Sólo uno de los tres detenidos participó en balacera que mató al suboficial Palma
El fiscal dijo que el imputado Ovimarlixon Garcés "perfectamente pudo haber sido" quien disparó al carabinero. Los tres sospechosos quedaron en prisión preventiva. Se busca a otras tres personas que estarían involucradas en los hechos.
Matías Gatica Lindsay
A una semana del crimen, el Séptimo Tribunal de Garantía de Santiago formalizó y dejó en prisión preventiva anoche a los tres imputados hasta el momento por los hechos que derivaron en la muerte del suboficial mayor de Carabineros Daniel Palma.
De los detenidos, el único imputado por el homicidio del uniformado es el ciudadano venezolano Ovimarlixon Garcés, quien a juicio del fiscal Felipe Olivarí estuvo involucrado en la balacera fatal. Los otros dos, Luis Lugo y David Fuentes, de acuerdo a la investigación, participaron de un tiroteo anterior y serían todos parte de la misma banda, que estaría formada por otras tres personas que no han sido ubicadas hasta ahora.
El persecutor indicó en la audiencia que a Garcés lo posicionaron en los hechos a través de la revisión de huellas dactilares y el reconocimiento de testigos.
El sospechoso, quien fue detenido en un domicilio en Quinta Normal, habría participado también en la balacera registrada minutos antes del asesinato, en un cité en calle San Francisco con Coquimbo. Allí habría llegado junto a los dos imputados y otras tres personas en dos autos, uno con encargo por robo. Según las víctimas, a una pareja administradora del inmueble los sujetos les robaron $500 mil en efectivo y especies cuando estaban cobrando deudas a los inquilinos. La banda los amenazaron con armas de fuego, razón por la que se tiraron de una ventana para que no les dispararan.
Según la indagatoria, la banda les disparó en múltiples oportunidades a las víctimas. Él huyó en un taxi y ella en una moto.
El fiscal indicó que Garcés y otros tres sujetos se subieron a un auto azul y huyeron; mientras que Luis Lugo y David Fuentes corrieron hacia un edificio y habrían amenazado con armas a una pareja a bordo de un auto para que los llevaran a otro cité. A ellos les habrían robado 5 mil pesos.
De acuerdo a la investigación, Garcés y los restantes escaparon por avenida Matta en el auto, donde fueron fiscalizados por el motorista Daniel Palma, quien fue alertado del tiroteo del cité. Según el fiscal, sin aviso previo, los sujetos bajaron el vidrio de la ventana y uno de ellos le disparó en dos oportunidades al carabinero. El único tiro que recibió fue en el rostro.
Olivarí admitió que aún no determinan que fuera Garcés quien le disparó, aunque agregó que "perfectamente pudo haber sido", pues se encontraron sus huellas dactilares en la puerta trasera izquierda del vehículo, lado contrario al que se realizó la fiscalización.
Tras los disparos, la banda se bajó y abordó a un taxista que estaba afuera del Teatro Caupolicán, a quien amenazaron con armas para que los sacara del lugar.
Según el fiscal, el taxista estaba tan nervioso que no podía hacer partir el auto, motivo por lo que uno de los delincuentes le dijo a otro: "¡Ya, mátalo!". Finalmente los trasladó y dejó en un cité de Quinta Normal.
Dentro de los antecedentes expuestos por el Ministerio Público, se informó que tres días antes del crimen del policía, Lugo y Garcés asaltaron a un hombre y dos mujeres en una plaza de Lo Prado. Las víctimas habrían reconocido el auto azul y a algunos de sus ocupantes por fotos.
La Fiscalía indicó que las vestimenta, seguimientos por GPS, testimonios de testigos, revisión de un celular perdido por Lugo y las pericias a los autos les permitieron establecer la participación del trío en los hechos.
Por ello Ovimarlixon Garcés fue formalizado como autor del homicidio del carabinero, la receptación de un vehículo con encargo por robo y secuestro del taxista que los transportó. También, al igual que Lugo y Fuentes, le formalizaron por homicidio frustrado en el cité. A los otros dos implicados la fiscalía les atribuyó el robo con intimidación a una pareja.
La defensa de Garcés dijo que la Fiscalía no presentó las pruebas suficientes para posicionarlo como autor del asesinato, y acusó que al momento de su detención no le leyeron sus cargos y que se le retuvo siete horas en calidad de testigo. Olivari dijo que si bien en el principio sí era testigo, se pidió una orden al tribunal para presentar cargos, tras acreditar su participación.
Los defensores de los tres imputados acusaron incongruencias en los testimonios de los testigos.
La jueza del Séptimo Juzgado, Pilar Ahumada, desestimó los alegatos de los defensores, dijo que los antecedentes de la Fiscalía le parecían "verosímiles" y de "lógica" para el momento procesal del caso, los cargos imputados y la gravedad de lo sucedido, por lo que decretó la prisión preventiva para los tres imputados "por tratarse de un peligro para la sociedad" y dio seis meses para la investigación.
Temprano, tras visitar a tres carabineros heridos de bala en un operativo ocurrido el miércoles en La Florida, la ministra del Interior, Carolina Tohá, respaldó el accionar de las fuerzas de orden . "Todos esos delincuentes armados que hoy están atacando a policías (...) sepan que van a ser buscados, encontrados y encarcelados", afirmó.