Imprudentes quedaron enterrados en la playa y uno tenía orden de captura vigente
La Armada tomó el procedimiento en la ribera norte de la desembocadura del río Maipo
La ribera del río Maipo, en la comuna de San Antonio, fue escenario de una insólita situación causada por conductores que ingresaron irresponsablemente a una zona de playa, prohibida para vehículos, donde quedaron enterrados en la arena, generando un operativo de rescate tan inusual como peligroso.
Sobre estos hechos, el capitán de fragata Eugenio Bosque, capitán de puerto de San Antonio, explicó a Diario El Líder que "el día de ayer (martes), unos vehículos que ingresaron a la ribera del río Maipo quedaron atrapados. Después tuvieron que contratar unas grúas que los ayudaron y otros autos usaron un sistema de winches para sacarlos".
El oficial de la Armada agregó que "ambos conductores quedaron citados a la Capitanía de Puerto por ingresar con vehículos al terreno de playa. Además, en el mismo lugar se hicieron controles de identidad a los infractores y uno de ellos arrojó una orden de detención pendiente, por lo que fue detenido y puesto a disposición del Tribunal de Garantía".
Enterrados
El incidente comenzó cuando los conductores, desafiando las normativas vigentes, decidieron aventurarse en un terreno que claramente está marcado como prohibido para vehículos motorizados.
La playa, conocida por su arena blanda y su terreno inestable, rápidamente atrapó a los automóviles, dejándolos inmovilizados y a sus dueños en una situación de riesgo por la que deberán responder ante la justicia.
Ante la imposibilidad de sacar los vehículos por sus propios medios, los conductores recurrieron a servicios de grúas y a la ayuda de otros automovilistas, quienes utilizaron sistemas de winches para intentar liberar los autos de su trampa de arena. El operativo duró varias horas y atrajo la atención de los curiosos que se encontraban en la zona, quienes no podían creer la escena que se desarrollaba en un predio que además es una reserva de la naturaleza.
2 personas fueron fiscalizadas y citadas por la Armada por su responsabilidad en este incidente ocurrido en la playa de Llolleo.