Crónica
La medialuna de San Juan se llenó el segundo día de celebraciones por las Fiestas Patrias y ayer, en la jornada final del evento organizado por la Municipalidad de San Antonio, iban por el mismo camino.
De acuerdo a estimaciones más de 5 mil personas llegaron hasta el sector rural de la comuna para presenciar el espectáculo que tenía como plato fuerte a la Agrupación Marilyn, aunque más de alguien dijo que lo mejor fue el grupo local, Choro e`playa.
La masiva concurrencia generó problemas, como tacos y falta de estacionamientos, pero el público en general se mostró satisfecho con el desarrollo del segundo de tres días de festejos.
"Estuvo genial, lo pasamos muy bien, cantamos, bailamos y comimos. Buena la seguridad y el ambiente grato y familiar", comentó Carolina Farías, en las redes sociales del municipio.
Por su parte, Catalina Rojas, aseguró que el evento fue "excelente, deberían hacer este tipo de eventos más seguido. Mis hijas quedaron felices, todo muy organizado, harto guardia y carabineros".
Anoche el evento cerraba con la presentación de la Sonora Palacios.
Criticas
Si bien algunos disfrutaron con el evento, a otros no les gustó, no por los artistas o la comida, sino por las externalidades que se ocasionaron.
Desde que se anunció que la medialuna de San Juan -El Tranque sería la locación, dos organizaciones lideraron una férrea oposición al desarrollo del evento de tres días.
Una fue la Agrupación de Madres y Padres de Niños con TEA. Ayer Diario El Líder tuvo acceso al testimonio de una mamá, que enfrentó varios inconvenientes con su hijo el domingo. Ayer optó por dejar su casa.
"Retumba demasiado, muy fuerte la bulla, se empezó a sentir más en la tarde, no en el día. Le pusimos unas placas a la terraza, la cerramos entera para no escuchar el ruido, pero igual se escuchaba. Le tuve que explicar a mi hijo que había unas ramadas en el club de huasos y se encerró en su dormitorio, prefiero que esté así antes que se descompense", describió Evelyn Torres, quien vive frente a la medialuna.
El coordinador del Movimiento de Defensa Ambiental de San Juan, Cristian López, contó que el domingo "cuando iba por la avenida San Juan, a unos 200 o 250 metros antes de la bajada al puente, me encontré con un taco muy largo, en dirección hacia el tranque".
Agregó que "noté un colapso respecto a los vehículos estacionados al costado de la avenida. Como la ruta G-904 no tiene en ese sector y prácticamente en ninguno veredas ni tampoco bermas, los autos estaban estacionados casi al lado de la calzada, algunos sobre la línea blanca que da al camino. Las personas tenían que circular por la misma calle lo que era un peligro".
Según el dirigente "después del puente estaba completamente lleno por ambos lados y eso provocaba lentitud de los vehículos al pasar. Fue preocupante, esto lo hicimos notar en el recurso de protección (presentado el viernes en la Corte de Apelaciones de Valparaíso) dado el peligro de usar la misma vía para el tránsito de vehículos para ingresar directamente a las fondas y como estacionamiento".
