El quisqueño que quiere llegar a la élite del vóleibol nacional
Jorge Pereira trabaja incansablemente para conseguir sus metas y ser parte de la primera división de la disciplina. Actualmente dirige un exitoso taller de vóleibol en El Quisco, además de ser parte de la selección de La Pintana.
Jorge Pereira (28) creció en un entorno "bien deportivo" y desde siempre anduvo buscando alguna disciplina que le permitiera desarrollarse.
Fue en esa búsqueda que conoció el vóleibol. Con 17 años dio sus primeros pasos en el deporte que lo ha llenado de satisfacciones, pero sobre todo de aprendizaje.
"Estaba terminando cuarto medio cuando conocí el vóleibol en un taller en Algarrobo y en el club deportivo "Marea Brava" de Las Cruces. Acá en El Quisco no estaba muy potenciado. Por mucho tiempo el vóleibol estuvo perdido por acá, entonces tuve que ir a otras comunas a buscar la disciplina que me empezó a enganchar", recuerda.
Meses después, el deportista quisqueño ingresó a la universidad a estudiar la carrera de Producción y Organización de Eventos, y fue invitado a participar en la selección de su casa de estudios.
"Al ingresar a la universidad conocí a un agente motivador, quien era preparador de la selección. Me dijo que tenía condiciones y que si me gustaba el vóleibol fuera más tarde para entrenar con la selección. Ahí empezó a picarme el bichito", relata.
Mientras fue parte de la selección universitaria, Jorge fue viviendo diversas experiencias, algunas muy satisfactorias y otras que definitivamente quisiera olvidar, situación que fue gatillante al momento de escoger qué camino seguir.
"Cuando estuve en la selección, me pasaron muchas cosas. No fue una experiencia agradable o enriquecedora porque igual me encontré con personas que te miraban por sobre el hombro, personas que tenían más experiencia o que en ese momento eran más buenos te miraban y te decían 'tú no sabes'", recuerda.
"Yo esperaba que ellos pudieran orientarte, pero después me di cuenta que no era así. Esto fue gatillante a la hora de escoger esta disciplina porque dije voy a taparles la boca y a dedicarme ciento por ciento a entrenar y a ser mejor para que no existan este tipo de comentarios ni este tipo de gente", añade.
Carrera
Este voleibolista quisqueño, que lleva una carrera de diez años en este deporte, reconoce que la suerte estuvo de su lado, ya que al ingresar a la universidad, pudo darse cuenta que tenía las condiciones para llegar alto en esta disciplina.
"Nadie me había dicho que tenía aptitudes para seguir porque acá en El Quisco nunca hubo buenos formadores de la disciplina. Al final tuve suerte de llegar a un lugar donde me dijeran que tenía las condiciones, que era alto, que saltaba y que no era tan lento", comenta.
Con el pasar de los meses, comenzaron a llegar las competencias y la invitación de otros equipos para jugar diversos torneos. "Empecé a buscar entrenamientos más lejos. Entrenaba en Algarrobo, me levantaba temprano e iba a San Antonio. Me fui moviendo por todos lados".
"Empezaron a llegar los torneos y las invitaciones de otros equipos para jugar en competencias los fines de semana. Después de un año, comenzaron los entrenamientos fuera la zona, pero cuando llegué a Santiago se abrió el vóleibol" para mí", confiesa.
Hace cuatro años, Jorge juega en la Liga Nacional A3, una competencia federada. "Es como la tercera división del fútbol, pero en el vóleibol", explica.
"Los dos primeros años jugué por diferentes equipos, el tercero igual, pero ahora hicieron un proceso de fichaje, por lo que juego en La Pintana. Con ellos estamos trabajando en un proyecto de poder avanzar y ascender a la Liga A2 y después a la Liga A1", asevera.
En estos años, el deportista ha participado en importantes competencias donde ha tenido la posibilidad de codearse con los máximos exponentes del vóleibol a nivel nacional.
"Ahora último jugamos un torneo en Manquehue, perdimos en octavos de final, pero le hicimos un partidazo a uno de los integrantes de la dupla dos de Chile, y eso no es menor", recalca.
Talleres
Tres años lleva el quisqueño trabajando junto al municipio local, específicamente en la oficina de Deporte, llevando a cabo el taller de vóleibol, el cual es todo un éxito en la comuna.
"El primer año fue solo vóleibol piso, pero al año siguiente les conté sobre la idea de hacer un taller de vóleibol playa durante el verano. Llegó mucha gente", afirma sobre el interés actual que existe por este deporte.
-¿A qué le atribuyes la buena acogida que han tenido los talleres de vóleibol en tu comuna, tanto de piso como de playa?
-La gente se ha motivado porque les gusta la metodología que aplico en los entrenamientos. Hay chicos que vienen a entrenar de San Antonio o Cartagena porque les gusta el entrenamiento que es exigente. A esto suma el ambiente rico que se ha formado, porque las personas que participan integran de inmediato a las que vienen llegando.
"Además de ser entretenido, en el vóleibol hay hartos factores que ayudan a la salud, con el tema sicológico y social. Hemos tenido varios casos de jóvenes que están al borde de la depresión y eso ha cambiado cuando se integran al taller. Esa persona ahora tiene amigos porque sociabiliza con sus compañeros, sobre todo considerando que el vóleibol tiene que ver con un trabajo colectivo, en equipo", asegura.
La ejecución del taller "vóleibol playa" también tuvo una buena acogida entre los quisqueños. "La gente que pasaba por ahí se quedaba. A veces llegaban las familias con sus hijos y se quedaban a ver los entrenamientos. También sacamos varios aplausos (ríe). Eso era bueno y muy gratificante, señala el deportista.
Jorge sabe que para continuar desarrollando su carrera deportiva, es primordial seguir avanzando tanto física como técnicamente para llegar a ser parte de la élite del vóleibol nacional.
"Llegar a la Liga A3 fue un sueño porque me abrió las puertas. Si bien ahora estoy estudiando una carrera ligada al deporte, también estoy enfocado en tratar de obtener mi mejor rendimiento de aquí a lo que termine mi carrera deportiva, porque todavía me queda tiempo. Pretendo llegar a la Liga A1 y estar, ojalá, dentro de los mejores. Sé que es un objetivo ambicioso, pero se puede conseguir. Ojalá pueda cumplirlos en un corto plazo", concluye.
"Por mucho tiempo el vóleibol estuvo perdido por acá (El Quisco), entonces tuve que ir a otras comunas a buscar la disciplina que me empezó a enganchar",
Jorge Pereira
"Hemos tenido varios casos de jóvenes que están al borde de la depresión y eso ha cambiado cuando se integran al taller",
Jorge Pereira
"Si bien ahora estoy estudiando una carrera ligada al deporte, también estoy enfocado en tratar de obtener mi mejor rendimiento de aquí a lo que termine mi carrera deportiva, porque todavía me queda tiempo".