"Yo no sexualicé nada en mi juventud, yo era yo"
La voz tras "Desesperada" se encuentra en una gira que la traerá por Chile y habla de sus inicios de su momento actual, en que canta junto a un piano.
Agencia EFE
Pionera de las divas del pop en España en los años 80, desde sus inicios con el grupo Olé Olé y hasta ser considerada una de las grandes voces de la música iberoamericana, Marta Sánchez ocupó atención como icono sexual, algo que, casi 40 años después, niega que fuese para ganar popularidad.
"Yo no sexualicé nada, yo era yo, no era una estrategia, porque no sé fingir", señala la artista que causó conmoción cuando, cual Marilyn Monroe, animó a la tropas hispanas en la Guerra del Golfo Pérsico en 1989.
Sánchez, de 57 años, insiste en que su sensualidad y vestuario era una vía más de expresión natural para una chica que empezó en la música con 19 años. "A mí nadie me impuso que fuese sexy ni que me vistiese de una forma determinada. Lo llevaba intrínseco en mi personalidad", precisa la cantante que se presentará en Chile el 17 y 18 de mayo. "Y aunque se distrajera a la gente con mi físico, yo no dejé de cuidar mi labor vocal desde el principio".
Fueron sus trabajos junto a Andrea Bocelli con "Vivo por ella" y su disco 'Desesperada' (1998) los que contribuyeron a dibujarla de otra manera para la crítica y el gran público.
Hoy, se pasea luciendo esa voz acompañada de un piano. "Después de casi 40 años de carrera, me apetece vivir", afirma. Sánchez triunfó en un mercado en el que no abundaban las solistas femeninas y contribuyó así a marcar una pauta hoy mucho más extendida. "Me gustaría saber que, a lo mejor, mi manera de interpretar dejó un legado, un aprendizaje o una inspiración para artistas venideras", reconoce.
"Hay menos limitaciones hoy que antaño y han surgido más talentos de este sexo, pero tampoco rebuscaría las razones. Creo que, para hombres y mujeres, hay las mismas oportunidades. No creo que a nosotras se nos impida hacer carrera más que a los hombres", considera.