloneada. Al despertar mis enanas me regalaron unos dulces y unas galletas de una emprendedora de San Antonio que es maravillosa", relató durante la tarde de ayer.

"Además, me regalaron un libro de Harry Potter que siempre había querido, porque yo soy muy fan de esa saga, y me trajeron desayuno a la cama. Fue sin dudas un dulce despertar", contó Claudia.

Cambios

Si bien esta sanantonina confiesa que la pandemia ha cambiado las condiciones para efectuar este tipo de celebraciones, asegura que en su caso la cuarentena no fue un obstáculo para disfrutar de un día "feliz y tranquilo".

"En otros años, antes de la pandemia, nos juntábamos en la casa de mi madre donde compartíamos un almuerzo y varias otras cosas. Eran como tres celebraciones en un día. Claro, con la pandemia debimos dejar eso de lado por el tema de las normas sanitarias. Uno extraña eso a veces, pero se entiende que lo que importa hoy es la salud y el autocuidado", comentó Claudia Abarca.

Finalmente, expresó que "por mucho que uno esté encerrado, yo creo que el amor traspasa todo al fin y al cabo. Y gracias a la tecnología ahora uno puede comunicarse con la familia a distancia para mandarle mensajes de amor y cariño. Es decir, nos vemos y podemos estar cerca aunque estemos lejos".

"puro afecto"

Otra de las mamitas que fue festejada por parte de pareja y sus dos hijas fue la llolleína Katherine Soto (34), quien estaba especialmente contenta con las muestras de amor que le brindaron los suyos.

"Fue un día de puro afecto, aunque sí se notó un tanto diferente por el tema del encierro. Pero no por eso hay que decir que fue terrible. En lo personal no me complica para nada, porque sentí que así nuestra familia pudo estar más unida", admitió.

"Creo que hay que ser agradecido con lo que uno tiene y por todo el amor que se recibe, por todos los detalles. En eso yo soy de las que creen que se debe valorar lo que hay", manifestó Katherine Soto.

Consentida

Paulina Ramos (35), vecina del sector Hospital, señaló que se sintió como una "niña consentida" por todo el amor y el afecto que recibió de su pareja Rodolfo y de su hija Martina. "Me han regaloneado harto, porque me sorprendieron con el desayuno, con regalitos y con muchos apapachos (abrazos), entre otras cosas. Se ha sentido una mayor unidad por estar todos juntos en casa. Todo ha sido muy lindo", confesó la sanantonina.

Paulina añadió que "la verdad es que yo sentí esta jornada como algo normal, como si la cuarentena no existiera. Pienso que si bien no se ha podido salir, el tiempo que uno ha pasado con la familia no te lo quita nadie. Creo que eso es lo que hay que valorar: la familia".

Orgullo

Gema Barahona (47), trabajadora de la salud, comentó que la pandemia significó una jornada muy distinta a lo habitual, puesto que "como mis hijos están en distintas localidades, no nos hemos podido ver de forma presencial".

"Usualmente nosotros nos juntábamos para hacer un asado para celebrar el Día de la Madre, sin embargo, por el tema de la pandemia esto no se ha podido hacer y uno extraña el poder juntarse para conversar y compartir. Pero eso no quiere decir que no nos comunicamos", expresó.

En su día, Gema reflexionó indicando que "como madre puedo decir que el mayor regalo que he recibido es ver cómo mis hijos se convirtieron en buenas personas y en profesionales. Uno se siente orgullosa y eso me dice que hice bien mi rol como madre".

Carolina Dugan (32), emprendedora local que elabora dulces artesanales, contó que "yo estuve en mi casita con harto regaloneo. Siento que esta fue una jornada para pasar con los seres querido. Eso creo que vale más que cualquier otro regalo material".

"Me regalaron un libro de Harry Potter que siempre había querido, porque yo soy muy fan de esa saga",

Claudia Abarca