Desarrollaron la primera máquina que reproduce la piel para injertos
A partir de una muestra del paciente a tratar, la novedad de origen suizo es capaz de generar la llamada "denovoSkin", que tiene un milímetro de grosor.
Agencia EFE / N.E.
La empresa suiza Cutiss desarrolló la primera máquina que genera piel para injertos en grandes cantidades a partir de una muestra tomada del paciente. Esta novedad implica un gran avance para las más de 11 millones de personas afectadas cada año en todo el mundo por quemaduras graves.
El método tradicional consiste en injertar un trozo de piel sana que puede estirarse hasta nueve veces su superficie, mientras que con esta nueva máquina se puede multiplicar la muestra original por 100, y el objetivo es llegar a 500, según explicó la empresa responsable de la innovación en un comunicado.
Para las personas con pequeñas quemaduras, el método tradicional podría ser suficiente, pero para aquellos afectados por quemaduras en el 60 % o 70 % del cuerpo, la nueva técnica es algo realmente revolucionario.
"No es piel artificial, pero tampoco es exactamente piel natural. Si queremos ser precisos, es un equivalente al tejido cutáneo a partir de la bioingeniería", explicó la cofundadora y directora de Cutiss, Daniela Marino, respecto de lo que se obtiene a través de esta nueva máquina.
La nueva piel
La nueva piel, denominada "denovoSkin" tiene un milímetro de grosor, como la dermis y la epidermis normales, y un color rosado fluorescente, que una vez aplicado a la herida obtiene el color natural de la piel del paciente al que se le hace el injerto.
El producto, que se está sometiendo en la actualidad a ensayos clínicos, ya está siendo utilizado en algunos pacientes con quemaduras.
De acuerdo con la empresa, esta máquina, que se espera que llegue al mercado durante 2023, permitirá que el tratamiento sea asequible para países desarrollados y también para sus pares en desarrollo.