Conduciendo en estado de ebriedad cayó un prófugo de la justicia en Cartagena.

El procedimiento policial se originó cuando testigos vieron al chofer de un vehículo marca Samsung zigzagueando por calle Costanera del Mar, en la Playa Grande de dicha comuna, por lo cual dieron aviso a Carabineros.

Funcionarios de la Sección de Investigación Policial (SIP) de la Segunda Comisaría acogieron la denuncia y comenzaron a indagar. Con ayuda de cámaras de televigilancia detectaron que el sujeto se mantenía conduciendo a la altura del Humedal de Cartagena, dándole alcance.

Cuando los policías se acercaron al chofer para fiscalizarlo, detectaron que mantenía un fuerte aliento a alcohol. Luego de efectuar una medición con alcotest, acreditaron que conducía ebrio.

Además, los miembros de la SIP descubrieron que mantenía una orden de detención vigente por el delito de lesiones, emanada desde un Juzgado de Garantía de Santiago. Por si fuera poco, el chofer manejaba sin licencia de conducir.

Así los carabineros arrestaron al individuo por el delito de conducción en estado de ebriedad y por la orden de arresto en su contra.

El individuo, identificado con las iniciales J.M.G. (44), fue puesto a disposición del Juzgado de Garantía de San Antonio, donde recuperó su libertad.

Mónica Jorquera Escobar

Una dura pena deberá cumplir una mujer que fue encontrada culpable de robarse tres duendes de yeso desde el jardín de una casa de Llolleo alto.

La imputada, Karen G.A.H. (41), fue condenada por el Tribunal Oral en Lo Penal (TOP) de San Antonio a pasar siete años y medio en la cárcel como autora del delito de robo en lugar habitado.

En el juicio, la fiscal Claudia Cancino entregó los antecedentes con los cuales acreditó el delito y solicitó que la sanantonina fuera condenada a 8 años de presidio.

Pese a que en el juicio se demostró que robó adornos de yeso de escaso valor, de todas manera se cumplían los requisitos para condenarla a dicha pena.

Se demostró que "el 5 de noviembre del año 2019, alrededor de las 00.30 horas, la imputada ingresó al inmueble (…), para lo cual escaló el cierre perimetral y sustrajo con ánimo de lucro y contra su voluntad (del dueño), desde el jardín, unas figuras de yeso (dos duendes y un gnomo) que se quiebran al ser sorprendida".

El mismo día del delito, la acusada fue detenida por Carabineros en la vía pública, manteniendo las especies en su poder. Además, le encontraron un cuchillo de fabricación artesanal.

Reincidencia

La fiscal Claudia Cancino solicitó que la imputada fuera sentenciada a una pena alta debido a sus antecedentes penales, pues cumple con el agravante de "reincidencia específica".

Esto porque en 2014 ya había sido condenada por el mismo delito de robo en lugar habitado. Entonces, el mismo Tribunal Oral de San Antonio dictaminó que pasara cinco años tras las rejas.

"No concurren circunstancias atenuantes y sí concurre la agravante de responsabilidad (…) por lo que el tribunal impondrá la pena en el rango máximo", dice en el fallo que fue determinado por los jueces Yésica Hidalgo (presidenta), Mauricio Aguilar y Edgardo Castro.

Poco valor

Los magistrados, además, rechazaron condenarla a los 8 años que solicitó la fiscalía, debido a que sustrajo unos duendes de yeso de poco valor.

"Atendida la escasa extensión del mal causado por el delito (…), considerando que las especies sustraídas tenían un escaso valor económico y no poniéndose en peligro efectivo otros bienes jurídicos con la conducta lesiva de la acusada (…) la pena en concreto se aplicará en el mínimo dentro del máximo del grado", señala la sentencia.

Así, este martes, la acusada fue notificada de que deberá pasar siete años y 184 días en la cárcel de forma efectiva.

La defensa de la mujer tiene un plazo de diez días para apelar ante la Corte de Valparaíso y revertir la decisión del tribunal local.

8 años solicitaba la fiscalía como condena. El Tribunal decretó 7 años y 184 días de presidio efectivo.