Familia de argentino desaparecido en el mar pide que la búsqueda se mantenga
David Soto, de 28 años, fue arrastrado por el oleaje en la playa Marbella y sus seres queridos se aferran a milagro para que el cuerpo aparezca.
Ayer se cumplió una semana desde que el 21 de enero las marejadas arrastraran desde la playa Marbella de la comuna de Santo Domingo al joven argentino David Soto Rosas, de 28 años, quien había llegado a Chile a principios de enero para nacionalizarse y quedarse a trabajar en el país con su familia chilena.
Pero todos los planes de "Tito" como llamaban al cordobés, se derrumbaron a partir de las 18 horas del fatídico domingo 21 cuando, acompañado de dos primos de 18 años, subió a los roqueríos al sur de la playa Marbella y en esas circunstancias uno de ellos cayó entre las rocas y en su desesperación David bajó a rescatarlo sin imaginar que sería arrastrado de manera fatal por la fuerza de las marejadas.
Por la tarde de ayer, Enzo Gastón Yanello, el sobrino que cayó desde las rocas se despidió de Chile y regresó a Argentina para seguir el tratamiento por las severas lesiones que sufrió tras su caída.
También por la tarde de ayer, Pamela Soto Rosas, la hermana de David, habló desde la playa Marbella donde cumplió junto a su familia el séptimo día de vigilia teniendo como única novedad la polera de su hermano, que la Armada de Chile encontró en la zona del accidente.
"A una semana de este accidente horrible que ocurrió, rogamos en su memoria que aparezca, aquí estamos esperando el milagro para que aparezca el cuerpo de mi hermano ya que han sido días muy difíciles para toda la familia, todo esto ha sido demasiado para nosotros y todo ha sido muy doloroso. Por lo que nos dijeron algunos marinos a partir de ahora hay alguna posibilidad de que aparezca", dijo Pamela procurando no ahogar sus palabras en el llanto contenido de la impotencia que le genera la inmensidad del mar que no quiere devolver el cuerpo de su hermano.
Esperanza
Muy afectada Pamela reconoció que "los marinos y las personas del gobierno, la verdad es que han estado muy atentos, no tengo nada que decir. Pero sí nos han dicho que a partir del día 7 hay más probabilidades que David aparezca porque no nos ha jugado el favor el clima y hoy (ayer) la verdad es que cuando llegamos esta mañana eh...estaba bastante raro el mar así que...no sé, estamos con la esperanza de que el mar lo devuelva porque cada día que pasa es peor".
"Mi hermano vivía en Córdoba capital, pero se había venido a vivir a partir del 6 de enero que llegó acá a Chile, ahí andaba visitando familiares, porque él era cordobés; era el único argentino en nuestra familia, nosotros somos cuatro hermanos y tenía mucha ilusión de empezar una nueva vida en Chile. Hizo lo trámites con la nacionalización que le dio mi mamá y eso se atrasó un poco y salió ahora después que desapareció. No podrá cumplir sus sueños, lo sabemos, pero como vino con tanta ilusión a Chile lo único que pedimos es que no se termine la búsqueda, que sigan rastreando, porque necesitamos recuperar su cuerpo para cerrar este proceso tan doloroso, para terminar con esta tragedia que nos duele mucho porque pasan los días y mi hermano no aparece, el mar no lo devuelve…"
Las palabras de Pamela sucumben ante el llanto razonable de una mujer desesperada que, como ella misma dice, se aferra a un milagro para que el oleaje tenga clemencia y amaine tanta angustia.
"El miedo ahora es hasta cuándo se va a mantener esa constancia, ya que estamos en el día 7 y sabemos que hay un tiempo determinado para este tipo de casos. Mañana (hoy) tenemos que acercarnos a hablar con el fiscal, ya que él nunca se acercó hasta ahora a hablar con nosotros y queremos saber cómo sigue el proceso", dijo Pamela con el dolor y la incertidumbre que la abraza a ella y a toda su familia.
"A una semana de este accidente horrible que ocurrió, rogamos en su memoria que aparezca, aquí estamos esperando el milagro para que aparezca mi hermano",
Pamela Soto Rosas