Edinho, hijo de Pelé: "Mi padre habló de fútbol hasta el final"
El 29 de diciembre se cumple el primer año del deceso de "O Rei". "Echamos de menos al hombre, pero su legado será eterno", comenta el hijo mayor del "10".
B.V.B / EFE
Este viernes se cumplirá un año desde que el mundo del fútbol sufrió la partida de Pelé. El tricampeón del mundo falleció a los 82 años y a poco de la fecha la familia recuerda que habló de fútbol hasta los últimos momentos. Su hijo Edinho, exportero de Santos y ahora técnico, no ha tenido tiempo para pasar el luto entre homenajes, entrevistas y trámites burocráticos para zanjar el reparto de la herencia de uno de los mejores futbolistas de la historia.
"Parece que ocurrió ayer. Vivo emocionalmente en ese momento. El sentimiento es el mismo, lo extraño muchísimo", expresa. Ha sido un año de "bastante reflexión" sobre la figura de su padre, algo que le ha servido para tomar conciencia de "la responsabilidad" que se ha impuesto por mantener el legado su padre.
"La historia de Pelé es eterna y será contada para la eternidad, sin duda (...) Echamos de menos al hombre, pero su legado será eterno", comentó, anunciando que deberán aprovecharlo para ayudar a las personas por medio de programas sociales.
El primer hijo varón de "O Rei" tiene 53 años y piensa muy bien en cada palabra al momento de expresar cómo era Edson Arantes do Nascimiento, el nombre real de Pelé. Destaca su autenticidad, su humildad, su coraje y su capacidad para conseguir mantener el equilibrio entre ser "el rey del fútbol" y una de las personas más conocidas del mundo, con ser "un hombre simple, con los pies en el suelo".
Junto con eso, confirma que se mantenía hablando de fútbol hasta el final. "Imagina tener el privilegio de conversar de fútbol con Pelé. Eran discusiones muy ricas cuando él traía su experiencia. Hablábamos de la evolución del juego, muchas veces me hacía preguntas sobre las tácticas", dijo Edinho. "Habló de fútbol hasta en los últimos momentos, hasta el final", cerró.
En los últimos años, "O Rei" fue perdiendo movilidad y poco a poco comenzó a deteriorarse su estado de salud, además de las complicaciones de un cáncer de colon. Su última Navidad la pasó en una clínica de Sao Paulo con su esposa, Marcia Aoki, sus hijos y sus nietos.