Juan Olivares Meza

La que termina debe ser una de las semanas más activas para los comités de los campamentos que rodean San Antonio, especialmente para las tomas del cerro Centinela que iniciaron una verdadera ofensiva de reuniones y gestiones, luego que a principios de este mes la Corte de Apelaciones de Valparaíso diera la orden de desalojar, en un plazo máximo de cuatro meses, 254 hectáreas de propiedad de la Inmobiliaria y Constructora San Antonio.

Así, mientras la vocería de las tomas del cerro Centinela pasó estar integrada por 16 comités, a quedar conformada por 33, con la posibilidad que el número crezca en los próximos días, ya que al cierre de esta edición se habían programado reuniones con grupos que bien podrían llegar a duplicar esa cantidad de comités para formar una sola gran agrupación de familias instaladas en tomas de terrenos.

En paralelo, también esta semana, aparecieron las primeras señales de resistencia con rayados y carteles contra el desalojo, a lo largo de la avenida Antonio Núñez de Fonseca, entre San Antonio y Cartagena, como también en la entrada de algunos campamentos.

Estas manifestaciones pacíficas contra el desalojo no han caído del todo bien en varias agrupaciones que aseguran están por el diálogo antes que la resistencia.

Tal es el caso del campamento Los Libertadores, que a través de su vocera Verónica Morales, fijó su posición.

"Nosotros Los Conquistadores no nos sumamos a los desórdenes ni desmanes públicos, pero sí estamos empatizando y apoyamos todo el trabajo tanto de la vocera Karina Ayala, como de todas las otras tomas, para que en conjunto salgamos airosos de toda esta situación. Siempre con respeto, con estudios de la realidad que vivimos y siempre con buenas prácticas para que podamos llegar a una solución buena, sin violencia, sin destrozos", dijo Verónica Morales.

La dirigenta agregó que "estamos trabajando por el bien común de todos porque al final si hay una toma que sufra una cosa, nos arrastrará a todas las tomas. Y por eso Los Conquistadores no queremos violencia, ni rayados, ni lienzos. De hecho, pusieron un lienzo aquí afuera en mi portón, sin aviso, sin nada, lo sacamos porque esa no es la forma y sabemos que son muy poquitos los que están haciendo esos desmanes".

33 comités integran ahora una de las agrupaciones del cerro Centinela, pero podrían ser más.

Tras una seguidilla de temblores ocurridos en la Región de Valparaíso, el diputado Hotuiti Teao inició una fiscalización a Senapred Valparaíso, a fin de conocer simulacros de evacuación realizados los últimos años, el estado de las señaléticas de evacuación y si se han incorporado protocolos de evacuación vertical para lugares lejanos a los cerros.

Además, el legislador solicitó la realización de simulacros para que la comunidad esté preparada ante un eventual terremoto y/o tsunami y pidió -especialmente- que se realizara uno en el hospital Carlos van Buren, considerando que se encuentra en zona inundable.

"No podemos hacer nada para evitar que ocurran terremotos y tsunamis, pero lo que si podemos hacer es mantener a la comunidad preparada para resguardar su vida ante un evento como éste. Por eso, elevamos un oficio a Senapred Valparaíso, dependiente del Ministerio de Interior, a fin de fiscalizar cuántos simulacros de evacuación se han realizado en los últimos años, el estado de las señaléticas de evacuación que debiesen existir en zonas inundables y si se han incorporado protocolos de evacuación vertical para lugares lejanos a los cerros", puntualizó el parlamentario.

Además, Teao solicitó "la realización de simulacros en todas las comunas de la región para que la comunidad esté preparada ante un eventual terremoto y tsunami. Todo esto, considerando que el director de la Escuela de Geología de la Universidad Mayor, Christian Salazar, fue enfático en proyectar que el próximo terremoto puede ocurrir en la región de Valparaíso".

"Vivimos en un país sísmico y nunca debemos perder la costumbre de tener claro qué hacer y dónde evacuar ante una emergencia como ésta", dijo.