Olor a marihuana dejó al descubierto una bodega con armas de guerra
Vecinos denunciaron a la policía aroma en un edificio de Estación Central, y al interior hallaron fusiles, municiones y cuatro granadas.
Diego Gotelli C.
Una denuncia de vecinos hastiados de sentir su edificio impregnado con olor a marihuana permitió a la policía descubrir una bodega donde uno de los residentes acopiaba numerosas armas de grueso calibre, algunas de las cuales estaban diseñadas para la guerra.
El hallazgo se produjo durante la madrugada de ayer en una torre de departamentos de Estación Central. Hasta la calle Toro Mazotte con la Alameda llegó personal de Carabineros para constatar un reclamo por el hedor de cannabis, en un operativo en que se presumían posibles infracciones a la ley de droga. Pero lo que vieron en el inmueble superó lo que los uniformados y los propios vecinos esperaban.
Siguiendo el rastro del olor los policías detectaron que provenía desde una bodega subterránea del recinto, que pertenecía a un residente del piso 17, a quien localizaron y le realizaron un control de identidad, detectándole que portaba varias bolsitas de marihuana individualizadas.
Al ser detenido por posible tráfico de estupefacientes el sospechoso, un hombre venezolano de 30 años, autorizó el ingreso policial a su bodega, donde se encontraron sacos con numerosos kilos de cannabis aún no contabilizados.
Además en el depósito se halló cinco litros de ácido muriático y un arsenal compuesto por una pistola, cuatro granadas de uso militar y dos fusiles de guerra con municiones. "Al parecer estarían aptas para el disparo", dijo el fiscal Felipe Olivaría sobre estas armas largas que eran periciadas.
"Es un hecho grave", señaló el subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, quien apuntó a la necesidad de seguir en la senda propuesta por la cartera de reforzar el actuar de Aduanas, Carabineros y otros organismos fiscalizadores para evitar la internación de este tipo de objetos.
"Buscamos que ni esos fusiles ni esas granadas ingresen a Chile", remarcó.
La Delegación Presidencial de la RM anunció que se querellarán y que se indaga si hay más involucrados.
Los vecinos del edificio se mostraron asustados por el hallazgo y el alcalde Felipe Muñoz alentó a que más comunidades denuncien cuando vean conductas sospechosas para "contribuir a que este tipo de cosas no sigan pasando".