Juanita Ortiz Bonilla

Mundos fantásticos llenos de aventuras, historias que nos hacen retroceder en el tiempo, el misterio del universo y cuentos que se convierten en recuerdos inolvidables de nuestra infancia, son parte de la magia que se puede encontrar en las páginas de los libros. Además, si la lectura comienza desde pequeños son muchos más los beneficios que se pueden adquirir, entre ellos desarrollar de mejor manera la comprensión lectora y tener buena ortografía, entre otros.

Marcelo Degueldre, psicólogo de profesión lleva doce años promoviendo la lectura infantil a través de su emprendimiento "Ventanitas" (@ventanitas. librosinfantiles), en el que se dedica a la venta de libros para niños de todas las edades, iniciativa que ha llevado a otras comunas incluso fuera de la región.

En su puesto de la Feria de Emprendedores de Llolleo, llaman la atención los colores y diseños de los textos que tiene exhibidos en el stand. Para los más chicos hay libros con "títeres para dedos", mientras que para los más curiosos que quieren saber sobre diferentes temas, tiene publicaciones sobre Astronomía, Ciencias, las aves chilenas e incluso la historia de Colo- Colo para los hinchas del "Eterno Campeón", entre muchas otras obras.

-"Llegué a San Antonio hace 22 años porque un compañero de universidad dejó un cargo, entonces llevé mi currículum y partí trabajando en un centro que ya no existe que es el Centro de Atención Diurna "Juan Mackenna" que estaba en arzobispo Valdivieso. Luego fui el último psicólogo que trabajó en Fundación "Mi Casa" en el hogar que está en Llolleo Alto y trabajaba en Santiago el resto del tiempo, en la universidad Arcis", recordó Marcelo Degueldre cómo llegó radicarse en San Antonio.

-"Luego desde la oficina de Juventud me invitaron a hacerme cargo de un proyecto que tenía que ver con diagnosticar a niños, niñas y adolescentes desde la perspectiva de los derechos. Ese proyecto me interesó y me implicaba más tiempo. Fue un proyecto súper interesante que me abrió las puertas en mi desarrollo profesional, porque aún había muchas ideas de que los sicólogos principalmente se desarrollaban haciendo clínica, pero a mi me hizo ver que se puede hacer un trabajo súper interesante a nivel local y de gestión social como para atraer recursos de atención y apoyo para los niños y adolescentes en una comuna. Después me dio la oportunidad de hacerme cargo de la oficina de derechos cuando llegó a San Antonio", agregó mientras estaba en su puesto de la plaza de Llolleo la mañana del "Viernes Santo", cuando al parecer el frío viento alejó a los visitantes al lugar.

-Cuando me fui de la Opd estaba ocurriendo un cambio donde el énfasis de las políticas públicas hacia la infancia no estaba en lo preventivo ni en lo promocional, que era lo que hacían los Centro Comunitarios de Infantojuveniles, sino que empezaron a irse todos los recursos del Sename en ese tiempo, hacia la intervención.

-¿Cuándo te decides a partir con "Ventanitas"?

-Coincidió un poco cuando me fui de la oficina de Protección de Derechos y se cruzó con mi interés porque en esos años yo era padre de niños pequeños. Siempre he tenido interés por la lectura y la literatura y no había oferta en San Antonio de librerías que contarán con libros originales y que no tuvieran que ver con lo escolar, sino que libros entretenidos que uno pudiera llevarle a los niños para estimularlos a desarrollar su creatividad e inteligencia. En un viaje encontré libros muy bonitos, traje y se los mostré a algunos cercanos a los que les gustaron mucho. Ahí pensé, aquí tal vez hay algo en que seguir desarrollándome. Los empecé a traer y se transformó en un emprendimiento.

-¿Crees que debería haber mayor promoción de la lectura en los niños?

-Absolutamente sí. Primero por varias razones, las investigaciones han demostrado que la capacidad de la comprensión lectora de los niños, niñas y adolescentes no mejora y es preocupante porque es la base de cualquier desarrollo que nosotros podamos tener en términos de trayectoria educativa y profesionales después. Junto con eso está la irrupción del uso del celular a tan temprana edad que los científicos y las asociaciones pediátricas han dicho que es nocivo para los niños, que incluso afecta su desarrollo cerebral y su vocabulario. Está comprobado que los niños que usan el celular a muy temprana edad manejan menos palabras a los 5 años que los que están leyendo o cercanos a leer.

-¿Qué falta para darle una solución a esta deficiencia?

-Es que pese a que hay más políticas de libre lectura, eso todavía está muy centralizado. No hay librerías en general comunales, excepto aquellas alcaldías que han abierto "Librerías populares" como la de Cerro Navia. Si no hay recursos o políticas de los gobiernos locales o desde el central para generar financiamiento por ejemplo para emprender la libre lectura, lo que termina provocando es que no hay librerías en las ciudades más pequeñas o en las provincias. Existen cadenas de librerías en ciudades grandes y el comercio en línea ha mejorado un poco eso.

-¿Hay algún libro que sea de mayor interés de los pequeños?

-Cuando son pequeñitos son los padres por lo general los que eligen. Nosotros les sugerimos libros que son interactivos, que tengan un material apropiado para que no se dañen, como libros de tela o inflables también y que enseñen cosas que los estimulen como los didácticos con títeres de dedo. Cuando ellos ya eligen por si mismos, hay niños que están interesados en libros científicos. Desde hace un tiempo piden libros sobre el sistema solar, los insectos y los de dinosaurios desde siempre. Ha habido un muy reciente interés por el reino funji, de los hongos.

NO SOLO HISTORIETAS

Marcelo Degrelde destaca que a los niños no se motivan sólo a leer comics o libros con historias fantásticas, sino que últimamente quieren saben más acerca de lo que los rodea como la flora y fauna silvestre que se encuentra en la zona.

-¿Qué libro recomendarías a los padres para regalárselo a sus hijos?

-Hay un libro muy entretenido que se llama "Pajareando" que es una guía de aves, para los niños que les interesa hacer observación. También hay publicaciones sobre Astronomía del profesor José Maza, "El universo según Carlota", de la astrónoma Teresa Paneke o los textos de Gabriel León que enseñan sobre ciencia. Estos siempre están dentro de nuestro catálogo porque son muy útiles y entretenidos para aprender.

-De los ejemplares que tienes acá. ¿Hay alguno que sea el más pedido?

-Desde el año pasado he traído un libro sobre la historia de Colo- Colo en comics, el que es muy entretenido y no sólo le llama la atención a niños, sino que adultos que son hinchas también lo han llevado. Ha sido un libro de mucha demanda que empecé a traerlo a fines del año pasado.

-¿Cuál es tu escritor favorito?

-Siempre me ha gustado leer y tengo varios autores favoritos como Cortázar, me gusta la poesía de Enrique Lihn y Oscar Hahn, por supuesto también Neruda y por mucho tiempo leí libros de Milan Kundera que falleció hace poquito. Chilenos de narrativa reciente, me gusta Alejandro Zambra, lo recomiendo mucho.

-¿Estás dedicado sólo a "Ventanitas" o ejerces como psicólogo?

-Sigo siendo psicólogo pero no hago atención clínica. Trabajo en el colegio "Nueva Providencia" en el área de convivencia escolar, así es que sigo desarrollando mi profesión y la combino con este emprendimiento social que tengo como es "Ventanita".

-¿Internet podría terminar con los libros tradicionales?

-El tema con internet entre otras cosas, pese a toda la cantidad de información que hay disponible, es que es una experiencia más individual, más solitaria. En cambio leerle un libro a un niño es algo que favorece el vínculo, alimenta la relación entre padre e hijo. El libro provee ese proceso de estar, aprender y divertirse juntos.