" Soy inocente, era un juego nada más entre nosotros". Con esas palabras concluyó el juicio oral en contra de un pastor evangélico de 62 años que quiso exculparse de la violación que cometió en contra de uno de sus feligreses que presenta un grave impedimento intelectual, delito por el cual fue condenado y sentenciado a ir a la cárcel.

La semana pasada el acusado fue hallado culpable por el Tribunal Oral en lo Penal (TOP) de San Antonio por el ataque sexual que, según se demostró en el juicio, cometió al interior de una iglesia protestante que se ubicaba en una población de la Playa Grande de Cartagena. Por ello, este martes el líder espiritual fue sentenciado a una pena de seis años de presidio que deberá cumplir de manera efectiva en prisión.

La fiscalía había solicitado, tras el veredicto condenatorio, una pena de 10 años de presidio para el imputado, quien por orden del tribunal sólo puede ser identificado con sus iniciales J.E.R.O.

Ilícito

En el juicio, la fiscal de Delitos Sexuales, Javiera Torres, logró demostrar que el imputado fue el autor de este repudiable delito, ocurrido en 2016, cuando el afectado tenía 53 años, pero que debido a su condición intelectual no era capaz de defenderse.

Desde entonces comenzó un largo proceso investigativo en contra del pastor evangélico, el que se vio dificultado por la toma de declaración del afectado, dado su trastorno intelectual.

Sin embargo, su hermana que está a su cuidado pudo relatar lo sucedido ante la Brigada de Delitos Sexuales (Brisex) de la Policía de Investigaciones que estuvo a cargo de las pesquisas. Además, se efectuaron diversos peritajes y análisis del Servicio Médico Legal a la víctima para que se dieran por establecidos los hechos, siendo el acusado recién formalizado el año pasado.

Con toda la prueba presentada, los jueces condenaron por unanimidad al pastor como autor del delito de violación.

"Con la prueba rendida (...) es posible acertar los siguientes hechos: que en algún momento entre la noche del 28 de mayo y la madrugada del día siguiente del año 2016, en una iglesia entonces fijada en (...) la comuna Cartagena, J.E.R.O., aprovechándose de la condición de enajenación mental de la víctima (...) le realizó sin su consentimiento tocaciones en su cuerpo", dice el veredicto y agrega que luego le tocó sus genitales y lo accedió carnalmente, entregando detalles que Diario El Líder omitirá por protección de la integridad de la víctima.

En el fallo, los jueces, presididos por la magistrada Daniela Herrera, determinaron que "el persecutor logró acreditar más allá de toda duda razonable que el acusado, aprovechándose de la enajenación mental de la víctima (lo violó)".

Condena

El TOP dictaminó los seis años de presidio contra J.E.R.O., desacreditando la declaración que entregó en el juicio. El acusado manifestó que no violó a la víctima y que tenía una relación cercana con la familia de este. Dijo también que era un "juego" cuando le realizó las tocaciones en sus zonas íntimas.

"Si bien el encartado (condenado) reconoció los aspectos tempoespaciales (al decir que estuvo el día de los hechos en la iglesia indicada en la acusación) e que incluso que tocó (...) por debajo de la ropa a la víctima, prestó una versión acomodaticia de los hechos, aseverando que no violó al afectado, lo que fue refutado con las probanzas de cargo, las que a través de una declaración concatenada de las mismas llevan a construir la existencia (de la violación)", resolvió el tribunal oral.

El pastor se encuentra en prisión preventiva desde que se dictó el veredicto condenatorio la semana pasada, situación en que se encontrará hasta que la sentencia esté ejecutoriada, que sería en un plazo de 10 días, a no ser que cancele una fianza de un millón de pesos.

Su defensa aún tiene plazo para presentar un recurso ante la Corte de Apelaciones de Valparaíso para dejar sin efecto lo resuelto por el TOP local, acción judicial que estancaría la ejecución de la sentencia.

"Es posible acertar (...) que entre la noche del 28 de mayo y la madrugada del día siguiente del año 2016, en una iglesia en (...) Cartagena, J.E.R.O., aprovechándose de la condición de enajenación mental de la víctima (...) le realizó (...) tocaciones",

veredicto

53 años tenía al afectado al momento de ocurrido el delito en una iglesia de Cartagena.

2016 ocurrió el hecho que fue denunciado y que ahora dejó a un individuo condenado por violación.