Jesús Farías Silva

El Centro Cultural de San Antonio está celebrando 10 años con distintos hitos, entre ellos, el nombramiento de su sala de exposiciones como Fernando Saavedra Machuca, diseñador fallecido en 2019 producto de una complicación cardiaca congénita que le fue detectada cuando tenía siete años y que acabó con su vida a los 27.

La medida fue adoptada de forma unánime por el Concejo Municipal en la última sesión.

El profesional trabajó hasta su muerte en el recinto de calle Antofagasta, donde su legado se mantiene vigente hasta la actualidad.

El 27 de abril, además, se inaugurará una muestra póstuma con sus obras, que lleva el nombre de "Insiste-resiste".

Ante el Concejo expusieron excolegas, la directora de la Dirección de Desarrollo Comunitario (Dideco), Pamela Sáez, y la hermana del diseñador, Natalia Saavedra, en representación de la familia.

"Mi hermano vivió su arte ligado a un proceso terapéutico al tener una enfermedad progresiva, que fue detectada a los siete años, donde le dan un pronóstico de vida de un año. Aún así, su ímpetu por salir adelante lo tuvo hasta los 27", indicó Natalia.

Emocionada, dijo que "nos regaló varios años más y su arte va ligado a que las personas con discapacidad, sobre todo con discapacidad invisible ya que a él no se le notaba, tengan un espacio digno, que sean reconocidos como personas con discapacidad, que tengan prioridad respecto a contratos de trabajo, a pensiones. Su legado, que lleva su arte impregnado, va enfocado a como él se sentía violentado por el sistema respecto a su enfermedad".

Recordó que "participó activamente en la fundación Corazones Luchadores del Hospital Luis Calvo Mackenna, donde era monitor de talleres de autoconocimiento y talleres de motivación para llevar a cuestas las dificultades a las que se ven expuestas las personas con discapacidad".

"Esperamos que su arte pueda llegar a todos los rincones donde existen personas con discapacidad, que se informe respecto de sus derechos, de sus deberes, sobre todo del Estado, que está al debe con respecto a políticas públicas de discapacidad", expresó ante los concejales de la comuna de San Antonio.

Natalia agregó que "quiero agradecer el espacio y espero que esto se pueda perpetuar en el tiempo, cosa de poder hacer talleres, llevar familias que tengan pocos recursos, entregar una palabra de aliento y sobre todo de que independiente de que se tenga una enfermedad catastrófica, independiente de que las políticas públicas te violenten o invisibilicen, se puedan hacer realidad los sueños".

Sus compañeros lo recordaron con afecto. "Compartí dos años con Fernando, colega, amigo, profesional de la cultura, un artista local que imprimió dentro de sus años de trabajo en el Centro Cultural todo su talento como diseñador, artista y creador", dijo en la sesión Gonzalo Villarroel.

Destacó que "Fernando era un artista que pudo trasladar desde su creatividad muchas de las visiones que el Centro Cultural hoy tiene a la hora de generar productos culturales, de difundir nuestras actividades y siempre marcado en un espíritu de superación".

"Por tanto, enmarcados en estos diez años del Centro Cultural, que esta sala de exposiciones, que es un lugar donde se reúne el arte plástico, el arte visual durante todo el año, pueda llevar el nombre de este gran amigo y colega creemos que es lo más oportuno. También tener la posibilidad de que este espacio se conforme como un lugar donde se prioricen montajes que tienen que ver con mostrar problemáticas sociales, socioculturales, en situación de discapacidad, tanto en los montajes, como en los mismos creadores y creadoras", añadió su excolega.

Finalmente, la alcaldesa de San Antonio, Constanza Lizana, expresó que la relevancia de "nombrar esta sala como reconocimiento a Fernando, no es tan solo para personalizarlo, sino que para dar cuenta y visibilizar una lucha que se expresó a través del arte y de eso se trata y para eso tenemos un Centro Cultural, que debe ser expresión de esas luchas que necesitamos expresar en esta sociedad para cambiarla. Espero y confió que este nombre sea expresión de aquello".

"Mi hermano vivió su arte ligado a un proceso terapéutico al tener una enfermedad progresiva, que fue detectada a los siete años",

Natalia Saavedra.