Falleció joven al que balearon en persecución en parcelas de Llolleo
Kevin Estay (19) fue alcanzado por un tiro en el cuello a comienzos de este mes. Estuvo internado en UCI de Valparaíso, donde dejó de existir.
Luego de 18 días luchando por mantenerse con vida, el joven de 19 años que fue baleado en el cuello perdió la batalla y dejó de existir en la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital Carlos van Buren de Valparaíso.
Kevin Alexander Estay Azócar se mantenía internado en la capital regional desde el 2 diciembre pasado, un día después de que fuese alcanzado por un proyectil balístico en medio de una persecución entre vehículos particulares que se registró en la parcelación Santa Rosa de la Mar de Llolleo alto, en el sector La Campiña.
Ese domingo uno de diciembre, a las 20.30 horas, sujetos desconocidos que se movilizaban en un automóvil gris dispararon aparentemente con fusiles, pues lo hicieron en ráfagas, percutiendo unos 30 disparos en el interior de la parcelación.
Entonces, Kevin Estay fue herido en la cervical, siendo trasladado por amigos al Servicio de Atención Primaria de Urgencia de Alta Resolución (SAR) del consultorio de Las Lomas, donde ingresó en riesgo vital. De ahí fue derivado de inmediato al hospital Claudio Vicuña de San Antonio y luego a Valparaíso, donde finalmente falleció este jueves 19 de diciembre producto de las graves lesiones que sufrió tras la balacera.
El exalumno de la Escuela Industrial de San Antonio mantenía un cuadro grave derivado del daño en su cuello, que lo mantenían conectado a ventilación mecánica. Cumplió sus 19 años hospitalizado.
El occiso estuvo siendo velado en la que fuera su casa de la parcelación donde ocurrió el ataque armado y ayer en la tarde se llevó a cabo su funeral en el cementerio Parque del Sendero de Llolleo.
Investigación
Desde que ocurrió la persecución con balacera, la Brigada de Homicidios (BH) mantiene diligencias para dar con los autores de los disparos.
Se conoce que el uno de diciembre los dos vehículos, uno en que Kevin Alexander iba como ocupante, era perseguido por el otro auto, desplazándose desde los departamento de La Campiña hacia el interior de la parcelación, donde les dieron alcance y los balearon.
En el lugar, los vecinos relataron a Diario El Líder que levantaron 30 casquillos de bala que quedaron desperdigados en las calles y narraron que se oían ráfagas de disparos.
La BH se entrevistó con testigos del hecho, con personal de salud del consultorio de Llolleo y buscó imágenes de cámaras de seguridad.
Sin embargo, hasta ahora no se ha logrado dar con los sujetos que abrieron fuego y que ahora son autores de un homicidio. El hecho se habría tratado de un ajuste de cuentas por rencillas anteriores del chofer del auto en que iba a bordo la víctima fatal.