El especialista que lleva sus tragos a las casas de los clientes
La pandemia obligó a Jonathan Césped a buscar nuevas oportunidades. Fue así como nació "Bar en Tu Casa", un emprendimiento que se ha convertido en todo un éxito gracias a sus exquisitas preparaciones.
Quienes conocen a Jonathan Césped Merino saben que siempre había estado en la búsqueda de una oportunidad que le permitiera independizarse y trabajar en lo que le gusta.
Hace unos años le ofrecieron un turno de copero en un local en El Quisco. "Solo iba a trabajar un fin de semana, pero al final llegó el domingo y me preguntaron si podía ir el lunes, después si podía ir el martes. Ahí fui aprendiendo algunas recetas", recuerda.
Para seguir adelante en esta búsqueda, Jonathan hizo un curso de bartender en Santiago y tras cuatro meses de capacitación en la preparación de tragos, el quisqueño regresó a la comuna lleno de nuevas ideas y proyectos.
"El local donde trabajaba empezó a vender más alcohol y nos fue súper bien. Estuve cuatro años, pero con la pandemia quedamos sin trabajo y ahí no supe qué iba a hacer", comenta.
La reinvención
Tuvo que postergar un viaje que tenía programado para buscar la manera de reinventarse. Fue así que comenzó a vender sus cocktail's a domicilio, los cuales tuvieron una muy buena acogida.
"Al principio reciclaba las botellas de los locales, pero tuve que empezar a comprarlas porque ya no me alcanzaban", afirma.
En primera instancia, fueron sus clientes los que comenzaron a probar sus productos, pero rápidamente se fueron pasando el dato, y en poco tiempo, la pyme del "Jona", como también es conocido, se convirtió en todo un éxito.
"Ya llevo más de un año en esto. Primero mandé a hacer unos stickers para las botellas. Me puse a intrusear en las aplicaciones y al final, aprendí a hacer mi propio logo y fui mejorando la calidad de la imagen", explica, y luego cuenta que "ahora debo manejar la cuenta de Instagram, mantenerla activa todo el rato y que sea entretenida, además de ir mostrando lo que se está haciendo, para generar confianza en la gente y extender mi servicio a otros puntos de la provincia.
Actualmente, el bartender hace entrega de sus tragos entre Algarrobo y Las Cruces. "Incluso el año pasado iba, una vez a la semana, hasta San Antonio a dejar pedidos".
Veintisiete cocktail's le dan vida a la carta de "Bar en Tu Casa". "Tenemos mojitos, sour, cosmopolitan, sangría, piña colada, daiquiri. Es una carta bien amplia y en dos formatos: 750 cc o un litro", detalla sobre su emprendimiento que nació en plena pandemia.
Eventos
"Jona" revela que tras el avance a fase 4 de la mayoría de las comunas de la provincia, la gente ha ido retomando sus rutinas, y eso también incluye la realización de algunos festejos como cumpleaños, matrimonios o bautizos, lo que ha aumentado el movimiento de su negocio en las últimas semanas.
Además de los 27 tipos de trago que tiene su carta, Césped ofrece el servicio de bartender a domicilio. "Voy a algún evento, monto una estación de trabajo y preparo los tragos. El cliente me dice cuántas personas son y yo les hago un presupuesto por lo que van a consumir. Estoy de tres a cuatro horas".
Añade que "tengo varios eventos programados para octubre y ahora para septiembre varios locales me han llamado para ver si quiero trabajar con ellos ahora que estamos en fase 4. Hace un mes me independicé, por lo que estoy bien trabajando con mi pyme".
-¿A qué le atribuyes el éxito que has tenido?
-A la calidad del producto y la cercanía con el cliente. Si es un cliente nuevo le ofrezco una garantía, porque como no lo conozco, a diferencia de mis clientes antiguos, no sé sus gustos. Por eso, les explico que es un buen producto, que tiene garantía y finalmente después ellos empiezan a compartir en sus redes sociales.
Antes de darle vida a su emprendimiento, "Jona" probó otras alternativas que lo llevaran a cumplir su anhelo de tener su propio negocio.
"También vendí chocolates en Patronato. Estuve viviendo diez años en Santiago, pero después volví a El Quisco, siempre con la idea de ser independiente, por eso siempre he sido bien busquilla (ríe)", recalca.
Con el propósito de ir creciendo e innovando, el emprendedor ahora ofrece, a través de su Instagram, diversas herramientas "para que los chicos que trabajan en barra acá en el litoral puedan tener cocteleras, accesorios o algo de cristalería como vasos. Próximamente también comenzaré a capacitar a los muchachos que están en las barras".
Público
Con el pasar de los años, el mercado de los cocktail's ha crecido a pasos agigantados, y eso lo sabe muy bien Jonathan, quien reconoce que la clave de su éxito está en "que la gente ahora está más dispuesta a probar nuevos sabores y productos".
"Mis clientes me dicen que quieren tomar algo rico. Les pregunto si les gusta con crema o algo más dulce, les saco el molde y les ofrezco algo", explica.
-¿Ahora también hay más variedad de productos?
-Claro, antes era el típico sour, pero ahora hay con albahaca o con menta. También hay mojito-whisky y mojito-jagger. De a poco he ido rescatando clásicos como el cosmopolitan.
-¿Cuáles son tus planes?
-De aquí a cuatro años quiero montar un bar, pero más que un bar estructurado quiero que sea como estar en casa. Habrá días donde se dicten clases para los que quieran aprender con profesores de Santiago que puedan ayudar. La idea es que se genere la oportunidad porque en el litoral hay mucha pega de bartender. Quiero dejar una semillita para quien quiera aprender.
"Tampoco me veo mucho tiempo acá. Tengo ganas de irme a Estados Unidos o Italia, a las grandes ligas, siempre con la idea de seguir aprendiendo porque todos los días estoy leyendo cosas nuevas, escuchando. Siempre estoy mirando lo que se hace afuera", asevera.
Jona está contento, principalmente porque logró perder el miedo al impulsar su propio negocio. "Para mí sería súper fácil poner un bar, pero yo trabajé en un uno y sé que tiene un costo, permisos, patentes y eso es tiempo y plata".
"Emprender es una buena opción. Trabajo con varios amigos que tienen sus pymes, como el chico que me trae la fruta o el que me vende los destilados. Al final es un círculo donde todos nos estamos apañando", concluye.
"El local donde trabajaba empezó a vender más alcohol y nos fue súper bien. Estuve cuatro años, pero con la pandemia quedamos sin trabajo".