Diego Gotelli C.
Pensar en qué artículos podría tener la futura Constitución es algo que cualquier persona podrá hacer. Así lo estableció la Convención Constitucional, que creará un mecanismo para recibir iniciativas de la ciudadanía y que sean debatidas a fin de eventualmente incluirlas en las normas de la propuesta de Carta Magna que armarán.
Según quedó definido ayer en su reglamento, la Convención abrirá una plataforma digital para que personas o agrupaciones ingresen hasta siete propuestas de articulados, detallando sus fundamentos, quién lo propone y la historia tras la idea.
Para que ingrese a discusión habrá dos requisitos: no inclumplir los tratados internacionales de Derechos Humanos y recolectar al menos 15 mil firmas digitales o físicas de personas mayores de 16 años. Con ello pasará al debate de su comisión ad hoc, tal como si la hubiera presentado un convencional electo.
Al definir el mecanismo se descartó ideas de sectores de izquierda que proponían que con 100 mil apoyos la propuesta pasara de inmediato a una votación en el pleno, y otra que con 3,7 millones de firmas se anotara directamente en la nueva Constitución.
"¿Vamos a dejar que esta Constitución se escriba entre cuatro paredes?", sostuvo Lisette Vergara, de Pueblo Constituyente (exLista del Pueblo).
Bajo argumentos similares, más tarde la instancia aprobó por 107 votos a favor y 42 en contra la creación de un "plebiscito dirimente" en que someta a consulta nacional la aprobación de normas que no consigan el quórum.
El mecanismo estipula que si al menos 3/5 del pleno (93 convencionales) están de acuerdo en redactar una norma, pero no consiguen los 2/3 exigidos (103 votos), la Convención podría decidir por mayoría incluir ese articulado en un plebiscito en el que participen obligatoriamente los adultos y voluntariamente los adolescentes de 16 a 18 años, para decidir si la norma irá o no en la Carta Magna. Según consigna el mismo reglamento, aplicar esto requerirá una reforma en en Congreso.
El mecanismo indignó a Chile Vamos, que amenazó con ir a la Corte Suprema. "Con esto los 2/3 son letra muerta", criticó la UDI Carol Bown.
"No quita que nuestra voluntad estará destinada a construir acuerdos mayoritarios", replicó la frenteamplista Constanza Schönhaut.