Crisis peruana: la nueva presidenta evita fijar una fecha de elecciones
Boluarte dijo que su prioridad "es reorientar el país". México confirmó que Castillo le pidió asilo antes de ser detenido.
Agencia EFE / L. R. C.
Al pasar su primer día al mando de los destinos de Perú, la nueva presidenta Dina Boluarte eludió ayer responder si adelantará las elecciones, una petición elevada por varias voces tras haber jurado el cargo el miércoles en reemplazo de Pedro Castillo, detenido y acusado de haber intentado dar un golpe de Estado ese día al llamar a disolver el Congreso e intervenir el poder judicial.
"Sé que hay algunas voces que indican adelanto de elecciones y eso, democráticamente, es respetable. Creo que la asunción de la Presidencia en esta oportunidad es un poco reorientar lo que hay que hacer con el país", señaló Boluarte al entrar al Palacio de Gobierno.
La presidenta agregó que, "más adelante, en coordinación con todas las organizaciones", verá las medidas alternativas para "mejor reorientar los destinos del país".
Además, aseguró que todavía no tienen el nombre del próximo presidente del Consejo de Ministros; y como ya hizo en el Congreso al jurar el cargo y posteriormente en sus reuniones con las distintas instituciones del país, en su segundo día en el cargo la presidenta reiteró la necesidad de una "tregua".
"Seguramente tienen muchas preguntas por hacerme, pero entiendan también que las circunstancias en la que se ha asumido esta alta responsabilidad no han sido las más óptimas", dijo.
México y juicio
El presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador (AMLO) admitió ayer que Castillo le llamó por teléfono para pedirle asilo en la embajada de su país en Lima.
"Habló aquí a la oficina para que me avisaran de que iba hacia la embajada, que iba a solicitar el asilo y que si le abrían la puerta de la embajada, pero seguramente ya tenían intervenido su teléfono", dijo López Obrador.
AMLO admitió que él instruyó que le permitieran el ingreso, pero añadió que rápidamente "la policía y ciudadanos" rodearon la embajada y detuvieron a Castillo.
Ayer la fiscalía peruana pidió al Juzgado Supremo de Investigación Preparatoria retener por siete días al depuesto presidente, que fue acusado de rebelión y conspiración tras su fallido golpe de Estado.
Castillo participó telemáticamente en la audiencia desde la prisión donde está recluido. Su defensa sostuvo que el anuncio del expresidente de cerrar el Parlamento no implicó un levantamiento en armas que requiere, según dijo, el delito de rebelión y negó que exista peligro de fuga, por lo que solicitó al juez que declare infundado el requerimiento del Ministerio Público.
El fiscal adjunto supremo Marco Huamán aseguró que "queda evidente la alta probabilidad de fuga" cuando se dirigió a la embajada de México para salir de su país. Añadió que su detención era "necesaria" para asegurar investigación y acusó a Castillo de haber pretendido cambiar el modelo de Estado de derecho establecido en la Constitución, de manera ilegal y dolosa.
Al término de la audiencia, cuya resolución quedó en los siete días pedidos por la fiscalía, el juez dio la palabra al exmandatario, pero este se limitó a afirmar "eso es todo", en alusión a lo dicho por sus abogados.