Nicolás Labra G.

Félix Soumastre está de vuelta, y no para una nueva parte de "Amor Ciego", sino que como uno de los confirmados del próximo reality de Canal 13, "Palabra de Honor", que reemplazará a "Ganar o Servir".

Un regreso que inevitablemente trae a la memoria las escenas que marcaron la participación de Soumastre en el programa de 2008 en el que, junto a otros 24 hombres, debían conquistar el corazón de la modelo Carolina Bastías. Disputa que fue escalando y dio paso a una de las escenas más recordadas en la historia de los realities chilenos: él discutiendo con Edmundo Varas, quien le respondía "tranquilo papá", mientras golpeaba sus dos manos frente al rostro de un Soumastre que lo increpaba.

Ahora, unos 16 años después de esa escena, Soumastre se confiesa totalmente cambiado, ahora es padre, y asegura estar más maduro, por lo que no cree que algo así se repita en su participación en "Palabra de Honor".

"Lo hago todo por mi hija. Si bien yo siempre dije que la madurez se la dejaba a las verduras, se podría decir que he madurado con el tiempo. No veo por dónde pueda repetirse un momento como el del 'Tranquilo papá' hoy, porque leyendo 'El arte de la guerra' he aprendido mucho y creo que ahora manejo diferente los conflictos. Llega un momento en que dices 'No puedo estar discutiendo con un h… así'. Alguien por ahí decía que nunca discutas con un idiota porque te hará descender a tu nivel y te ganará por experiencia", asegura a este medio, recordando el famoso momento.

Pese a eso, sorprende y asegura que ahora mantiene una buena relación con Varas, su enemigo acérrimo en esa época. "Me encantaría compartir con Edmundo en un reality, ahora nos llevamos bien. También con mis buenos amigos de la televisión, como Iván Cabrera, que es como mi hermano, o con Mario Velasco".

De lo que fue "Amor Ciego", valora que "es un reality en el que tuve la oportunidad de conocer París, todo pagado, y sigo teniendo contacto con muchos participantes de esa época".

Soumastre, periodista y dedicado al mundo de las consultorías, asegura que una de sus mayores dificultades en el interior del reality tendrán que ver con el cumplimiento de normas y horarios. "Mi mayor problema en el reality va a ser la disciplina, porque yo no tengo nada de disciplina. Estoy acostumbrado a trabajar de noche como DJ y no soy muy de respetar las reglas".

Otro factor que considera le puede jugar en contra es el paso del tiempo, ahora con más de 40 años en el cuerpo. "No sólo he madurado, también me he gastado. Han pasado muchos años, y la falla de material es real, ahora tengo una artrosis incipiente y tuve que ir al kinesiólogo. A la hora de las pruebas yo creo que en puntería ando bien, creo que es mi única habilidad".

En cualquier caso, aseguró que esta posibilidad no la podía rechazar para regresar a la telerrealidad. "Me han ofrecido innumerables realities en estos 16 años y a todos les dije que no. Pero esta vez la oferta fue demasiado buena para rechazarla, además que es un equipo que conozco bien. Lo que quiero es vivir el proceso y quedarme con la experiencia. Quiero pasarlo bien y competir, porque no puede ser un programa para ir a pasarlo mal o para deprimirse".

Pharrell Williams se transforma en una figura de Lego en 'Piece by Piece' ('Pieza por pieza'), un documental animado sobre la vida del productor y cantautor estadounidense que "conecta con el niño interior de muchas personas", cuenta en entrevista con EFE.

Esta historia, estrenada el viernes a nivel internacional, "te recuerda que ahora estamos en un mundo mejor, persigue tus sueños y constrúyelos literalmente pieza por pieza", agrega el cantante de 'Happy'.

Dirigida por Morgan Neville, la cinta escarba el origen de Williams en la industria musical, un camino en el que se va topando con artistas como Gwen Stefani, Kendrick Lamar, Timbaland, Justin Timberlake, Jay-Z, Snoop Dogg o su esposa Helen Lasichanh, quienes lo han ido acompañando en cada paso y ayudan a construir la narrativa.

En una suerte de formato entrevista, Neville y Williams van encajando las piezas de su amor por la música y cómo su creatividad e imaginación lo llevaron a estar detrás de numerosos proyectos como 'I'm a Slave 4 U', de Britney Spears; 'Beautiful', de Justin Timbelake; o 'Drop it Like It's Hard', que interpreta junto al rapero Snoop Dogg.

"Esta película es una idea inusual, me di cuenta de que es un reflejo de cómo piensa Pharrell, que es tomar cosas que no crees que puedan ir juntas, juntarlas, y encontrar la magia en eso", dice por su parte Neville a EFE.

Que Williams se decantara por la original idea de documentar su vida a través de figuras de Lego no es casualidad. "Cuando era niño, mis primeros recuerdos de juguetes son con sets de Lego".