Profesor forjó su vida en San Antonio en torno a la danza y el folclore
Marcos Pavez a punta de empeño logró cumplir el sueño que tuvo desde niño, ser el primer bailarín del Ballet Folclórico Nacional (Bafona).
Marcos Pavez Arellano, asegura que respira danza y eso se evidencia al conocer la larga trayectoria que tiene ligada siempre a los bailes típicos y el folclore. Este padre de dos hijos, Gabriel y Camila, profesor de danza y coreógrafo, y director de los ballets folclóricos de San Antonio, Santo Domingo y Chimbarongo, recuerda que desde niño dejaba de jugar con sus amigos en la calle, para ir a ver la presentación del Ballet Folclórico Nacional (Bafona) en el Festival de Viña por televisión, soñando con llegar a ser como esos bailarines que tanto admiraba.
"Mi pasión por la danza y el folclore partió muy chico, en la época en que el Bafona salía en el Festival de Viña y yo me decía que algún día iba a estar ahí. Pasaron los años y empecé a bailar en el Campeonato Extraescolar de Cueca en la comuna de La Cisterna, representando al colegio Galvarino 128 y fui ganando los campeonatos. En el 87 bailé en el Campeonato Nacional representando a San Ramón y ahí salió la oportunidad de postular al Bafochi para ser el séptimo bailarín. Ahí estuve hasta el 89, pero mi meta era ser parte del Bafona, por la proyección, para crecer como bailarín profesional con grandes maestros, siendo que el Bafochi también los tiene y porque desde chico lo quise, era como llegar a la selección chilena", comenta.
Bailar en los 80
El destacado bailarín, que lleva más de 20 años radicado en San Antonio, comenta que en la década del 80 no era fácil dedicarse a la danza, ya que era cuestionado, sobre todo en el caso de los hombres.
"Somos 10 hermanos, mi mamá tiene 86 años, es mi fan número 1, mi papá falleció en el 2002, estaba orgulloso de lo que logré y mis hermanos también. Sin embargo, partí bailando en una época muy difícil para hacerlo, en el 86, 87 y 88. Tuve la experiencia con uno de mis hermanos mayores y con mi papá que era de Colchagua y quería que yo trabajara en lo que él hacía, que era un gran maestro en cerrajería forjada. Tuve algunos problemas con ellos porque pensaban que la danza no era para hombres. Entré al Bafona en el 89 y a inicios del 90 me fui de gira cuatro meses al extranjero y ahí mi viejo me dijo, me enorgullezco de ti", recordó.
Sueño cumplido
El talento de Marcos Pavez le permitió mostrar su capacidad artística en escenarios no sólo de Chile, sino que también de varios países del mundo.
"Mi carrera la inicié en 1987, en la primera generación del Ballet Folclórico de Chile (Bafochi), en el cual estuve hasta el año 89, fui parte de la fundación de ese gran ballet, pero mi meta era llegar al Bafona. El día que el Bafona tenía audición, yo me iba de gira con el Bafochi, entonces no pude ir a esa audición masiva, pero si fui a la semana siguiente. Llegué sólo, no había audiciones y el coreógrafo de esa época, Daniel Asín, con quien aún somos amigos, me tomó la audición y en octubre paso a ser parte del Bafona y al año siguiente subo al elenco estable como primer bailarín de ese gran elenco artístico", relata con orgullo.
A lo que agregó el artista: "Así empecé a viajar, a recorrer y tomar clases con grandes maestros. Recorrí Chile, Latinoamérica, a nivel mundial Sudáfrica, Japón, Estados Unidos, Rusia, Suiza, Suecia, Italia, en las primeras giras que tuve y eso se fue repitiendo todos los años que estuve en el Bafona, lo que fue hasta el 2004".
Ballet municipales
Después de lograr su anhelo y materializar una carrera artística llena de éxitos, dio un giro y se dedicó a formar nuevos bailarines a través de ballets folclóricos en diversas comunas. Así nace el Ballet Folclórico Municipal de San Antonio, Bafosan que ya cuenta con 24 años de existencia.
"Participé muchas veces en el Festival de Viña, en el Festival del Huaso de Olmué, tuve la suerte de bailar en la Antártica chilena, fue mágico estar ahí. Después empezaron mis odiseas por dirigir grupos de ballets folclóricos. Todo partió dirigiendo el primer grupo en 1996, el que fue de la empresa Unimarc, después seguí con el de Indura y Consalud. Un día vine a bailar acá a San Antonio en el año 98 y en esa época la alcaldesa Lucía Menares me pidió hacer un proyecto, se lo presenté y fue aceptado. Así empezó el Ballet Folclórico Municipal de San Antonio (Bafosan)".
"A la primera audición postularon 200 ó 300 niños, obviamente no todos podían quedar. Se formó un grupo con una base de 30 niños y debutamos en las Fiestas Patrias del año 98, en la inauguración de las ramadas", rememora
Pandemia
La pandemia hizo que las actividades como las clases presenciales, ensayos y eventos que realizaba el Bafosan se suspendieran, pero se organizaron para continuar con el trabajo de manera digital y lograr continuar.
"En la pandemia nos tuvimos que reinventar, pero fue positivo, el ballet no decayó y retomamos nuestras actividades en forma presencial en septiembre de 2021y se formaron elencos grandes, infantil, juvenil y adulto, a parte del estable, en donde tuvimos la suerte de sacar un gran trabajo que mostramos el 5 de febrero en el gimnasio José Rojas Zamora, con un marco grande de público y eso para nosotros fue muy gratificante, porque la gente nos sigue mucho", destacó Pavez.
Al mismo tiempo, resaltó que están promoviendo la inclusión dentro del elenco infantil del Bafosan. "Este es un proyecto que es sólido, porque se está trabajando con talento de San Antonio y eso es muy válido. También se está haciendo un trabajo de inclusión, en el Bafosan tenemos tres niños con síndrome de Down, que son parte del nuevo elenco infantil. Yo voy a seguir bailando, cultivando nuestras tradiciones".
Finalmente, el coreógrafo se refiere a los logros que ha conseguido el Bafosan en estas más de dos décadas de existencia.
"Han pasado 24 años, muchas generaciones, hemos formado grandes bailarines también, algunos están bailando de forma profesional, otros han formado su escuela y lo bueno es que la familia Bafosan ha ido creciendo y se ha ido nutriendo de mucho talento en San Antonio", destacó Marcos Pavez.
"Mi pasión por la danza y el folclore partió muy chico, en la época en que el Bafona salía en el Festival de Viña y yo me decía que algún día iba a estar ahí",
Marcos Pavez,, director del Ballet Fóclorico Municipal de San Antonio
"En la pandemia nos tuvimos que reinventar, pero fue positivo, el ballet no decayó y retomamos nuestras actividades en forma presencial en septiembre de 2021",
Marcos Pavez.