David Muñoz Castillo

La Navidad a veces pierde su sentido y se transforma en un acto de comprar compulsivamente regalos. Sin embargo, cuando la solidaridad aflora, recupera su real valor.

Precisamente en la comunidad de la toma Frente al Mar de la parte alta de Cartagena, en el sector de la estación, los más vulnerables recibieron una alegría en esta fiesta, gracias a la colaboración de un vecino de Las Cruces, de dirigentes del asentamiento y las mismas familias.

La tarde del sábado, y por sobre las estimaciones iniciales, más de 60 niñas, niños y adolescentes recibieron uno y más regalos que preparó Patricio Lazo, un vecino que se vino desde Santiago a vivir a la provincia.

Con la colaboración de amigos, vecinos y su familia reunió los presentes que entregó en una actividad en el mismo predio que ocupan los pobladores.

"Estuvo todo bien bonito, resultó muy bien. Así es que estoy muy contento", resumió el vecino sobre la actividad.

Apoyo

En dos camionetas y un auto trasladó los regalos, custodiado por Seguridad Ciudadana de El Tabo, en el primer tramo del recorrido. "Nos dejó en la iglesia de San Sebastián, donde nos estaba esperando un móvil de Cartagena, que nos escoltó hasta el mismo lugar", relató.

Unas 90 familias de las 140 que viven en la toma participaron. "Entregamos todos los regalos. Al principio eran 52, pero después me llamaron y quedaron unos niños afuera. Me llamaron el viernes y eran 63 niños. Busqué hasta que conseguí los regalos que faltaban. Todos recibieron y quedaron contentos", contó.

Patricio Lazo fue acompañado por dos vecinos, Claudio y Catherine. "Los invité, los presenté en la comunidad. Fueron con sus dos niñas, querían que vieran que no es fácil recibir un regalo, como ellas lo recibirán. Quería que aprendieran para tener un espíritu social".

La dirigenta del asentamiento, Patricia Avilés, destacó el aporte de Patricio Lazo, ya que contó que "hace cinco años que me está ayudando, primero en la Camino a la Esperanza" y afirmó que "los niños estaban felices, se les arrendó un juego, salió todo bien. Misión cumplida".

Patricia Avilés inició en 2019, durante el estallido, la toma Camino a la Esperanza, junto a su hermana María Isabel, quien falleció de cáncer en septiembre del año pasado. "Cuando estaba internada en el hospital Pereira de Valparaíso, ella me dijo que tenía que luchar por las tomas, eso es lo que estoy haciendo". Luego colaboró con la instalación de la "Frente al Mar", hace cuatro años.

"Estuvo todo bien bonito, resultó muy bien. Así es que estoy muy contento",

Patricio Lazo.

63 pequeños de la comunidad recibieron regalos en la Navidad anticipada.

En una ceremonia realizada en el patio y la biblioteca de la Escuela Villa Las Dunas, se inauguraron dos proyectos educativos que buscan fortalecer la convivencia escolar y rescatar la historia local: "Recuperando espacios para recreos más entretenidos" y "Memoria viva de la historia de la población Villa Las Dunas".

El primero de estos proyectos, impulsado por el Centro de Estudiantes, tiene como objetivo mejorar los espacios escolares para favorecer la interacción, la comunicación y el aprendizaje durante los recreos.

Las acciones concretas incluyeron la implementación de una biblioteca móvil con nuevos libros, la instalación de un jardín vertical, la adquisición de juegos de mesa y un parlante.

Estas demandas fueron priorizadas por los propios estudiantes, quienes destacaron la importancia de contar con actividades que promuevan la participación y la inclusión en los tiempos de descanso.

El segundo proyecto, liderado por la profesora Laura Messina junto al taller de periodismo, consistió en la grabación de un micro documental que retrata la historia de la población Villa Las Dunas.

El material audiovisual recoge testimonios de vecinos y vecinas que han sido protagonistas del desarrollo de este emblemático barrio, conectando a las nuevas generaciones con la memoria viva del lugar. La iniciativa busca rescatar el rol activo de las personas mayores en la construcción de la comunidad y destacar sus experiencias como fuente de conocimiento y progreso social.

Laura Messina, profesora de la escuela, destacó la importancia de ambos proyectos señalando que "siempre uno quiere llevar a cabo las ideas que los chiquillos van creando. Agradezco a la Fundación Siglo XXI por el respaldo. Los recreos ahora son espacios de lectura, juegos y cuidado de la naturaleza. Además, el taller de periodismo permitió a los estudiantes conocer y valorar el entorno que habitamos aquí en las Dunas".