Juan Olivares Meza

La tarde del domingo recién pasado quedará grabada para siempre en la memoria de la salvavidas Alison Aylin Arizmendi Barahona, de 21 años, que en cuestión de minutos se transformó en heroína de la playa de San Sebastián cuando junto a su compañero de torre se arrojó al mar para rescatar a un hombre que estaba siendo arrastrado por la fuerza del oleaje.

Las manecillas del reloj se aproximaban a las 14 horas y Alison Arizmendi se encontraba en la Torre 7, junto al salvavidas Marco Robledo, cuando escucharon por radio que había un rescate en la Torre 9 (cada torre de la playa está separada por unos 300 metros) y "salimos corriendo por la orilla de la playa, la misma gente nos decía donde estaba el hombre. "¡Está muerto! ¡Se ahogó ya!", nos gritaba la gente mientras corríamos hacia el lugar más cerca de la persona que se ahogaba para poder entrar al mar y rescatarlo", cuenta la salvavidas.

Según relata la protagonista de esta historia a Diario El Líder, "todo se complicó porque justo en la torre donde ocurrió la emergencia el salvavidas estaba en su horario de colación, por eso con mi compañero de torre, que además es mi instructor, tuvimos que correr hasta la Torre 9 y hasta eso fue complicado porque la gente nos insultaba porque veníamos corriendo por la playa y no había otro salvavidas cerca".

Añade que "a medida que nos íbamos acercando vimos que la persona estaba súper adentro, pero no dudé ni un minuto en tirarme al mar, porque solamente le veía la cabeza y las mismas personas nos apuntaron por donde entrar, así que nos metimos y empezamos a nadar hasta que llegamos donde estaba y yo llevaba el flotador que Marco se lo aseguró a la persona que se estaba ahogando".

40 minutos en el mar

En la misma playa, Alison recuerda que "tienen que haber pasado unos 6 minutos máximo desde que recibimos la alerta hasta llegamos a nadar al lado de la persona que se estaba ahogando. Estuvimos como 40 minutos en el agua con el hombre, y se nos sumó después el Jacob Godoy, y Alejandro Arias, que es el salvavidas de la Torre 9 y que tuvo algunas complicaciones porque estaba en su horario de colación cuando ocurrió la emergencia y al final se lo tuvieron que llevar al consultorio de Cartagena".

Según reconoce la joven rescatista, "todo se complicó porque estábamos esperando el helicóptero, ya que estaba muy peligroso sacar a la persona por la playa. Estaban golpeando muy fuerte las olas, pero cuando pasaba tanto rato, otro salvavidas, Andrés Robledo, que estaba en la orilla y que conoce las señales de salvamento que tenemos los salvavidas, nos empezó a indicar por dónde teníamos que salir. Gracias a esa comunicación, a la coordinación que teníamos los que estábamos en el agua con los salvavidas en la orilla, al final logramos rescatar a la persona y aunque fue súper difícil lo sacamos del agua. Y cuando salió se abrazó con su familia y ver eso genera una sensación muy bacán que me hace querer más lo que hago".

Nueva salvavidas

Alison Arizmendi es parte de los salvavidas que este año se sumaron a la dotación de las playas de Cartagena, gracias a la Academia de Salvavidas que, con respaldo municipal, reclutó jóvenes para el difícil trabajo de resguardar la vida de las personas en el borde costero.

Marco Robledo, el compañero de Alison en la Torre 7 de la playa de San Sebastián, es instructor de esa academia y lleva 25 temporadas como rescatistas en las playas de Cartagena. Hoy está orgulloso de su joven alumna que demostró tener el coraje que este oficio necesita.

"Se siente un orgullo muy bonito de poder transmitir los conocimientos que uno tiene a nuevas generaciones, y ojalá poder formar rescatistas que sean proactivos, que eduquen, que sepan nadar y conozcan el mar desde luego, pero sobre todo que difundan el respeto que hay que tener en las playas", asegura.

Añade que "me tocó estar con Alison en este rescate que se produjo con alerta vigente de marejadas, con olas bastante grandes que arrastraron a esta persona y, de hecho, algunos compañeros que intentaron meterse la mar no los dejaba entrar y uno hasta fue a parar a un centro asistencial; pero el mar se puso de lado en un momento y agarramos una corriente que nos permitió sacar a la persona con vida", relató el experimentado salvavidas.

Junto a él, en la playa de San Sebastián a los pies de la Torre 7, su alumna y ahora compañera de rescate Alison Arizmendi, madre de la pequeña Isabella de 2 años, vigila atenta el horizonte y cada cierto rato se acerca a los visitantes y les habla sobre los peligros inherentes a estas playas.

"Si me toca otro rescate, ya sé que no lo voy a pensar dos veces cuando tenga que entrar al mar. Pero eso es lo último, porque antes está la prevención que todas las personas que vienen a la playa tienen que tener, porque como dice mi instructor hay que respetar el mar y cuando vengan a la playa sepan que nadie los va a cuidar mejor que ustedes mismos", sentencia la valiente salvavidas Alison Arizmendi, protagonista de esta historia llena de vocación y compromiso por los demás.

"A medida que nos íbamos acercando vimos que la persona estaba súper adentro, pero no dudé ni un minuto en tirarme al mar",

Alison Arizmendi

6 minutos, según su cálculo, demoró Alison en llegar al bañista desde que recibió la alerta.